Por una sanidad de excelencia

He decidido escribir este art¨ªculo desde Londres, donde el grupo Ribera Salud ha sido invitado por The King's Fund, para explicar a m¨¢s de 100 gestores del sistema de salud brit¨¢nico el modelo Alzira como ¡°experiencia internacional de ¨¦xito¡±.

Casi 14 a?os lleva en funcionamiento el modelo de colaboraci¨®n p¨²blico-privada en Espa?a, y ser¨ªa absurdo no reconocer la importante contribuci¨®n que ha aportado a la sanidad espa?ola, como ya se reconoce fuera de nuestras fronteras.

El modelo Alzira ha demostrado en este largo camino que se puede gestionar la sanidad p¨²blica manteniendo los valores del sistema, gratuidad, universalidad, equidad etc., pero de un modo m¨¢s eficiente, m¨¢s flexible, y con mayor capacidad de innovaci¨®n y adaptaci¨®n a una sociedad que avanza y a un entorno con unos retos econ¨®micos, asistenciales y tecnol¨®gicos cada vez m¨¢s complejos y cambiantes.

Se ha demostrado que se puede sumar lo mejor de la sanidad p¨²blica y de la iniciativa privada para hacer un modelo sostenible y de excelencia.

Tambi¨¦n en estos 14 a?os hemos aprendido las claves del ¨¦xito de la colaboraci¨®n p¨²blico-privada. Hoy, m¨¢s que nunca, hay que enunciarlas y remarcarlas para seguir haciendo bien las cosas en el futuro.

En mi opini¨®n, hace falta una Administraci¨®n p¨²blica fuerte, que controle, planifique y regule toda la prestaci¨®n de servicios. Tambi¨¦n hace falta un sector privado que con una clara vocaci¨®n de servicio p¨²blico, apueste por una visi¨®n compartida de largo plazo, que aporte innovaci¨®n y know-how en la gesti¨®n y la aplicaci¨®n de herramientas empresariales en un sector de futuro.

El regulador no debe permitir la priorizaci¨®n de lo mercantil sobre lo asistencial, pero debe ser compatible con fomentar la capacidad de gesti¨®n, de modernizaci¨®n y de asunci¨®n de responsabilidades de acuerdo con el esp¨ªritu emprendedor que caracteriza al empresario. Impedir esto ser¨ªa ir contra el mismo ADN del modelo.

Hacen falta reglas del juego y de relaci¨®n contractual claras, transparentes, con controles p¨²blicos y democr¨¢ticos bien establecidos porque, no lo olvidemos nunca, estamos hablando de un servicio p¨²blico b¨¢sico y de un pilar fundamental de nuestro modelo de bienestar.

Ha sido necesario desarrollar entre la Administraci¨®n p¨²blica y la iniciativa privada, valores como la lealtad institucional, el alineamiento de objetivos e intereses y el consenso en la estrategia y en los planes de gesti¨®n, siempre dentro de un marco de unos l¨ªmites de actuaci¨®n claros, definidos y acordados.

Ha sido en este equilibrio entre el predominio del poder de la Administraci¨®n, pero, y al mismo tiempo y al mismo nivel, la creencia que el sector privado es el motor de la riqueza, de la prosperidad y del progreso de las sociedades maduras, donde se ha basado el ¨¦xito del modelo Alzira.

Yo creo en la colaboraci¨®n p¨²blico-privada, y estoy seguro de que su extensi¨®n a otros ¨¢mbitos de la sanidad valenciana y nacional va a ser un factor clave en la consolidaci¨®n de un sistema sanitario p¨²blico ¨¢gil, eficiente, transparente y sostenible.

El gran reto al que nos enfrentamos desde la Administraci¨®n p¨²blica y desde la iniciativa privada es extender esta exitosa colaboraci¨®n con s¨®lidas bases, aprendiendo del camino ya recorrido, pensando en primer lugar en los ciudadanos a los que servimos, y en poder dejar a nuestros hijos una sanidad mejor que la que recibimos nosotros. Hagamos bien las cosas pensando en conseguir un futuro mejor.

Apuesto porque la Comunidad Valenciana siga marcando el paso y abriendo el camino de las reformas que necesita la sanidad, como hemos venido haciendo en los ¨²ltimos 14 a?os. Atraigamos y demos la bienvenida a inversiones en estos tiempos dif¨ªciles. Sumemos a la experiencia acumulada nuevas visiones e iniciativas, con inteligencia y claridad de objetivos, exigiendo que todo se haga siempre en beneficio de los ciudadanos a los que siempre nos debemos. Actuemos sin demora y con determinaci¨®n, porque ya hemos comprobado que la peor decisi¨®n es no tomar decisiones. Es el momento de dar lo mejor de todos nosotros, porque no olvidemos que las grandes decisiones de hoy har¨¢n peque?os los problemas de ma?ana.

Alberto de Rosa es director general del grupo Ribera Salud.