Presuntos implicados
"Solo nos falta una derrama por obras. Pero, tranquilos, oigan, que m¨¢s se perdi¨® en Cuba y volvieron cantando"
No me negar¨¢n que esta primavera ha sido la m¨¢s extra?a de nuestras vidas. La acumulaci¨®n de malas noticias nos ha puesto, como quien dice, la soga al cuello. Y eso, claro, gafa a un muerto. Pero el pesimismo no va a sacarnos de la crisis. ?Por el amor de Dios, que este pa¨ªs ha vivido todo un desastre del 98, una Semana Tr¨¢gica, una Guerra Civil! Que ahora nos suban el IRPF, la luz, el gas, las horas de trabajo, las tasas universitarias, o la edad de jubilaci¨®n, es lo de menos. En peores plazas hemos toreado.
Que nos bajen el sueldo, las vacaciones, la pensi¨®n y se carguen de un plumazo todos nuestros derechos conquistados en m¨¢s de cien a?os de luchas obreras, estaba cantado. No esperar¨ªan que encima fuesen a repartir beneficios.
Que descabecen a la c¨²pula policial que investigaba los casos de corrupci¨®n, que se quiten de en medio a un juez que no hac¨ªa m¨¢s que tocarles las narices, que se carguen la ense?anza y la sanidad p¨²blicas, la protecci¨®n a la infancia y a la vejez, que coloquen a un comisario pol¨ªtico al frente de la televisi¨®n de todos, que indulten a banqueros y pol¨ªticos corruptos, que decreten una amnist¨ªa fiscal para narcos y g¨¢ngsteres de primera clase, es normal. Estaba en el orden del d¨ªa. Para eso les votaron los espa?oles. A m¨ª no me miren.
Que todo un se?or ministro de Educaci¨®n venga a tensar m¨¢s la cuerda, diciendo que el aumento del n¨²mero de alumnos por aula y el deterioro de las condiciones de trabajo de los profesores supondr¨¢ una mejora sustancial en la calidad de la ense?anza, reconozco que es un poco fuerte, pero entra dentro de su l¨®gica. Aplastante.
Que Argentina nacionalice Repsol y Bolivia la Red El¨¦ctrica, bueno, son cosas que pasan, los chinos estaban al tanto, pero aqu¨ª los asesores econ¨®micos son poetas del powerpoint que bastante tienen con el calentamiento global y no les va a pedir uno que est¨¦n en todo.
De los tropiezos de la Corona, qu¨¦ quieren que les diga. Una familia a su pesar. El Rey con la cadera fracturada, la Reina de morros, tragando quina, el nieto mayor con el metatarsiano lleno de perdigones, Urdangarin p¨¢lido y esquel¨¦tico como si se hubiera enganchado a la saga Crep¨²sculo. Se ve¨ªa venir. Pero a ver qu¨¦ monarqu¨ªa no ha tenido su annus horribilis. Lo que hay que decirle al Rey es que, si quiere emociones fuertes, se deje de safaris y se ponga a presidir un Consejo de Ministros de verdad, que ah¨ª no le van a faltar elefantes, empezando por Gallard¨®n.
En cuanto a Rajoy, qu¨¦ le vamos a hacer, dicen que est¨¢ s¨®lo en el mundo, preparando Notar¨ªas por si acaso. Ya sabemos que es muy brit¨¢nico para muchas cosas como todos los gallegos, aunque no tanto como para aprender ingl¨¦s.
En fin, que solo nos falta una derrama por obras. Pero, tranquilos, oigan, que m¨¢s se perdi¨® en Cuba y volvieron cantando.
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