Hip¨®tesis de Madrid
La alcaldesa asegur¨® que este ser¨¢ el mandato del Plan de Ordenaci¨®n Urbana y convoc¨® a los ciudadanos a participar Recogemos el ofrecimiento e invitamos a cinco arquitectos a pensar la ciudad del futuro
Lo dijo la propia alcaldesa en su discurso de investidura el pasado 27 de diciembre: ¡°Esta va a ser la legislatura del Plan General de Ordenaci¨®n Urbana. Mi objetivo es que est¨¦ redactado al culminar la legislatura. Me gustar¨ªa que todos los madrile?os se sintieran convocados a este proyecto. El Plan General tiene que ser un gran instrumento de participaci¨®n y di¨¢logo, de modernizaci¨®n y dinamismo. Un gran instrumento que nos permita crear las bases del Madrid del siglo XXI¡±. Aceptando la invitaci¨®n de la alcaldesa, EL PA?S ha pedido a cinco arquitectos y urbanistas de prestigio que expongan c¨®mo deber¨ªa actuarse para construir el Madrid del futuro. La ¨¦poca de las grandes construcciones ha terminado. Pero la crisis, coinciden todos, no tiene por qu¨¦ ser freno para abordar lo m¨¢s necesario.
ANDR?S JAQUE: Construir lo m¨ªnimo
¡°Hay que mejorar la experiencia diaria de la ciudad. En las ¨²ltimas d¨¦cadas se ha consolidado en Madrid una constelaci¨®n de parques de calidad, pero la experiencia de la ciudad es din¨¢mica, y tan importante como los parques es c¨®mo se conectan entre s¨ª. La prioridad es, cambiando lo m¨ªnimo, habilitar corredores de alta calidad medioambiental que conecten el parque Juan Carlos I con el Juan Pablo II, con el parque Tierno Galv¨¢n, con el parque de la Gavia, el parque de la Fuente del Berro, El Retiro, Sabatini, Madrid R¨ªo, Usera, la Casa de Campo, el Pardo, el parque del Oeste, la Ciudad Universitaria, la Dehesa de la Villa y el parque de Villa Rosa. En esos corredores deben habilitarse recorridos para bicicletas y peatones, pero tambi¨¦n integrar los servicios p¨²blicos y el acceso a las instituciones culturales.
Madrid sigue siendo una ciudad con un centro muy activo y una extensa periferia poco articulada. El reto es c¨®mo convertirnos en una ciudad polic¨¦ntrica en la que cada barrio tenga sus oportunidades de interacci¨®n social. Ser¨ªa estupendo poder detectar los lugares que ahora tienen ¨¦xito de convocatoria, como mercados de barrio, salida de los colegios, centros m¨¦dicos, y agrupar ah¨ª nuevos usos complementarios (guarder¨ªas, centros de d¨ªa para mayores, locales de ensayo para m¨²sicos j¨®venes). Muchas veces no hace falta habilitar nuevos espacios, sino jugar con los tiempos. ?Por qu¨¦ no usar los pasillos de los mercados, una vez que hayan cerrado sus puestos, como aulas de formaci¨®n profesional para adultos?
Cinco voces
- Andres Jaque (Mdrid 1971) ha acudido a la bienal de Venecia 2010 y a Gwangju 2011, invitado por Ai Wei Wei.
- Luis Fern¨¢ndez-Galiano (Calatayud, 1950) dirige la revista Arquitectura Viva y es acad¨¦mico de Bellas Artes.
- Sol Madridejos (Madrid, 1958). Dos veces Premio de Urbanismo del COAM y del Ayuntamiento de Madrid. Su obra se ha expuesto en bienales y en el MoMa de Nueva York.
- Jos¨¦ Mar¨ªa Ezquiaga (Madrid, 1957) es Premio Nacional de Urbanismo y dirige el plan de ampliaci¨®n de la Castellana.
- Basurama. Colectivo dedicado a la investigaci¨®n y gesti¨®n cultural desde 2001.
Y, por ¨²ltimo, en un contexto de crisis, el dise?o de la ciudad tiene que fomentar la actividad econ¨®mica. Es momento de inventar espacios para una actividad econ¨®mica de escala micro. Y en esto hay que ser inventivos y facilitar el trabajo de gente con ganas de comprometerse en peque?os negocios, como business centers en espacios residuales de estaciones de Metro¡±.
LUIS FERN?NDEZ-GALIANO: Ciudad, s¨ª; urbanizaci¨®n, no
¡°Hay que apostar por la ciudad compacta y densa frente a la ciudad dispersa. Necesitamos m¨¢s densidad, abandonar el modelo de urbanizaciones con chal¨¦s lejanos a los que hay que llegar con veh¨ªculo privado y regresar a los barrios densos, como los del centro, que permiten una ciudad m¨¢s ecol¨®gica. Es una barbaridad la ordenanza de la Comunidad de Madrid que solo permite en el Vicente Calder¨®n y la f¨¢brica Mahou hacer casas de tres plantas y media y una buhardilla. Este modelo es profundamente enemigo de la sostenibilidad. Edificios m¨¢s juntos no quiere decir m¨¢s altos. La densidad del ensanche tradicional, como el barrio de Salamanca o el de Barcelona, es esencialmente buena. Y defender la ciudad jard¨ªn y dispersa por ser verde es un error absoluto porque es m¨¢s costosa en infraestructuras, en mantenimiento, transporte, gasolina, calefacci¨®n... La densidad es sostenible y el cemento es m¨¢s ecol¨®gico que el jard¨ªn.
Adem¨¢s, ahora es el momento de atender a lo peque?o, que da mucho m¨¢s trabajo a la gente que las grandes realizaciones. En estos tiempos hay que dedicarse a tareas m¨¢s peque?as, como reparaciones y sustituciones de lo que existe con una puesta al d¨ªa de una ciudad que tenemos cuajada en su forma. Por ejemplo, en Prado-Recoletos, quitar un carril es suficiente para dar dignidad a esa zona. Y hay que apostar por un urbanismo de sustracci¨®n, eliminar todo lo que sobra en las aceras atiborradas de se?ales, quioscos, pantallas y elementos in¨²tiles. Hacer un urbanismo m¨¢s digno. Delante del Museo Municipal han colocado una reja reduciendo el espacio p¨²blico de la calle de Fuencarral que no deja ver la gran fachada. Son an¨¦cdotas ciudadanas, pero abord¨¢ndolas se podr¨¢ conseguir una ciudad m¨¢s limpia y amable.
SOL MADRIDEJOS: Sacarle partido a lo que tenemos
¡°En la etapa anterior se hicieron operaciones muy audaces y mod¨¦licas como la de Madrid-R¨ªo, pero queda mucho por hacer. Se debe apostar por la rehabilitaci¨®n no solo de edificios, sino de espacios urbanos, y barrios como el de Tetu¨¢n. Tambi¨¦n en Azca, donde hay mala utilizaci¨®n del espacio p¨²blico. En Madrid hay poca cultura de los espacios libres como parques, jardines, plazas. No se valoran como lo hacen en Barcelona o San Sebasti¨¢n. No se les contempla como a otras edificaciones para las que hacen concursos p¨²blicos. No se trata solo de construir, sino de cuidarlos y valorarlos.
Y revisar el cat¨¢logo de edificios protegidos. No proteger porque s¨ª, sino incluir edificios del siglo XX de gran valor arquitect¨®nico, como la torre del BBVA, de S¨¢enz de Oiza, o la de Catalana Occidente, de Rafael de la Hoz¡±.
JOS? MAR?A EZQUIAGA: Fortalezas y debilidades de Madrid
¡°Hay que empezar por reflexionar sobre las fortalezas y debilidades de la ciudad. Entre las primeras: la calidad de vida a pesar de todo, el peso de su historia, el valor del espacio p¨²blico y su car¨¢cter abierto y cosmopolita. Las debilidades: el modelo de dispersi¨®n territorial debilita las actividades en el centro; las familias de mayor renta buscan espacios en la ciudad jard¨ªn y las de menor, en el ¨¢rea metropolitana.
La revisi¨®n del plan tendr¨ªa que girar en torno a algunos principios: m¨¢s transparente y sencillo; dar m¨¢s voz a los ciudadanos y confiar en los colectivos de vecinos la gesti¨®n de los equipamientos p¨²blicos, como en Tabacalera; desburocratizar el proceso de concesi¨®n de licencias. Esto exige tambi¨¦n una radical reducci¨®n de normas. Dejar espacios m¨¢s abiertos a otros usos, como lugares de innovaci¨®n donde quepan m¨¢s alternativas. Por ejemplo, al final de M¨¦ndez ?lvaro o en el entorno del r¨ªo, donde hay solares vac¨ªos.
Cada vez es m¨¢s importante el microurbanismo, que no solo sean objeto del plan las grandes operaciones urban¨ªsticas: lo peque?o tambi¨¦n es hermoso. Y hay que permitir a la gente implicarse. Todo esto es muy dif¨ªcil si no se coordinan el Ayuntamiento y la Comunidad, de tal forma que se puedan acercar a la ciudad la Sierra y los regad¨ªos del Tajo, por ejemplo, que tambi¨¦n son espacios verdes de Madrid.
En cuanto al Centro, hay que potenciar el espacio p¨²blico, recuperar espacios para el ciudadano y reducir los del autom¨®vil. Reverdecer la ciudad con corredores del centro al R¨ªo, reciclaje de ¨¢reas deterioradas, como Tetu¨¢n o Lavapi¨¦s. Y transformar otros espacios para distintos usos, como la Colina de los Chopos (Residencia de Estudiantes), los solares vac¨ªos de Madrid-R¨ªo o la Ciudad Universitaria. Tambi¨¦n se pueden organizar ejes tem¨¢ticos: Gran V¨ªa-Prado-Matadero, Bail¨¦n-Atocha.
Y las nuevas urbanizaciones deber¨ªan ser objeto de un replanteamiento m¨¢s radical y ocupar menos suelo para edificar. Si en un PAU caben 10.000 viviendas, que quepan las mismas en 60 hect¨¢reas porque, a m¨¢s densidad, menos coste y m¨¢s espacio p¨²blico. Y hacen falta m¨¢s tipos de vivienda y tama?os, no solo la t¨ªpica de tres dormitorios, y tambi¨¦n que en los pisos pueda haber un centro cultural, un gimnasio¡¡±.
BASURAMA (Juan L¨®pez Aranguren): Autogesti¨®n y responsabilidad ciudadana
¡°Las ciudades tienen que tomar la responsabilidad y ponerse las pilas. Se deben crear lugares donde pueda construirse ciudad de forma que cualquier ciudadano, colectivo o agrupaci¨®n pueda plantar ¨¢rboles, poner un banco o una cancha de baloncesto. Por ejemplo, en las naves de Matadero que est¨¢n vac¨ªas, en las naves industriales de las afueras o en los bajos comerciales. Hay mucha gente con ganas y capacidad de hacer cosas. Un ejemplo: abrir una oficina gratuita de arquitectos para orientar, como hacen durante el festival M3 de Barcelona. O un colectivo de arquitectos y alba?iles que te ayude a construir. Son proyectos de autogesti¨®n para los que se necesita un marco de libertad y herramientas, no trabajos en una biblioteca que es una tomadura de pelo. El arquitecto ya no produce pensamiento ni cr¨ªtica sobre lo que produce. Por eso, en lugar de heredar proyectos urbanos, que los propongan, y el Ayuntamiento d¨¦ las facilidades. Ser¨ªa m¨¢s barato y m¨¢s ajustado a lo que se necesita.
Por otro lado, hay que dejar de hacer viviendas y recuperar las vac¨ªas. El primer problema es legal, que hace que a los propietarios les sea m¨¢s rentable tenerla vac¨ªa que alquilarla. Por eso habr¨ªa que penalizar las viviendas vac¨ªas. Y debe haber ofertas de vivienda para desplazamientos r¨¢pidos, para la mucha gente que se desplaza y no puede comprometerse a tener una vivienda fija.
En cuanto a movilidad, no est¨¢ bien enfocada. No consiste en montar un carril-bici, sino en fomentar desde la Administraci¨®n su uso como medio de transporte, montar rutas de casa al trabajo, cursos, talleres de arreglos de bici¡ Y todo se puede hacer con muy pocos recursos, con el dinero de un fasto se podr¨ªa montar la ciudad. Alguna ya cuenta con rutas de calles tranquilas. El soterramiento de la M-30 solo ha favorecido al coche privado. En Sol, con una l¨ªnea de Cercan¨ªas y el Metro, solo se fomenta la centralidad, en lugar de hacerlo en otros puntos. No se puede reducir todo al kil¨®metro 0. En la periferia, como Vallecas, Lavapi¨¦s o Tetu¨¢n, no hay nada, solo intentos de conectarlos con el centro y hay que hacer de esos barrios un centro atractivo. Lo mismo pasa con los PAUS, que no han generado vida propia y cada vez son menos sostenibles.
Y Madrid 2020 se har¨¢ en una ciudad ya esquilmada, un macroevento deportivo en una ciudad en quiebra. Estas pol¨ªticas consumen muchos recursos que paga el ciudadano y aportan muy poco. Hay que cambiar el modelo, en lugar de un evento enorme apostar por otros m¨¢s locales. Por ejemplo, el 15-M, que al ocupar Sol gener¨® una llamada de atenci¨®n enorme y despu¨¦s ir a los barrios a producir.
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