La obra m¨¢s cara de la Ciudad de las Artes cuadruplic¨® los costes

La decisi¨®n del Gobierno de Eduardo Zaplana, cuando el PP lleg¨® a la Generalitat Valenciana, de modificar el proyecto de la Ciudad de las Ciencias que hab¨ªa impulsado el socialista Joan Lerma desde la presidencia del Consell dispar¨® los costes de construcci¨®n del complejo de ocio. Los populares transformaron en Ciudad de la Artes y las Ciencias el proyecto y sustituyeron una torre de telecomunicaciones prevista inicialmente por lo que es actualmente el Palau de les Arts, es decir, una ¨®pera. La maniobra ha hecho que el principal edificio del complejo haya m¨¢s que cuadruplicado sus costes, al pasar de cerca de 97 millones de euros (84,3 m¨¢s IVA) a 434,2 millones, a los que hay que sumar los 44,3 cobrados por Santiago Calatrava.

Los contratos a los que ha tenido acceso el diputado Ignacio Blanco, de Esquerra Unida del Pa¨ªs Valenci¨¤, en la sede la empresa p¨²blica Ciudad de las Artes y las Ciencias, SA (Cacsa) revelan que el cambio se resolvi¨® mediante una novaci¨®n del contrato inicial, de manera que la misma adjudicataria de la torre, una uni¨®n temporal de empresas formada por Cubiertas y Mozv y Dragados y Construcciones, asumi¨® la modificaci¨®n del objeto del contrato sin que se produjera un nuevo concurso.

Concretamente, el contrato para la ejecuci¨®n de la Torre de Telecomunicaciones de Valencia fue firmado en febrero de 1995 por el entonces consejero de la Generalitat y presidente de la empresa p¨²blica Val¨¨ncia, Ci¨¨ncia i Comunicaci¨®, SA (Vacico), Aurelio Mart¨ªnez, con un presupuesto de 14.026 millones de pesetas (84,3 millones de euros) a los que hab¨ªa que sumar el IVA, lo que elevaba la cifra a unos 97 millones de euros.

En noviembre de 1996, Miguel Navarro, como responsable de la nueva empresa p¨²blica Ciudad de las Artes y las Ciencias, SA (Cacsa) suscribi¨® una ¡°novaci¨®n modificativa del contrato¡± con la UTE de manera que la adjudicataria, que ya hab¨ªa ejecutado trabajos de cimentaci¨®n, se compromet¨ªa a adaptar esa cimentaci¨®n a los nuevos usos y a ejecutar ¡°las obras de construcci¨®n del Palacio de las Artes, seg¨²n anteproyecto redactado por Calatrava Valls, SL y los dem¨¢s documentos que, a medida que se vayan redactando, pasar¨¢n a formar parte integrante del presente contrato¡±.

No se licit¨® de nuevo la obra ni se fij¨® un nuevo presupuesto¡±, destac¨® ayer Ignacio Blanco

Fue el inicio de un proceso que culmin¨® en octubre de 2005, ya con Francisco Camps en la presidencia de la Generalitat, con la inauguraci¨®n del edificio. El Palau de les Arts se convirti¨® en la m¨¢s cara de las obras del complejo de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, ya que su construcci¨®n ha costado 478,5 millones de euros, incluyendo los sustanciosos honorarios del arquitecto.

¡°No se licit¨® de nuevo la obra ni se fij¨® un nuevo presupuesto¡±, destac¨® ayer Ignacio Blanco, en cuya opini¨®n el procedimiento fue manifiestamente irregular y tuvo consecuencias econ¨®micas de envergadura. ¡°Los sobrecostes exceden todo lo aceptable¡±, se?al¨® el parlamentario, para quien la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia ha sido ¡°un pozo sin fondo por dos razones fundamentales: la falta de definici¨®n de los proyectos de Santiago Calatrava, que hace poco fiables los presupuestos, y la improvisaci¨®n y los caprichos durante las obras¡±.

Seg¨²n Blanco, que ha levantado una gran polvareda al dar a conocer los contratos de la Generalitat Valenciana con Calatrava, ¡ªpor los que el arquitecto obtiene hasta un 12% de los costes finales de las obras, una pr¨¢ctica que se ha traducido en ganancias de m¨¢s de 94 millones de euros en la Ciudad de las Artes¡ª, ¡°la culpa fundamental no es de Calatrava sino de quien lo ha permitido¡±.

La documentaci¨®n que ha conseguido consultar el diputado evidencia que los sobrecostes fueron notables en la ejecuci¨®n de todo el complejo, hasta el extremo de que pr¨¢cticamente ninguno de sus edificios se ha librado de duplicar los costes previstos en los contratos de adjudicaci¨®n de las obras. Blanco destac¨® especialmente el caso del ?gora, un elemento de la Ciudad de las Artes y las Ciencias que todav¨ªa est¨¢ inacabado pero que ya alcanza los 93 millones de euros de coste (sin incluir los 9,3 millones de honorarios de Calatrava), cuando fue adjudicado a una UTE de Lubasa, Cyes y Rover Alcisa en 2006 por 41,3 millones de euros m¨¢s IVA.

Las denuncias de Esquerra Unida por el ¡°derroche¡± en el emblem¨¢tico complejo de ocio de Valencia han suscitado la reacci¨®n del propio Calatrava, que sali¨® a defender su obra hace unos d¨ªas, y de la Generalitat. Tambi¨¦n del PP valenciano. Ayer mismo, el portavoz parlamentario popular, Rafael Blasco, reiter¨® las cifras con las que justific¨® la semana pasada el vicepresidente del Consell, Jos¨¦ Ciscar, la inversi¨®n de m¨¢s de 1.102 millones de euros en el complejo: 47 millones de visitantes desde su inauguraci¨®n, 342 millones de euros de ingresos y 40.000 puestos de trabajo generados. A Esquerra Unida no le parece de recibo lo que ha ocurrido con el m¨¢s llamativo de los ¡°grandes proyectos¡± de la Generalitat y su diputado Blanco asegura que exigir¨¢ ¡°responsabilidades a quien dio manga ancha a Calatrava de forma injustificable¡±.