Los infiernos y para¨ªsos de Dal¨ª
Novacaixagalicia expone en Ferrol los 100 grabados con los que el genio ilustr¨® ¡®La Divina Comedia¡¯
Infierno, purgatorio y para¨ªso. Salvador Dal¨ª recre¨® con sus pinceles el viaje al averno que Dante Alighieri hab¨ªa dibujado con palabras siete siglos antes en la La Divina Comedia. El resultado son 100 grabados que se columpian entre el clasicismo grecorromano, los escorzos barrocos y el surrealismo salvaje y que desde ayer por la tarde cuelgan en las paredes del segundo piso de la fundaci¨®n cultural de Novacaixagalicia en Ferrol. Son parte de los fondos de la colecci¨®n que Caixanova llev¨® en 2007 a la Freedom Tower de Miami y que itiner¨® por las sedes culturales del sur de Galicia antes de la fusi¨®n.
?Dal¨ª (Figueres, 1904-1989) condens¨® todo su universo art¨ªstico de filias y fobias en 34 acuarelas infernales, otras 33 del purgatorio y 33 m¨¢s de un para¨ªso que tienen la forma de Gala, su musa y esposa, reconvertida en un ¨¢ngel que suplanta a Beatriz, a quien Dante idolatraba en sus poemas. ¡°Dal¨ª baj¨® al infierno con sus demonios y todas sus obsesiones est¨¢n aqu¨ª: las formas blandas, el deseo sexual y la muerte¡±, explica Paloma Vela, responsable de Artes Pl¨¢sticas de Novacaixagalicia.
La m¨¢s recurrente de sus fijaciones, sexo=muerte, est¨¢ concentrada en la anamorfosis de una calavera (Canto 14 del Infierno, en La Divina Comedia) que parece derretirse sobre la tierra. Reblandecer la materia fue la manera que encontr¨® para transformar lo real en irreal. Los dientes del cr¨¢neo son como las teclas del piano en el que su padre m¨¦dico sol¨ªa colocar un libro sobre enfermedades ven¨¦reas que marc¨® a Salvador Dal¨ª como hombre y como artista.
¡°En estos dibujos es habitual la genuflexi¨®n, la postura que el arc¨¢ngel Gabriel adopt¨® ante Mar¨ªa¡±, subraya Vela como ejemplo. Es la fecundaci¨®n sin contacto. La soluci¨®n ideal para Dal¨ª, que dec¨ªa detestar el sexo. No es la ¨²nica de las obsesiones dalinianas que se repiten en su particular versi¨®n ilustrada de la inmortal obra de Dante. Tambi¨¦n recurre al gran masturbador, las hormigas, las muletas (impotencia), rasga la piel de unas figuras repletas de cajones (subconsciente) y les coloca piedras sobre la cabeza para que sientan el peso de la conciencia.
Las obras est¨¢n ordenadas como los cap¨ªtulos del libro inmortal de Dante
La historia de los grabados tiene detr¨¢s un trasfondo sociopol¨ªtico que, una vez m¨¢s, coloc¨® al artista catal¨¢n en el centro de pol¨¦mica entre izquierdas y derechas ideol¨®gicas que era ajena al arte. Las ilustraciones fueron un encargo del Gobierno italiano para adornar una edici¨®n de lujo de la celeb¨¦rrima obra de Dante que iba a publicarse en 1965 para conmemorar el 700 aniversario de su nacimiento en Florencia.
Dal¨ª pint¨® en pocos meses 100 acuarelas que luego transform¨® en grabados para que pudieran reproducirse mec¨¢nicamente. Sin embargo, el trabajo encendi¨® una agria pol¨¦mica entre los comunistas italianos, que se negaban a hacer de Dante un art¨ªculo de lujo, y los conservadores, disgustados porque el ilustrador de su poeta nacional fuera un catal¨¢n.
En resumen, cuenta Vela, Italia pag¨® un dineral a Dal¨ª por un encargo que no se public¨® de la forma que se hab¨ªa previsto. El pintor se llev¨® sus acuarelas a un taller parisino y de cada dibujo se fabricaron 35 planchas. En total, 3.500 tablillas para que cada xilograf¨ªa conservase la plasticidad que el artista exig¨ªa y que se public¨® en seis vol¨²menes entre 1960 y 1964.
Italia pag¨® un dineral por el encargo, que no lleg¨® a publicar
¡°Uno de los grandes m¨¦ritos de esta colecci¨®n es la t¨¦cnica porque logr¨® trasladar la textura de una acuarela a la madera¡±, explica la responsable de Artes Pl¨¢sticas de NCG, para subrayar que La Divina Comedia es el m¨¢ximo exponente de la obra de Dal¨ª como ilustrador. Polifac¨¦tico como pocos ¡ªpint¨®, esculpi¨®, trabaj¨® en cine y hasta dise?¨® escenograf¨ªas y vestuario de ¨®pera¡ª, el controvertido genio catal¨¢n encontr¨® en este encargo del Gobierno de Italia el contenedor ideal para hacer su particular exorcismo freudiano casi siempre sobre el paisaje de su casa del Ampurd¨¢n (Girona). ¡°Le dio la oportunidad de profundizar en sus demonios y reflexionar en voz alta a trav¨¦s de su arte¡±, reflexionan desde la fundaci¨®n.
Los 100 grabados, pintados a partir de 1959, est¨¢n ordenados como los cap¨ªtulos del libro que Dal¨ª accedi¨® a ilustrar y avanzan desde el averno negro y rojo hacia un para¨ªso colorido y luminoso. El genio del surrealismo, que para entonces ya hab¨ªa sido apartado del n¨²cleo fundacional del movimiento, quiso rendir tributo a sus maestros tal y como Dante hizo con Virgilio en su obra. Entre los dibujos ¡ªnumerados como cantos¡ª que se exhiben en Ferrol figura su personal homenaje a la t¨¦cnica del sfumato que ide¨® Leonardo da Vinci (canto 8), al Guernica de Picasso (canto 4), al Angelus de Millet (canto 23) e incluso a Goya y Vel¨¢zquez. La exposici¨®n, hasta el 3 de junio, incluye talleres para ni?os y visitas guiadas.
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