Los alcaldes y los diputados de M¨¢is Galiza permanecen en el BNG

El Bloque de los tres ¨²ltimos a?os sufr¨ªa varias escisiones de facto. La que enfrentaba a una direcci¨®n dominada por la UPG y compa?eros de viaje con el resto de corrientes internas era la m¨¢s llamativa. Pero ayer, la asamblea de M¨¢is Galiza permiti¨® visualizar que la principal fracci¨®n de la oposici¨®n al aparato tambi¨¦n se encontraba partida: pese a que el 69% de los participantes en la reuni¨®n optaron por abandonar el BNG, ni por lo menos 11 de los 12 alcaldes ni los cuatro diputados del Parlamento secundar¨¢n la resoluci¨®n. Emergi¨® la grieta entre la base y el poder institucional.

Los 316 votos que refrendaron la ruptura, defendida por Xo¨¢n Carlos Bascuas, toparon con 133 en contra ¡ªla alcaldesa de Tomi?o, Sandra Gonz¨¢lez, se encarg¨® de intentar convencer a los presentes de la necesidad de continuar en el Bloque¡ª y ocho abstenciones. ¡°Los protagonistas ya son otros¡±, se despidi¨® Carlos Aymerich, hasta ahora l¨ªder visible y motor de M¨¢is Galiza. El ex portavoz parlamentario hab¨ªa repetido en las ¨²ltimas semanas que ¨¦l, pasase lo que pasase en la asamblea de ayer en la Facultad de Econ¨®micas de Santiago, permanecer¨ªa en el BNG. Su despedida, sin embargo, no cort¨® ning¨²n lazo: ¡°Los puentes quedan tendidos. Hemos demostrado que en M¨¢is Galiza hacemos pol¨ªtica de otra manera. Nosotros seguiremos dentro del BNG trabajando por lo mismo que vosotros fuera¡±.

Fue la ¨²ltima vez que Aymerich se dirigi¨® a la afiliaci¨®n del partido que ¨¦l mismo hab¨ªa constituido para aglutinar en el interior del Bloque a los cr¨ªticos con el dominio de la Alternativa pola Unidade que nuclea la UPG. Detr¨¢s de ¨¦l, abandonaron la sala dos hist¨®ricos, Camilo Nogueira y Xes¨²s Veiga, tambi¨¦n partidarios de continuar dando la batalla dentro de la organizaci¨®n. ¡°\[En la Asemblea Nacional de Amio\] qued¨® conformado un BNG que no es lo que M¨¢is Galiza defend¨ªa, no es mi BNG¡±, argument¨® Sandra Gonz¨¢lez, ¡°a m¨ª tampoco me gusta y coincidir¨¦is conmigo que a muy pocos nos gusta el BNG. Pero tenemos que seguir trabajando para seguir cambi¨¢ndolo¡±. Esa tesis, a la que sumaron las intervenciones del propio Aymerich, de Veiga o del alcalde de Vimianzo, Manuel Antelo, no alcanz¨® para sumar a m¨¢s que a 133 de las 457 personas que votaron en la asamblea.

Porque enfrente estaba esa mayor¨ªa que consideraba que el BNG ha dejadado de ser ¡°la casa com¨²n de los nacionalistas¡±. Que critican una presunta deriva izquierdista en su discurso. Con todo, los contenidos pol¨ªticos de una escisi¨®n por la que abogaron, entre otros, el m¨²sico Nando Casal o exconcejales como Mar¨ªa M¨¦ndez (Vigo), Alexandre S¨¢nchez Vidal (Ourense) o Manuel Bello (Mes¨ªa), no resultan f¨¢ciles de distinguir de los que configuran los militantes que permanecen en el BNG. Pero una frase con la que Xo¨¢n Carlos Bascuas propuso su candidatura a secretario general de M¨¢is Galiza tal vez ayude a aclarar el conflicto: ¡°La ilusi¨®n con la que muchos comenzamos en pol¨ªtica ya no estaba all¨ª \[en el Bloque\]; os pido que esa ilusi¨®n est¨¦ viva y activa en el futuro¡±.

Los 200 sufragios que apoyaron la lista de Bascuas ¡ªnadie vot¨® en contra y hubo solo tres abstenciones: los que eligieron quedar en el Bloque ya se hab¨ªan marchado de la asamblea¡ª servir¨¢n ahora para constituir la direcci¨®n, compuesta por una Executiva Nacional y un Consello Pol¨ªtico Nacional, de un nuevo partido ¡°nacionalista, galleguista y de izquierda amplia¡±. ¡°No vamos a caminar hacia otras organizaciones, sino caminar con otras organizaciones¡±, advirti¨® Bascuas, antes de enviar un disimulado mensaje a los irmandi?os de Beiras, que los precedieron en su escisi¨®n del BNG: ¡°No vamos a caminar hacia un verbo florido ni hacia el mesianismo¡±.