Creyentes, practicantes y el cambio de 33 a?os

Un 73,2% de los espa?oles se declara cat¨®lico, pero solo el 13,7% es practicante asiduo, consideradas as¨ª las personas que dicen acudir a misa todos o casi todos los domingos y festivos. El resto, casi el 60%, visita la iglesia solo de modo ocasional y ¨²nicamente un 0,9% afirma que la frecuenta varias veces por semana, seg¨²n datos del CIS (Centro de Investigaciones Sociol¨®gicas) de 2010. El 22% de la poblaci¨®n se define como no creyente o ateo, y las minor¨ªas protestante, ortodoxa o musulmana se han incrementado por la inmigraci¨®n hasta el 2,3%.

En correlaci¨®n con ese bajo ¨ªndice de pr¨¢ctica religiosa habitual entre los creyentes cat¨®licos, las estad¨ªsticas oficiales detectan tambi¨¦n una ca¨ªda de las celebraciones m¨¢s significadas.

Los bautizos, las primeras comuniones, las confirmaciones y las bodas por la iglesia no dejan de perder adeptos. La encuesta de Movimiento Nacional de Poblaci¨®n que realiza el INE (Instituto Nacional de Estad¨ªstica) arroj¨® ya hace tres a?os el dato de que las uniones civiles de parejas igualaron en n¨²mero a las religiosas. ¡°Puede que ya sean m¨¢s¡±, dijo la socialista Joana Madrigal. Esta ca¨ªda en la demanda y uso de los servicios de la Iglesia parece probar la profundidad del cambio social operado en los 33 a?os transcurridos desde la firma del Concordato entre el Estado y la Santa Sede, en cuyos acuerdos est¨¢ el de Asuntos Econ¨®micos. Y ser¨ªa un factor a tener en cuenta a la hora de revisarlos. ¡°Las pol¨ªticas p¨²blicas destinadas a personas creyentes practicantes deber¨ªan, como otras, estar sujetas a evaluaciones peri¨®dicas¡±, defendi¨®.

Pese a ese cambio, la conferencia episcopal, las di¨®cesis, templos, parroquias, iglesias, capillas, residencias de obispos, can¨®nigos, sacerdotes, casas o conventos de congregaciones, ¨®rdenes o institutos religiosos, seminarios y universidades eclesi¨¢sticas, siguen gozando de una exenci¨®n total, no solo del IBI, sino tambi¨¦n del impuesto municipal que grava la realizaci¨®n de obras.

En palabras del parlamentario proponente, Mikel Arana, ¡°en medio de la profunda crisis que golpea a la ciudadan¨ªa y cuando los ayuntamientos se ven forzados a dr¨¢sticas subidas del IBI a particulares y empresas, es necesario que la Iglesia, como principal propietario en el Estado, participe en el esfuerzo colectivo necesario¡±.