Los jefes de la patronal
La empresa de Fontenla tiene multimillonarias deudas. As¨ª son nuestros dirigentes empresariales
Hace escasamente dos da?os el presidente de la CEOE, D¨ªaz Ferr¨¢n, se ve¨ªa obligado a dimitir de su cargo tras conocerse la quiebra de sus empresas y protagonizar una gigantesca estafa a sus trabajadores, proveedores y clientes. La semana pasada se conoc¨ªa que la empresa de Antonio Fontenla, presidente de la Confederaci¨®n de Empresarios de Galicia (CEG), incapaz de hacer frente a sus multimillonarias deudas entraba en concurso de acreedores, lo que no fue obst¨¢culo para que Fontenla fuese reelegido por cuarta vez consecutiva como presidente de la patronal coru?esa. Estos son nuestros dirigentes empresariales, los que pontifican sobre la situaci¨®n econ¨®mica, los que muestran el camino a seguir para salir de la crisis que asola al pa¨ªs, los que proponen sacrificios sinf¨ªn para la mayor¨ªa de la sociedad y se permiten descalificar a quienes, como los sindicatos, discrepan y se oponen a sus inaceptables recetas econ¨®micas y sociales. ?Joder, qu¨¦ tropa!
Hace unos a?os, la CEOE present¨® al Gobierno un plan para construir autopistas, carreteras, l¨ªneas ferroviarias y diversas obras hidr¨¢ulicas, cuya explotaci¨®n y financiaci¨®n ser¨ªa privada. El plan, de haber sido aprobado, hubiese representado un impulso formidable a la Espa?a de dos velocidades, consolidando un tri¨¢ngulo econ¨®mico (Madrid, Catalu?a, Levante) altamente desarrollado a costa de la marginaci¨®n del resto del pa¨ªs. Pues bien, preguntado Antonio Fontenla, en su calidad de presidente de la CEG y de miembro de la direcci¨®n de la CEOE, por su opini¨®n acerca de que los planes empresariales no contemplaran ninguna inversi¨®n en Galicia, su respuesta no dej¨® lugar a la m¨¢s m¨ªnima duda: ¡°El plan no prev¨¦ inversi¨®n en Galicia por la sencilla raz¨®n de que no es rentable a corto plazo¡±. Este es el compromiso del presidente de la patronal gallega con su sociedad y con su pa¨ªs.
Con posterioridad, en diversos foros, Antonio Fontenla dej¨® muy claro cu¨¢les son las l¨ªneas fuerza de su proyecto econ¨®mico: reducci¨®n dr¨¢stica del gasto p¨²blico, especialmente del gasto social que considera insostenible, rebaja de impuestos (se?aladamente el de sociedades), revisi¨®n del sistema de pensiones p¨²blicas y una reforma laboral que deje bien claro que cuando un trabajador cruza el umbral de la empresa queda sometido al despotismo sin brida del empresario o de sus agentes. Es decir, una reforma laboral que conducir¨ªa a formas de dominio neopatriarcal sobre los trabajadores, m¨¢s cercano a la vieja loi de famille del Antiguo R¨¦gimen que a un moderno sistema de relaciones laborales.
Pero si el presidente de la patronal gallega prescindiese de apriorismos ideol¨®gicos y dejase emerger la realidad entre la tupida mara?a de sus prejuicios, descubrir¨ªa que el gasto social en Espa?a apenas alcanza el 20% del PIB mientras el promedio europeo se sit¨²a en el 27%, con el agravante de que el nuestro ha venido disminuyendo desde 1993, a?o en el que represent¨® el 24% de la riqueza nacional. No parece, pues, que esto haya sido el detonante de nuestra crisis ni la explicaci¨®n a nuestros actuales diferenciales econ¨®micos con los pa¨ªses m¨¢s desarrollados. Tambi¨¦n habr¨ªa descubierto Fontenla que pa¨ªses como Alemania, Suecia, Holanda, Dinamarca o Finlandia son los que salen mejor parados en todos los estudios, tanto desde el punto de vista de la eficiencia como desde el de la equidad. Estas naciones, desafiando todos los t¨®picos neoliberales que predica Fontenla, ven¨ªan creciendo a buen ritmo, conoc¨ªan altas tasas de inversi¨®n y, sin embargo, tienen los sistemas de protecci¨®n social m¨¢s desarrollados del mundo. Todo ello con una baja inflaci¨®n y sin d¨¦ficit p¨²blico apreciable hasta hoy. Son tambi¨¦n los pa¨ªses mejor integrados internacionalmente y su comercio representa aproximadamente el 35% de su PIB.
Nada de esto dice el se?or Fontenla, que adem¨¢s se olvida sistem¨¢ticamente en sus sermones de recordar la econom¨ªa sumergida y el escandaloso fraude fiscal existente en nuestro pa¨ªs. As¨ª pues, ha llegado la hora de retirar ese manto protector del que parecen gozar nuestros empresarios, y de que estos rindan cuentas ante la sociedad como el resto de los agentes pol¨ªticos-sociales del pa¨ªs.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.