Michel¨ªn condenada por usar el amianto de forma irresponsable en Vitoria
Deber¨¢ indemnizar con 165.000 euros a la familia de una trabajador fallecido y a un recargo del prestaciones del 50%
En Michel¨ªn hab¨ªa amianto, lo hab¨ªa en toda su cadena de producci¨®n, aunque no se usara como componente de las ruedas, y adem¨¢s la multinacional francesa lo ha manipulado de manera irresponsable. Lo asegura la titular del Juzgado de lo social n¨²mero tres de Vitoria, Patricia Teresa Rodr¨ªguez, quien en consecuencia condena a la empresa, en uno de los fallos m¨¢s elevados de los que se conocen en Euskadi, a pagar 165.000 euros a los familiares de Francisco Javier Mart¨ªnez, empleado de la firma desde 1974 y que falleci¨® por un c¨¢ncer de pulm¨®n, un mesotelioma pleural, en 2008.
El fallo, al que se suma otro que condena adem¨¢s a Michel¨ªn a hacerse cargo de un recargo en las prestaciones del 50% por considerarle responsable plena de las causas que originaron su muerte, pone fin a la larga batalla de un enfermo contra su empresa ¡ªque han acabado sus familiares¡ª, pero, sobre todo, desvela la verdad de una firma que ha construido su defensa jur¨ªdica sobre una mentira que casi convenci¨® al Gobierno vasco y a la Inspecci¨®n de Trabajo. Francisco Mart¨ªnez perdi¨® la batalla contra el c¨¢ncer, ¡ªfalleci¨® un a?o despu¨¦s de diagnostic¨¢rselo¡ª pero le ha ganado la partida a una multinacional despu¨¦s de cinco a?os recorriendo los pasillos de los juzgados.
Una sentencia del TSJPV publicada por EL PA?S cambi¨® la investigaci¨®n
Michel¨ªn ocult¨® al Instituto vasco de Salud Laboral, Osalan, que hubiera amianto en sus instalaciones, para evitar hacerse cargo de los costes derivados de la declaraci¨®n de enfermedad profesional para uno de sus trabajadores, y casi le convenci¨®. De hecho Osalan emiti¨® un informe que remiti¨® a la Inspecci¨®n de Trabajo de ?lava el 8 de abril de 2008, en la que t¨¦cnicos y directivos de la empresa aseguraban que no ¡°ha habido exposici¨®n del trabajador al amianto porque ese producto no ha existido en la empresa¡±. En consecuencia la Inspecci¨®n de Trabajo concluy¨® su informe: ¡°No existe ning¨²n indicio a la luz de los datos expuestos que permita deducir un posible origen profesional de la enfermedad que sufre F. J. M.¡±. Caso cerrado. Al menos sobre el papel. Dos meses despu¨¦s Osalan reabri¨® la investigaci¨®n despu¨¦s de que EL PAIS publicara una sentencia del Tribunal Superior vasco de Justicia que aparentemente nada ten¨ªa que ver con el caso. En 1997 un trabajador de la empresa Montajes Eissen SA que hab¨ªa sido contratado por Michel¨ªn, se cay¨® de una m¨¢quina y reclam¨® a la multinacional francesa su responsabilidad por no proporcionarle medidas de seguridad. El TSJP sin quererlo, en 2006, cambio el curso de la investigaci¨®n del amianto en Michel¨ªn. En los hechos probados, y simplemente a t¨ªtulo descriptivo, para explicar lo que hac¨ªa el trabajador de Eissen en la planta de la multinacional en Vitoria, detalla que estaba sustituyendo mantas de amianto por otras de fibra de vidrio. Alguien estaba mintiendo.
Osalan reabri¨® la investigaci¨®n poco despu¨¦s de cerrar el caso
La revelaci¨®n dej¨® a Michel¨ªn en evidencia y provoc¨® que dos meses despu¨¦s, en junio de 2008 Osalan reabriera la investigaci¨®n hasta constatar la existencia de amianto en muchos puntos de la f¨¢brica y el uso intensivo que se hab¨ªa hecho en el pasado.
La Inspecci¨®n de Trabajo ratific¨® poco despu¨¦s el hallazgo y abri¨® la puerta a la consideraci¨®n de enfermedad profesional de Francisco Javier Mart¨ªnez. ¡°Michel¨ªn es responsable¡± y debe pagar, concluye la juez Patricia Teresa Rodr¨ªguez.
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