La especial reivindicaci¨®n de la bondad en el nuevo libro de cuentos de Eugenia Rico
¡°Un cuento no puede ser regular o pasable; o es buen¨ªsimo o no es¡±, dice la autora
Ni?os perdidos en una guerra o sometidos a abusos, mujeres maltratadas y hombres violentos, amores esquivos, esperanzas, desolaciones, rencores, esp¨ªas, quimeras, animales y un gui?o a Poe ¡ª¡°el padre de todos nosotros¡±¡ª se suceden en los 12 relatos que la escritora Eugenia Rico ha reunido en su ¨²ltimo libro, El fin de la raza blanca (P¨¢ginas de Espuma). Se dividen en tres partes en un creciente descenso del Cielo al Infierno, en inverso homenaje a Dante y porque, ¡°como siempre, el Infierno suele ser el m¨¢s interesante de los lugares¡±. Un descenso, a?ade la autora, que es el mismo que ocurre en la mayor¨ªa de relaciones amorosas fracasadas.
Nacida en 1972 en Oviedo, pero tan sentimentalmente unida a Gij¨®n y a su mar que prefiere figurar como natural de esta ciudad en los propios paratextos de la edici¨®n, Rico plantea la colecci¨®n de relatos como una peculiar reivindicaci¨®n del bien. ¡°Mi libro es una defensa de la bondad, porque est¨¢ lleno de malvados¡±, comenta. ¡°Habla de la parte oscura, del mal, para reivindicar el bien. En los relatos me meto en la mente de los asesinos, de los pervertidos, para, frente a esa cierta imagen de prestigio de los malvados, mostrarlos como unos pobres seres desgraciados, nada glamurosos, terribles¡±, a?ade. Se sucede as¨ª una galer¨ªa de personajes perdidos y extra?os, ¡°seres que no encuentran su lugar en el mundo y por eso escogen el mal¡± o las oportunidades que la violencia les pone en su camino.
Autora de novelas galardonadas como La muerte blanca (Premio Azor¨ªn 2002) o El oto?o alem¨¢n (Ateneo de Sevilla 2006), Rico, quien reconoce tener ¡°muchos¡± relatos in¨¦ditos, defiende el cuento como uno de los principales retos para un escritor: ¡°El cuento es un tour de force para un autor. Un gran escritor de cuentos es un gran escritor y un gran escritor de novelas puede ser un gran embaucador¡±.
Pese a que en las mesas de novedades se sucedan con cierta regularidad las colecciones de relatos de un escritor o las antolog¨ªas que suman piezas de varios de ellos ¡ªen varias ha participado la autora asturiana¡ª, Rico defiende que deber¨ªa haber mayor auge del cuento en Espa?a. ¡°En cierto modo representa la literatura mucho m¨¢s pura¡±, sostiene. ¡°Un cuento nunca puede ser regular o pasable, bueno o malo; o es buen¨ªsimo o no es. Para poder ser buen cuentista te tienes que mover entre lo buen¨ªsimo y lo genial¡±, incide. El relato m¨¢s o menos breve ¡°exige una perfecci¨®n mucho m¨¢s alta; en cambio, las grandes novelas pueden estar llenas de imperfecci¨®n¡±, abunda.
Lamenta que escasee la motivaci¨®n para el escritor de relatos en Espa?a. ¡°Aparte de la oportunidad que puedas tener de publicar en un gran peri¨®dico [One way, una de las piezas de la docena ahora editada, se escribi¨® originalmente para EL PA?S] tienes poco est¨ªmulo¡±.
Desde hace cuatro a?os, la autora de Aunque seamos malditas tiene entre manos una novela sobre Venecia, una de las ciudades en las que ha residido y con la que mantiene esa relaci¨®n entre la atracci¨®n y la distancia que se guarda con los lugares que se aman. ¡°Va, pero podr¨ªa ir mejor¡±, reconoce.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.