La crisis invita a 'bajarse al moro'

La dif¨ªcil situaci¨®n que atraviesan muchas familias a causa de la crisis ha llevado a algunos a tomar la decisi¨®n de intentar ganar dinero r¨¢pido y f¨¢cil. En los tres ¨²ltimos a?os, las redes dedicadas al contrabando de tabaco y al tr¨¢fico de hach¨ªs a peque?a escala entre una y otra orilla del Estrecho de Gibraltar han entonado m¨¢s alto que nunca sus cantos de sirena para reclutar correos humanos. La crisis invita a bajarse al moro, rememorando las aventuras de la pel¨ªcula de Fernando Colomo a finales de los a?os 80.

Las mafias eligen a personas sin antecedentes que eluden la c¨¢rcel

Los llamados culeros, vagineras y mulas (traficantes que transportan peque?as cantidades de hach¨ªs en el interior de su organismo), que cruzan a diario el trayecto entre los puertos de Ceuta y T¨¢nger (Marruecos) hasta Algeciras, son ahora m¨¢s que nunca, llegando casi a duplicar el n¨²mero de procedimientos judiciales abiertos por este tipo de tr¨¢fico de drogas a peque?a escala entre 2010 y 2011.

Seg¨²n datos de la Fiscal¨ªa Antidroga del Campo de Gibraltar, en 2010 fueron 278 los juicios r¨¢pidos celebrados por causas relacionadas con actuaciones de los Cuerpos de Seguridad del Estado por tr¨¢fico de estupefacientes ¡°sin grave da?o a la salud¡±, o sea, por el transporte de hach¨ªs en una cuant¨ªa menor a los 2,5 kilogramos. Esa cifra se incrementa, solo un a?o despu¨¦s, hasta los 446 procedimientos; lo que supone un 60% m¨¢s. Y en el primer trimestre de 2012, las detenciones por este motivo superan en casi un centenar las practicadas en el mismo periodo del a?o anterior. Solo durante el fin de semana del 21 y 22 de abril fueron detenidas 47 personas con peque?as cantidades de hach¨ªs en su organismo en las aduanas de los puertos de Algeciras y Tarifa. La mayor¨ªa no tiene antecedentes penales.

El pasado fin de semana hubo 47 detenciones en Tarifa y Algeciras

Emilio Mir¨®, fiscal antidroga del Campo de Gibraltar, asegura que se trata de ¡°personas que realizan el viaje, en la mayor¨ªa de las ocasiones, enviadas por un tercero que se encarga de pagarles el transporte una vez realizada la entrega¡±. ¡°Suelen ser gente sin ingresos que reconoce el delito nada m¨¢s ser detenidos, porque saben que as¨ª reducen un tercio de la pena que se les imponga, por lo que, en su mayor¨ªa no entran en prisi¨®n¡±, a?ade el fiscal. ¡°Los detenidos suelen ser, en su mayor¨ªa, espa?oles y marroqu¨ªes, aunque tambi¨¦n existe un n¨²mero importante de portugueses¡±, aclara Mir¨®.

El trabajo de correos que realizan quienes trafican con peque?as cantidades de hach¨ªs desde el norte de Marruecos no solo conlleva el riesgo de ser detenido. Lo m¨¢s preocupante en muchos casos es la salud de quienes introducen en su organismo hasta un kilogramo de droga, pr¨¢ctica que pone en jaque la vida del camello.

Francisco Mena, presidente de la Federaci¨®n de Coordinadoras Contra la Droga Alternativas, del Campo de Gibraltar, califica la actuaci¨®n de culeros, vagineras y mulas como ¡°una aut¨¦ntica barbaridad¡±, ya que estos correos humanos han acabado en varias ocasiones en el hospital. ¡°La crisis est¨¢ favoreciendo este tipo de tr¨¢fico de hach¨ªs porque la pena que se impone a los que son descubiertos por la polic¨ªa no pasa de tres a?os y, al reconocer el delito, se ve reducida, por lo que las personas sin antecedentes se libran del ingreso en prisi¨®n¡±, explica Mena.

Este hecho provoc¨®, hace dos a?os, una parad¨®jica situaci¨®n en el puerto de Algeciras. Seg¨²n cuenta el presidente del movimiento asociativo contra las drogas, ¡°los agentes aduaneros y miembros de los Cuerpos de Seguridad del Estado detectaron que en el ferry que llegaba cada d¨ªa a Algeciras desde el puerto marroqu¨ª de T¨¢nger, entre las 15.00 y las 16.00, viajaban un importante n¨²mero de mujeres embarazadas. Adem¨¢s, se percataron de que, a esa hora, se produc¨ªa el cambio de turno de la ATS que presta su servicio en la aduana y, por tanto, no se realizaban inspecciones con rayos X. Uno de los d¨ªas, los agentes decidieron trasladar a las supuestas embarazadas hasta el hospital algecire?o de Punta Europa, donde se encontraron con m¨¢s de un centenar de personas que se enfrentaron a los agentes, momento en el que las mujeres aprovecharon para desprenderse de la droga que transportaban¡±.

¡°Hay una realidad incontestable¡±, asegura Mena, ¡°cada vez, es mayor el n¨²mero de personas, principalmente j¨®venes, que deciden arriesgar su vida y su libertad con el objetivo de ganar dinero r¨¢pido y de eso se est¨¢n aprovechando las mafias para las que cada vez es m¨¢s f¨¢cil poder elegir a sus correos¡±. Es por ello por lo que las coordinadoras contra la droga insisten en la necesidad de atajar de ra¨ªz el problema, endureciendo las penas de los narcotraficantes y pidiendo que se cumplan ¨ªntegramente.