Autogolpe en Sant Pau
Salud interviene el hospital por su d¨¦ficit pese a haber aprobado todas sus cuentas. Uno de los patrones que aval¨® el agujero es el jefe de gabinete de Boi Ruiz
La Generalitat aprob¨® en 2010 y 2011 las p¨¦rdidas de 18,3 millones de euros del hospital de Sant Pau que el pasado lunes utiliz¨® el Gobierno catal¨¢n para justificar la intervenci¨®n del centro y el despido de su gerente, Jordi Varela. El aval de la Generalitat a las cuentas del centro se hab¨ªa concretado a trav¨¦s de la mayor¨ªa de representantes que el Gobierno catal¨¢n tiene en el patronato de la fundaci¨®n que gestiona el hospital, donde controla tres de las cinco sillas del patronato. Las otras dos representan al Ayuntamiento y al Arzobispado de Barcelona.
El patronato es el responsable de supervisar peri¨®dicamente las cuentas del centro, as¨ª como las medidas que plantea aplicar la gerencia. ¡°A trav¨¦s del patronato, la Generalitat ha controlado mes a mes las cuentas¡±, destac¨® a este diario el ya exgerente Jordi Varela, que rechaz¨® realizar m¨¢s declaraciones. ¡°La Generalitat se ha intervenido a s¨ª misma¡±, ilustra sorprendido el responsable de sanidad del PSC, Josep Maria Sabat¨¦, ¡°porque ha controlado en todo momento las cuentas de Sant Pau¡±.
El Gobierno catal¨¢n, por su parte, no ha ofrecido su versi¨®n, pese a que este peri¨®dico se lo ha solicitado desde el pasado jueves. Varela fue nombrado director de Sant Pau en 2004 por el primer Gobierno del tripartito y sustituy¨® en el cargo a Josep Anton Grau, que ahora vuelve a estar vinculado a la fundaci¨®n patrimonial de Sant Pau como representante designado por el alcalde, Xavier Trias.
Varela, el gerente despedido, fue nombrado por el tripartito en 2004
Los tres representantes de la Generalitat en el patronato de la fundaci¨®n gestora de Sant Pau son Jaume Tort, tambi¨¦n jefe del gabinete de Boi Ruiz en el Departamento de Salud; Jaume Estany, coordinador general de la Corporaci¨®n Sanitaria de Barcelona, y Albert Folia, auditor nombrado en 2010 precisamente para controlar las cuentas de Sant Pau.
¡°La Generalitat conoc¨ªa el d¨¦ficit porque el patronato ha aprobado las cuentas de cada ejercicio a trav¨¦s de reuniones mensuales¡±, admite un portavoz del propio hospital. ¡°La Generalitat ya controlaba el Sant Pau; esta intervenci¨®n no tiene sentido¡±, insiste un portavoz del comit¨¦ de empresa del centro. ¡°En todo caso, deber¨ªa exigir una explicaci¨®n a sus representantes en el patronato¡±,
Sara Jaurrieta (PSC), patrona por el Ayuntamiento de Barcelona hasta 2010, admite que el ¨®rgano de gobierno del hospital aprob¨® cuentas deficitarias, pero justifica: ¡°Estos se deben a los recortes brutales e inaplicables aplicados por el consejero Boi Ruiz, de hasta 26 millones en un a?o¡±. ¡°Mi misi¨®n como patrona es supervisar las cuentas, pero tambi¨¦n velar por la calidad de los servicios asistenciales y la equidad de su acceso por los ciudadanos¡±, se defiende la edil socialista.
Las p¨¦rdidas reales del centro podr¨ªan alcanzar los 30 millones de euros
El hospital queda ahora en manos de tres miembros del Departamento de Salud y otros tres del de Econom¨ªa. ¡°Seg¨²n los datos de que dispone la Generalitat, las cuentas del Sant Pau de 2011 se hallan en situaci¨®n de desequilibrio econ¨®mico¡±, justific¨® el Gobierno catal¨¢n en un comunicado emitido el pasado lunes. En 2010, las p¨¦rdidas ascendieron a 8,7 millones y a 9,6 en 2011.
Al haber aprobado este d¨¦ficit, los patronos tambi¨¦n han incumplido el compromiso que la fundaci¨®n gestora mantiene con el Gobierno catal¨¢n para ¡°mantener el equilibrio patrimonial y controlar el gasto¡±, como detalla la memoria de Sant Pau de 2009. Este compromiso deriva del plan de salvamento que el antiguo Gobierno de la Generalitat aplic¨® a partir de 2007 para sanear el centro, que acumulaba un d¨¦ficit de cerca de 250 millones desde la d¨¦cada de 1970. La Generalitat solicit¨® un gran cr¨¦dito por ese importe. Como contraprestaci¨®n, el hospital quedaba obligado a no incurrir en nuevas p¨¦rdidas y aplicar pol¨ªticas de austeridad.
El agujero de 18,3 millones deber¨ªa elevarse hasta 30 porque el hospital no ha provisionado en los dos ¨²ltimos a?os las demandas judiciales interpuestas por los trabajadores contra el centro, como obliga a hacerlo la normativa de contabilidad cuando existe un riesgo de que el hospital pierda la demanda.
En p¨¦rdidas con un patrimonio millonario
Sant Pau acumula p¨¦rdidas pese a que se trata del hospital catal¨¢n que posee un patrimonio millonario: unos 1.200 inmuebles valorados en cerca de 300 millones de euros que tiene alquilados y que le reportaron en 2010 un beneficio de 9,2 millones de euros. Se trata de edificios donados por los ciudadanos e instituciones que el hospital ha ido acumulando desde el siglo XV para que el centro sanitario los aproveche en beneficio de los ciudadanos. En 1991, cuando las deudas del Sant Pau amenazaban con embargar el patrimonio, los gestores dividieron el hospital en dos fundaciones, una patrimonial ¡ªque se qued¨® con todas las propiedades y, por tanto, los ingresos¡ª y otra de gesti¨®n de los servicios sanitarios, de naturaleza deficitaria. Un a?o m¨¢s tarde, Sant Pau cre¨® una tercera fundaci¨®n para captar y destinar recursos a la investigaci¨®n. ¡°El problema de Sant Pau¡±, denuncia el comit¨¦ de empresa, es que ¡°la fundaci¨®n patrimonial no comparte sus ingresos con la asistencial¡±. Es m¨¢s, ejerce el control del patrimonio con mano de hierro. ¡°Los donantes entregaron sus propiedades a Sant Pau para que las rentas sirvieran para atender a los enfermos¡±, argumentan los representantes de los trabajadores. Un portavoz de Sant Pau, en cambio, justifica que los ingresos de la fundaci¨®n patrimonial se destinen a ¡°formar a los profesionales y mantener el hospital como centro de referencia, pero no a sufragar un d¨¦ficit que en todo caso deber¨ªa cubrir la Generalitat, ya que Sant Pau es un hospital p¨²blico¡±.
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