Uno de cada cuatro parados gallegos est¨¢ en la comarca de Vigo

No encontrar¨¢ sangre en este art¨ªculo pero va a leer el retrato de un enorme drama. Para ser exactos, 31.759 dramas en Vigo sumados a los 3.112 de Cangas, 2.969 de Ponteareas, 2.919 de Redondela, 1.207 de Baiona, y as¨ª hasta rozar los 56.000 en la comarca. Son los parados del ¨¢rea metropolitana, el hinterland industrial que siempre presumi¨® de ser el motor econ¨®mico de Galicia, con el puerto m¨¢s din¨¢mico, que sufre como ninguna otra ciudad la crudeza de la recesi¨®n.

La crisis reserva a Vigo el triste honor de encabezar la lista negra del desempleo en la comunidad. Ha dado un salto gigantesco hacia ninguna parte: en los ¨²ltimos seis a?os el paro ha crecido un nada envidiable 40%. Los beneficios de las empresas se han desplomado y referentes empresariales como los astilleros (Vulcano, Barreras), ambos en suspensi¨®n de pagos, suman deudas de 270 millones, casi medio punto del PIB gallego.

Uno de cada cuatro expulsados del mercado laboral gallego est¨¢ apuntado en alguna de las oficinas del Servicio Galego de Colocaci¨®n de Vigo o su entorno. Las calles se van quedando poco a poco desiertas de comercios; los astilleros, sin pedidos; la construcci¨®n residencial directamente no existe y el sector servicios recibe las migajas del consumo que son capaces de generar los que tienen el sueldo asegurado. Pero son pocos en una ciudad que nunca se ha caracterizado, al contrario que Santiago, Pontevedra o A Coru?a, por tener una nutrida n¨®mina de funcionarios.

La caja de ahorros, propietaria de los edificios m¨¢s emblem¨¢ticos del centro y en otro tiempo benefactora de la Universidad, est¨¢ preparando un duro plan de ajuste en su obra social que se ha comenzado a notar en multitud de peque?as cosas. El sector granitero, otrora ejemplo de dinamismo por las exportaciones, tiene cerrado el mercado nacional y s¨ª, exporta m¨¢s, pero a costa de bajar precios.

El 33% de los nuevos parados pertenecen a la comarca viguesa

¡°Estamos dando ofertas de entre el 50% y el 80% y no vemos movimiento¡±, lamenta Encarna ?lvarez, la presidenta de la Federaci¨®n de Comerciantes de Vigo. Habla de las rebajas, que pasan sin pena ni gloria esta fr¨ªa temporada. Mar¨ªa Berdiales, una calle de las m¨¢s c¨¦ntricas (a un paso de la emblem¨¢tica Calle del Pr¨ªncipe) tiene el 70% de los locales en alquiler. Ni siquiera los turistas extranjeros que aterrizan desde los transatl¨¢nticos se quedan a comer en alguno de los restaurantes del casco hist¨®rico. No les compensa, tienen el men¨² gratis a bordo. ¡°Hay que pensar que hace tres a?os hab¨ªa 12.000 trabajadores del naval que cobraban a fin de mes y consum¨ªan. Ahora somos la segunda provincia de Espa?a con m¨¢s ERES¡±, analiza el secretario comarcal de UGT, Antonio Juste.

Los ¨²ltimos datos de la Encuesta de Poblaci¨®n Activa que el Instituto Nacional de Estad¨ªstica public¨® el viernes son un nuevo tiro en el pie. El 33% de los nuevos parados gallegos pertenecen a la comarca viguesa. Y como ocurre en el conjunto de Espa?a, aqu¨ª se reproducen las diferencias entre el norte y el sur. A Coru?a tiene una tasa de paro del 16%, Lugo, de solo el 12% mientras que en Ourense roza el 20% y en Vigo alcanza al 22,9% de la poblaci¨®n activa. El ¨²nico consuelo, si se le puede llamar as¨ª, es que otras comunidades est¨¢n mucho peor: en Andaluc¨ªa y Canarias el desempleo ha pulverizado cualquier marca, con cotas del 30%. Y sigue subiendo.

¡°Vamos a tener que poner el letrero de ¡®ciudad cerrada¡±, ironiza Seraf¨ªn Otero, de CIG. El sindicato, que esta semana protagoniz¨® la en¨¦sima protesta por la situaci¨®n de los astilleros, calcula que 4.600 personas se quedaron sin trabajo en la ciudad durante el ¨²ltimo trimestre del a?o pasado. La provincia es la que m¨¢s hogares tiene de Galicia con todos sus miembros en esta situaci¨®n. De los ¨²ltimos 10.000 hogares que no reciben ning¨²n ingreso m¨¢s all¨¢ de la ayuda asistencial, casi 8.200 est¨¢n en Pontevedra.

En resumen, las cosas no pueden estar m¨¢s negras. ¡°?De qu¨¦ va a vivir Vigo sin Barreras ni Vulcano?¡± reflexiona un empresario. Por ahora no hay malas noticias de Citro?n, a pesar de que el 80% de su producci¨®n se exporta al resto de Europa, donde los ciudadanos no tienen entre sus primeras prioridades cambiar de coche. ¡°Al menos est¨¢n haciendo una buena gesti¨®n de esta crisis¡±, se?ala Juste. Lo dice con un ojo puesto en los astilleros, una grillera donde arrecian las cr¨ªticas y las sospechas de que ha habido mala gesti¨®n. Claro que en los buenos momentos, cuando los grandes buques off-shore se contrataban por parejas, a nadie parec¨ªa preocuparle c¨®mo iban las cuentas.

¡°La ¨²nica posibilidad de recuperaci¨®n a corto plazo es la construcci¨®n¡±. El presidente de la Asociaci¨®n Gallega de Promotores, Javier Garrido, pone un ejemplo: ¡°Cada vivienda aporta 4,3 empleos. Con 4.000 viviendas que se inicien tendr¨ªamos 17.200 parados menos¡±. Suena a las cuentas de la vieja. Para otros lo que hay que hacer es centrarse en salvar el naval porque ¡°simplemente, no hay alternativa¡±, dice el diputado del BNG Henrique Vieites.