Las naranjas se venden mejor en Internet que en los mercados
Millones de kilos llegan a los consumidores a trav¨¦s de las p¨¢ginas webs La demanda no se puede organizar porque todav¨ªa est¨¢ m¨¢s deslocalizada.
La citricultura est¨¢ al borde del colapso en la Comunidad Valenciana. Pero pese a que pol¨ªticamente se relaciona ya m¨¢s con una cuesti¨®n cultural identitaria, dado el poco peso que tiene en el PIB auton¨®mico como actividad econ¨®mica, todav¨ªa hay resquicios que permiten su regeneraci¨®n. Lo demuestra el espectacular incremento de p¨¢ginas web donde se venden millones de kilos de c¨ªtricos cultivados. Son solo peque?as ventanas de esperanza en un mar de producci¨®n de casi cinco millones de toneladas, pero estas iniciativas se cuentan ya por docenas y est¨¢n permitiendo que sobrevivan enraizados a la tierra centenares de agricultores con diferentes f¨®rmulas de autoempleo.
Para empezar, la venta directa al consumidor elimina los intermediarios. Adem¨¢s, est¨¢ contribuyendo a diversificar la producci¨®n para su venta escalonada y, en la mayor parte de los casos, ha convertido en rentable el mantenimiento de fincas familiares. Casi todos ofrecen poner en la mesa del comprador una caja de c¨ªtricos de entre 10 y 15 kilos en 24 horas por un precio final en torno a los dos euros el kilo.
Pero la venta de c¨ªtricos por Internet tambi¨¦n empieza a sufrir los males de los canales tradicionales. La oferta es muy dispersa, como siempre est¨¢ poco organizada y funciona, en la mayor¨ªa de los casos, por la iniciativa personal de los mismos citricultores, que han encontrado en esta v¨ªa la posibilidad de obtener precios superiores a los que reciben del comercio privado o las cooperativas. La gran ventaja es que la demanda no se puede organizar porque todav¨ªa est¨¢ m¨¢s deslocalizada.
¡°Ten¨ªa dos alternativas: perder los campos o defenderme con la red¡±
Es imposible saber el volumen de c¨ªtricos valencianos que se vende a trav¨¦s de la red o la facturaci¨®n que representa. La Consejer¨ªa de Agricultura no dispone de datos y tampoco los sindicatos agrarios, ya que cada citricultor hace la guerra por su cuenta. El pionero en este ya casi subsector econ¨®mico fue Federico Aparici, creador en 1998 de naranjaslola.com. Ya entonces, ¡°cansado de malvender las naranjas¡±, apost¨® por la red ¡°cuando ni siquiera hab¨ªa tel¨¦fonos m¨®viles¡±. Aparici vende a trav¨¦s de internet desde 2007 toda su producci¨®n, unos 200.000 kilos, que recolecta en 200 hanegadas de Cullera. Tiene entre sus clientes a los cocineros Ferran Adri¨¤ o Mart¨ªn Berasategui y a algunos de los mejores hoteles de Espa?a. ¡°Est¨¢ siendo una campa?a dura, porque la bajada del consumo ha tra¨ªdo aparejado un descenso de las ventas¡±, dice, pero mantiene el optimismo: ¡°Tras 14 a?os estamos entrenados para todo. Mi aspiraci¨®n es hacer las cosas bien y que el comprador pague lo que vale el producto por su calidad¡±, a?ade este agricultor, que para poder tener su tienda virtual abierta los 12 meses ha a?adido a su oferta desde hace dos a?os tomates y melones. En la empresa trabajan seis personas de la familia, pero tambi¨¦n necesita puntualmente contratar mano de obra para satisfacer a clientes de Francia, Alemania o Inglaterra.
La cruda realidad la explica Jos¨¦ Pascual, que con su mujer Vega ?lvarez, gestiona naranjanavelate.com. Comenzaron en 2008 y ahora venden entre el 15 y el 20% de su producci¨®n, unos 8.000 kilos, a trav¨¦s de la web. Jos¨¦ descuelga el tel¨¦fono cuando est¨¢ quemando le?a tras la poda de sus mandarinos clemenules, todav¨ªa con la fruta en las ramas. ¡°Esto es lo m¨¢s triste que te puedas imaginar¡±, cuenta antes de relatar que ¡°un 40% de las mandarinas no las pude vender y el resto me las pagaron a 4 c¨¦ntimos, cuando cuestan 20 de producir; luego las heladas arrasaron la navelate y con las variedades hernandina u ortanique el comerciante no ha pasado de los 21 c¨¦ntimos por kilo, que no da m¨¢s que para cubrir costes¡±. ¡°Si no fuera por la venta por Internet, no podr¨ªamos seguir¡±. Su mujer se encarga de la web mientras ¨¦l cultiva 16,5 hect¨¢reas, algunas de las cuales todav¨ªa riega a manta.
La ¡°insostenible situaci¨®n¡± en el campo ha llevado a la Asociaci¨®n Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) a convocar una marcha que se celebrar¨¢ escalonadamente en abril y mayo por diferentes comarcas de la Comunidad Valenciana, para finalizar con dos manifestaciones en Madrid y Valencia. ¡°Los agricultores valencianos nos encontramos al l¨ªmite de nuestras posibilidades de subsistencia¡±, ha llegado a asegurar el presidente de AVA, Crist¨®bal Aguado. AVA calcul¨® que el desplome de los precios y la consiguiente p¨¦rdida de rentabilidad de las explotaciones citr¨ªcolas, supondr¨¢ esta campa?a unas p¨¦rdidas de 112 millones de euros.
¡°Hay que cambiar de mentalidad para cambiar el modelo¡±, dice un agricultor
Dan fe de ello los hermanos Gonzalo y Guillermo Antelo, que en 2004 fundaron una cooperativa familiar para reconvertir a la citricultura ecol¨®gica la explotaci¨®n que les entreg¨® su padre, acobardado por su falta de rentabilidad. Crearon naranjasche.com y su crecimiento les ha llevado a comprar y alquilar otros campos hasta conseguir cultivar 120 hanegadas.
Guillermo, ingeniero agr¨®nomo, acept¨® el reto y ahora Gonzalo dice que ¡°nos ha ido bien, en parte porque al gestionar producci¨®n ecol¨®gica tenemos menos competencia; al menos hemos conseguido dedicarnos a esto¡±. Venden el 90% de su cosecha ¡ªunos 2.500 kilos por semana¡ª a particulares y cultivan hasta una decena de variedades de c¨ªtricos. Han tenido que contratar a una persona fija, pero para trabajos puntuales necesitan a una cuadrilla de Sagunto, donde est¨¢n radicados sus campos.
El crecimiento de la venta por Internet es tan r¨¢pido que en una poblaci¨®n de algo m¨¢s de 3.000 habitantes como Corbera existen 14 p¨¢ginas web donde se venden c¨ªtricos. Lo cuenta Luis Sierra, creador de lamejornaranja.com, abierta en 2002. ?l tambi¨¦n ha conseguido vender toda la producci¨®n de sus 60 hanegadas, ¡°unas 12.000 cajas¡±, utilizando la red. ¡°Otros a?os hemos llegado a recolectar campos de familiares¡±, cuenta, pero esta campa?a han notado una leve ca¨ªda de la demanda.
La primera web en ofrecer naranjas a domicilio vio la luz hace cinco a?os
El patr¨®n del inicio de estas actividades siempre es el mismo. ¡°Tras varios a?os con los precios por el suelo, ten¨ªa dos alternativas: dejar perder los campos o intentar defenderme con Internet¡±, recuerda Sierra. Arrancar tiene ventajas. ¡°Es un negocio sin barreras de entrada que no requiere una gran inversi¨®n¡±. Pero tambi¨¦n problemas, ¡°porque al principio no puedes vender toda tu producci¨®n por Internet¡±, a?ade. Por eso conoce algunos casos de p¨¢ginas web que han cerrado. ¡°Cambiar el modelo de comercializaci¨®n requiere tambi¨¦n un cambio de mentalidad del agricultor y mucha gente no lo consigue¡±, finaliza.
S¨ª que lo hicieron los cuatro hermanos Casanova. A trav¨¦s de su web, naranjascasanova.com, venden ya casi un 30% de los c¨ªtricos que producen en sus 160 hanegadas. ¡°Sin la web no podr¨ªamos funcionar¡±, asegura Jos¨¦, uno de ellos. Optaron por ¡°intentar salvarnos¡± abriendo la ventana de la red tras ¡°varios a?os vendiendo nuestra producci¨®n por debajo del precio de coste¡±. Ahora ya trasiegan unos 100.000 kilos en cajas de 10 ¨® 15 kilos que colocan en la mesa de cualquier domicilio de Espa?a en 24 horas.
Quienes han apostado tarde por el negocio han tenido que invertir dinero en publicidad y posicionamiento de su web. Es el caso de naranjasgourmetdeorihuela.com que abri¨® hace tres a?os. El segundo dobl¨® las ventas y esta campa?a ¡°tambi¨¦n hemos crecido, a pesar de la crisis de consumo que vivimos¡±, dice Jos¨¦ Luis Moreno. Ahora ya venden unos 100.000 kilos, casi el 15% de su producci¨®n, a trav¨¦s de la red, haciendo rentable la explotaci¨®n de una finca ¡°tras muchos a?os perdiendo dinero¡±.
Seg¨²n la informaci¨®n de la Mesa de C¨ªtricos de la Consejer¨ªa de Agricultura, en la recta final de la campa?a citr¨ªcola los agricultores valencianos est¨¢n recibiendo entre 1,5 y 1,95 euros por una arroba de Navel Lane Late, entre 2,75 y 3,60 si es Navel Powell, entre 2,40 y 3,60 para el caso de la Valencia Late y entre 1,80 y 2,40 por cada arroba de la mandarina Ortanique. Tal y como ha ido la campa?a, hasta pueden considerarse buenos precios. Pero el peso de la temporada recae sobre variedades como la navelina o la clemenules, cuyo valor en el mercado ha acabado, un a?o m¨¢s, por debajo del precio de cosecha.
Cien labradores y 800.000 arrobas
¡°Le he vendido las naranjas a un comerciante de Castell¨®n y me ha dicho que si me hubiera conocido antes, me las habr¨ªa comprado otros a?os¡±. Este comentario de su padre alumbr¨® en la cabeza de Juan Jos¨¦ Bas la idea de crear una plataforma en Internet donde los agricultores pudieran ofrecer sus naranjas. Y desde hace un mes est¨¢ operativa Naranjasyfrutas.com, que ha recibido el apoyo de la Uni¨® de Llauradors y AVA. En tan poco tiempo, ¡°y solo con el boca a boca¡±, ya se han adherido un centenar de citricultores que re¨²nen unas 800.000 arrobas.
¡°Se trata de que los comerciantes puedan contactar directamente, de una forma r¨¢pida y sencilla con el agricultor¡±, cuenta Bas, que ha corrido con todos los gastos del proyecto y ofrece el portal de forma gratuita. Bas, ingeniero t¨¦cnico agr¨ªcola, contrat¨® a inform¨¢ticos y dise?adores, se reuni¨® con comerciales para saber sus necesidades geogr¨¢ficas y afront¨® el reto ¡°con la idea de ayudar al agricultor¡±, tras detectar que exist¨ªa un vac¨ªo en el mercado y esperando poder recuperar alg¨²n d¨ªa la inversi¨®n que ha hecho con la venta de publicidad.
La web permite incluso introducir fotos de la fruta en el ¨¢rbol, distingue si la producci¨®n es integrada para su exportaci¨®n a Estados Unidos y el comerciante interesado en una variedad concreta puede hacer b¨²squedas por espacios geogr¨¢ficos en entornos de entre 10 y 200 kil¨®metros. Ya se han registrado importantes fincas, como la que ofrece 100.000 arrobas de la variedad Valencia Late cultivadas ecol¨®gicamente en San Bartolom¨¦ de la Torre.
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