Sin nieve no hay negocio

¡°?Va a hacer alg¨²n pedido?¡±, pregunta un distribuidor de refrescos a Justa Hern¨¢ndez, la due?a del restaurante Barondillo. ¡°No, porque este fin de semana no habr¨¢ nadie¡±, contesta Hern¨¢ndez. ¡°Quiz¨¢ nieve el domingo¡±, le replica el surtidor. ¡°A ver si es verdad y cae un buen nevazo, que es lo que necesitamos¡±, sentencia la hostelera.

Esta conversaci¨®n tuvo lugar el pasado viernes en el municipio madrile?o de Rascafr¨ªa, pero se repite en cualquier punto de la sierra de Guadarrama, tanto en las estaciones de esqu¨ª como en los pueblos aleda?os a las mismas. El negocio de la nieve se est¨¢ viendo seriamente afectado por la ausencia de precipitaciones desde que empez¨® la temporada de invierno el pasado mes de diciembre. La estaci¨®n de esqu¨ª alpino del puerto de Navacerrada solamente ha podido abrir dos de las siete pistas que tiene, lo que le ha supuesto unas p¨¦rdidas econ¨®micas de un 40% con respecto a las mismas fechas de 2011. La Venta Arias, un restaurante a los pies de la estaci¨®n que tiene tambi¨¦n una escuela, una tienda y un alquiler de esqu¨ª, pierde 70.000 euros mensuales y ha tenido que reducir su plantilla. La estaci¨®n de Valdesqu¨ª ni siquiera ha abierto. Tampoco la de esqu¨ª de fondo de Navafr¨ªa, cuyas p¨¦rdidas se sit¨²an alrededor de los 80.000 euros. Y, cada d¨ªa con el cielo despejado, siguen contando.

El mi¨¦rcoles pasado, Valdesqu¨ª parec¨ªa una estaci¨®n fantasma. Ram¨ªrez miraba con resignaci¨®n a su alrededor: en las laderas no se ve¨ªa ni un ¨¢pice de blanco, los remolques estaban parados; los ca?ones de nieve artificial, sin funcionar; la cafeter¨ªa, vac¨ªa, y los esqu¨ªs brillaban por su ausencia. La afluencia media de un s¨¢bado de temporada con nieve ser¨ªa de 2.500 personas. Ahora, los ¨²nicos que pisan la tierra bald¨ªa son los nueve trabajadores de la plantilla, encargados de las tareas de mantenimiento y reparaci¨®n. ¡°No tener mucha nieve en los ¨²ltimos a?os es hasta normal, pero lo que es muy extra?o son las altas temperaturas que no permiten que la artificial se mantenga¡±, comenta Agust¨ªn Ram¨ªrez, director de la estaci¨®n, situada a unos 70 kil¨®metros de distancia de la capital.

La temperatura necesaria para producir nieve es -2,5? C, y la semana pasada la m¨ªnima en la sierra superaba los 0? C. ¡°El problema es que hay un anticicl¨®n de bloqueo asentado en el pa¨ªs desde el pasado 10 de diciembre, el cual impide la entrada de borrascas y frentes sobre la Pen¨ªnsula¡±, explica Ana Casals, delegada de la Aemet (Agencia Estatal de Meteorolog¨ªa) en Madrid. ¡°Ha sido un a?o muy seco; en la sierra cayeron 49,8 litros en diciembre cuando la media eran 176¡±.

Las temperaturas no son lo normal y ello se debe a un fen¨®meno de ¡°inversi¨®n t¨¦rmica¡±, es decir, hace m¨¢s calor en las zonas de monta?a que en la llanura, seg¨²n la meteor¨®loga. ¡°El pasado martes, por ejemplo, la m¨ªnima en Aranjuez fue de -5? C, mientras que en Navacerrada se lleg¨® a los +4? C¡±, comenta Casals. No se ha registrado una situaci¨®n tan seca en Espa?a desde el a?o 1988. Laura Pereda, presidenta del Club de Navacerrada Esqu¨ª, no recuerda haber visto una situaci¨®n similar. ¡°El negocio de la nieve nunca estuvo muy boyante, pero lo de este a?o es lamentable¡±, asegura Pereda.

Los esquiadores madrile?os se sienten muy frustrados por la situaci¨®n. La Federaci¨®n Madrile?a de Deportes de Invierno ha tenido que suspender tres competiciones de esqu¨ª y nadie les asegura que se puedan celebrar las previstas para los pr¨®ximos meses. ¡°Adem¨¢s, si no hay nieve la gente no se federa¡±, lamenta Felipe Aguirre, presidente de esta organizaci¨®n, que cuenta con unos 2.000 afiliados. ¡°De momento, hay una disminuci¨®n cercana al 30% con respecto a 2011, lo que demuestra cierta desafecci¨®n a la pr¨¢ctica del esqu¨ª en Madrid, sobre todo el competitivo¡±. Aguirre se queja de que los aficionados a los deportes de invierno de Madrid tengan que irse a otras regiones de Espa?a o Europa, donde, a pesar de la ausencia de precipitaciones, las estaciones garantizan al menos la presencia de nieve artificial.

De las siete pistas que hay en Navacerrada, por ahora solo dos est¨¢n abiertas al p¨²blico gracias a los ca?ones de nieve y son azules, es decir, de pendiente media. En opini¨®n de Aurora Guerra, directora financiera de la estaci¨®n, con estas pistas el esquiador experto no se queda totalmente satisfecho. Por este motivo y gracias a la bajada de temperaturas, la estaci¨®n activ¨® ayer los ca?ones en la del Bosque, de pendiente fuerte. ¡°Como la estaci¨®n no est¨¢ al 100% de sus capacidades, hemos hecho un descuento de siete euros en el precio del forfait (tarjeta de acceso a todas las pistas y remontes abiertos con seguro de accidentes cuyo coste oscila entre los 20 y 30 euros) tanto para adultos como para peque?os¡±.

Sin nieve, no hay trabajo. Lo saben muy bien los habitantes de Rascafr¨ªa, una localidad situada en la sierra de Guadarrama, pr¨®xima a Valdesqu¨ª. Tambi¨¦n sus vecinos de Lozoya o los de Navacerrada, entre otros pueblos aleda?os. La ¨²nica monta?a de la sierra que tiene algo de nieve en su cumbre es Pe?alara, a 2.428 metros de altitud. Estos municipios ve¨ªan c¨®mo cada temporada de invierno los restaurantes y hoteles estaban repletos de turistas, aunque en los ¨²ltimos cuatro a?os tambi¨¦n se ha notado la crisis. El pasado viernes, en cambio, no hab¨ªa ni rastro de visitantes por las calles de Rascafr¨ªa. ¡°Aunque los esquiadores madrile?os suben a la sierra y se vuelven a casa, nosotros hac¨ªamos negocio con las familias que ven¨ªan a pisar la nieve con los ni?os¡±, relata Justa Hern¨¢ndez, due?a del restaurante y hotel rural Barondillo.

Pero no solo sufre la hosteler¨ªa, sino tambi¨¦n los comercios y los parados del pueblo. ¡°M¨¢s de un centenar de trabajadores temporales de la estaci¨®n son de Rascafr¨ªa y ahora se encuentran sin trabajo, a la espera de que el tiempo cambie¡±, argumenta Ana Garc¨ªa Masedo, alcaldesa del municipio. Es el caso de Mar¨ªa del Mar Ferreras, una soltera de 43 a?os y madre de tres hijos que trabajaba en la cafeter¨ªa de la estaci¨®n. Sentada en uno de los bancos de la c¨¦ntrica Plaza de la Villa, mira al cielo y se indigna: ¡°Estoy desesperada. Es incre¨ªble que no haya ca¨ªdo ni un copo de nieve¡±.

Enclavado en el valle alto del r¨ªo Lozoya, el paisaje de Rascafr¨ªa estos d¨ªas de enero nada tiene que ver con la estampa navide?a a la que est¨¢n acostumbrados. Como Ferreras, Vanesa Garc¨ªa, de 28 a?os, tambi¨¦n viv¨ªa de lo que ganaba en la temporada. Aunque la Aemet pronostica nevadas para hoy y ma?ana en la sierra, la joven se muestra pesimista: ¡°Si no ha nevado cuando lo ten¨ªa que hacer, entre diciembre y enero, poco se puede esperar ya¡±.

En la carnicer¨ªa Granero, Benito Aguirre, uno de sus due?os, cuenta a sus clientas que, como proveedores de carne de la cafeter¨ªa de la estaci¨®n, est¨¢n perdiendo una facturaci¨®n de 10.000 euros este invierno. ¡°Hicieron un pedido para diciembre y ah¨ª est¨¢, parado en las c¨¢maras frigor¨ªficas¡±, lamenta. Qui¨¦n sabe, quiz¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas esa carne se pueda servir en el comedor de Valdesqu¨ª. Pero si se cumplen las predicciones meteorol¨®gicas y el martes vuelve el anticicl¨®n, Abel P¨¦rez y Blanca M¨¢rquez, una pareja de senderistas residente en la capital, lo tiene claro: ¡°Si no hay nieve, subiremos a caminar. Lo importante es disfrutar de la sierra de Madrid¡±.