La justicia tumba el uso preferente del catal¨¢n en Barcelona

En las oficinas de atenci¨®n al ciudadano del Ayuntamiento de Barcelona, la mayor parte de los impresos son biling¨¹es. A un lado, en catal¨¢n y al otro, en castellano. Los funcionarios que atienden a los ciudadanos tambi¨¦n suelen contestar en castellano o catal¨¢n, en funci¨®n del idioma que se utiliza en el saludo. Eso ocurr¨ªa ayer en las oficinas de atenci¨®n del Consistorio barcelon¨¦s de la plaza de Sant Miquel, donde no se entend¨ªa el revuelo que ha generado una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a (TSJC) conocida ayer, que anula, en parte, seis art¨ªculos del reglamento del uso del catal¨¢n del Ayuntamiento.

El fallo estima en parte un recurso presentado por el presidente del Partido Popular en Barcelona, Alberto Fern¨¢ndez D¨ªaz, contra el citado reglamento, que se aprob¨® en febrero de 2010 con el voto favorable de cuatro partidos del Consistorio.

La sentencia del Tribunal Superior toma como referencia la que emiti¨® el Tribunal Constitucional sobre el Estatuto. En esa l¨ªnea, por ejemplo, anula del art¨ªculo 2 del reglamento el t¨¦rmino de ¡°preferente¡± en el uso del idioma catal¨¢n en el trabajo y en las relaciones con el ciudadano. Entiende que el uso del catal¨¢n ¡°como lengua propia de uso normal no afecta ni excluye al castellano como lengua igualmente oficial¡±. Y el uso del t¨¦rmino preferente es, en opini¨®n de los jueces, ¡°inadmisible¡±.

Impresos biling¨¹es

El fallo declara nulos diversos apartados de otros art¨ªculos del reglamento, porque el tribunal considera que en todos ellos es el ciudadano el que tiene que hacer el esfuerzo para que la Administraci¨®n se dirija a ¨¦l en castellano si esa es su lengua. Argumenta tambi¨¦n que los impresos e informaci¨®n deben facilitarse en las dos versiones. Es decir, en castellano y en catal¨¢n. Y eso es lo que ocurre en la mayor parte de las comunicaciones e impresos en la realidad, m¨¢s all¨¢ de lo que dice el reglamento. La sentencia insiste en que el uso del catal¨¢n no puede pasar por encima del derecho del ciudadano a ser contestado en castellano: ¡°En los procedimientos iniciados a instancias de parte, hay que respetar la elecci¨®n del ciudadano¡±.

¡°Pero esto ya se hace con normalidad. Por tanto, entendemos que no hay que modificar nada¡±, apuntaba el primer teniente de alcalde, Joaquim Forn, al comentar el fallo, que el Consistorio recurrir¨¢ al Supremo. En su opini¨®n, los efectos pr¨¢cticos del fallo no existen, porque la Administraci¨®n ya respetaba el derecho del ciudadano a expresarse en una u otra lengua. Tanto el gobierno de CiU como el resto de los partidos, salvo el PP, criticaron la sentencia por crear un problema ¡°donde no lo hay¡±.

El TSJC reconoce

El fallo solo satisfizo al PP. El resto de las formaciones, sin excepci¨®n, lo criticaron. ¡°Se est¨¢ produciendo una coalici¨®n hostil entre los jueces y el Partido Popular en contra del catal¨¢n¡±, subray¨® Ricard Gom¨¤, de ICV-EUiA. En cuanto a los efectos pr¨¢cticos, tambi¨¦n hubo acuerdo en que son m¨¢s bien pocos m¨¢s all¨¢ de omitir el t¨¦rmino preferente del art¨ªculo 2. ¡°Una vez m¨¢s, se ve un conflicto donde no lo hay. Con independencia de los t¨¦rminos exactos que se usan en el reglamento, no hay problema de relaci¨®n entre el ciudadano y este Ayuntamiento¡±, manifest¨® Jordi Mart¨ª (PSC). Para Jordi Portabella (UxB), lo que ocurre es que el PP quiere ¡°ganar en los tribunales lo que no gana en las elecciones¡±.

El TSJC dio a conocer ayer otra decisi¨®n relacionada con el uso del catal¨¢n en la escuela. El tribunal ha reconocido el derecho de cuatro familias a que la escolarizaci¨®n de sus hijos en castellano sea la lengua vehicular en la ense?anza en la misma proporci¨®n que el catal¨¢n. En calidad de lenguas oficiales, los magistrados consideran que el castellano y el catal¨¢n deben ser lenguas vehiculares. Con todo, se?alan que es la propia Administraci¨®n la que debe adoptar las medidas que considere ¡°oportunas¡± para garantizar ese equilibrio. La secci¨®n quinta de la sala contencioso-administrativa del TSJC basa su decisi¨®n en las recientes sentencias del Tribunal Supremo y el Tribunal Constitucional sobre esa materia.

Esa misma secci¨®n fue la que, el a?o pasado, dict¨® un auto en el que daba un ultim¨¢tum de dos meses a la Generalitat para implantar el castellano como lengua vehicular en las escuelas. La decisi¨®n fue corregida despu¨¦s por el pleno de la sala contenciosa del TSJC, en un auto del pasado marzo que aval¨® la inmersi¨®n ling¨¹¨ªstica aunque reconoci¨® el derecho de los alumnos a recibir atenci¨®n individualizada en castellano.

La decisi¨®n ¡°en absoluto

El pol¨¦mico auto se dict¨® en relaci¨®n con un recurso presentado por otras tres familias, aunque daba a entender que la medida deb¨ªa afectar a la totalidad del sistema p¨²blico de ense?anza. Las cuatro sentencias que se conocieron ayer, en cambio, subrayan que la Generalitat debe adoptar las medidas necesarias para adaptar el sistema en la medida en que ¡°afecte al ni?o¡±. El principio se refiere solo a los recurrentes y ¡°en absoluto alcanza a otros padres, alumnos y centros radicados en Catalu?a¡±.

La Generalitat anunci¨® que recurrir¨¢ las sentencias porque considera que ponen en peligro el modelo catal¨¢n de inmersi¨®n ling¨¹¨ªstica. La consejera de Ense?anza, Irene Rigau, sostiene que las decisiones judiciales dan pie a la ¡°interpretaci¨®n¡± de que la educaci¨®n en castellano como lengua vehicular ¡°se puede pedir en cualquier momento de la etapa educativa¡±, lo que contradice la Ley de Educaci¨®n de Catalu?a y supone una ¡°grieta¡± en el modelo educativo, informa Ivanna Vallesp¨ªn.

En relaci¨®n con las cuatro familias demandantes, Rigau asegur¨® que los dos alumnos que actualmente cursan P-5 ya est¨¢n recibiendo la atenci¨®n personalizada en castellano, mientras que hay un tercero que cursa secundaria y la Generalitat no prev¨¦ que necesite refuerzos. Sobre el cuarto alumno, en segundo curso de primaria, considera que ¡°ya ha recibido¡± la atenci¨®n individualizada que requer¨ªa y ya est¨¢ listo para recibir una educaci¨®n ¡°normal¡±, ya que en esa etapa no precisa de m¨¢s refuerzos de castellano, seg¨²n la consejera.