Cooperaci¨®n en met¨¢lico

Las monedas sirven tambi¨¦n para situar pa¨ªses en el mapa. O para hacer m¨¢s reales naciones inventadas. O para hacer funcionar programas de cooperaci¨®n al desarrollo en tribus africanas. Ese camino sigui¨® Jorge Fern¨¢ndez Vidal, un coru?¨¦s que primero coleccion¨® monedas ¡°de sitios que no sab¨ªa ni que exist¨ªan¡±, luego acu?¨® y vendi¨® piezas de micronaciones que solo se encuentran en el papel y la mente de sus inventores y despu¨¦s convenci¨® a jefes de tribus en Ghana para imprimir metales en su nombre y vend¨¦rselos a coleccionistas. Con el poder de la numism¨¢tica, esas monedas con caras de mandatarios o animales y reversos de lanzas y m¨¢scaras tradicionales se convierten en proyectos de cooperaci¨®n al desarrollo para las comunidades. ¡°Todos los recursos se dedican a las actividades que se predefinen primero con la tribu. Los proyectos se deciden antes de la venta de la moneda en base a lo que ellos consideran que necesitan¡±, explica Fern¨¢ndez.

Veinticuatro tribus de Senegal, Gambia, Ghana y Burkina Faso, en el ?frica Occidental, tienen ya una moneda que no usan y conservan solo alguna como recuerdo. Pero el inicio no fue f¨¢cil: ¡°Era muy joven, blanco, de fuera y hablaba de monedas¡±, resume Fern¨¢ndez la desconfianza inicial que se encontr¨®. Pero una vez que el proyecto comenz¨® a andar, con ayuda de ONG locales, en el reino de Biffeche ¡ªsituado entre Senegal y Mauritania¡ª se extendi¨® su buena imagen ¡°y empezaron a contactar¡± con ¨¦l jefes de otros pueblos. Su aterrizaje en Ghana tiene parte de casual ¡ª¡°visit¨¦ varios pa¨ªses de la zona y fue el que m¨¢s me gust¨®¡±¡ª y parte de intencionado porque buscaba para su idea un pa¨ªs en el que las tribus no tuviesen connotaciones pol¨ªticas. Fern¨¢ndez acu?a una tirada de unas 1.000 monedas, pocas, para que no pierdan su valor entre los coleccionistas, y las vende a entre siete y 35 euros desde su p¨¢gina web. Algunas comunidades eligen pagar las matr¨ªculas de los escolares con la recaudaci¨®n y otros comprar semillas, material de labranza, vacas o alquilar tractores para granjas comunales. Fern¨¢ndez prefiere los proyectos agr¨ªcolas, como aquel que ayud¨® a no pasarlo tan mal a una tribu en ¨¦poca de hambruna.

Fern¨¢ndez copi¨® el modelo de los indios americanos que acu?an su dinero

La iniciativa, que naci¨® en 2005, se convirti¨® en ONG con el nombre de The Hunger Aid and Development Foundation (Hadef), absorbi¨® las ganancias de la empresa de venta de monedas inusuales, JFVcoins, que hab¨ªa creado Fern¨¢ndez y pari¨® una empresa de microcr¨¦ditos para apoyar los proyectos de las mujeres de zonas rurales de Ghana. Tienen activos unos 400 microcr¨¦ditos a la vez, que dan a seis meses y que se conceden en m¨²ltiplos de la cantidad que la persona que lo pide consiga ahorrar. ¡°En esta zona [en el noroeste de Ghana] no hay gran acceso a servicios financieros. Creci¨® a tal nivel que acabamos creando una empresa aparte¡±.

Las comunidades de indios nativos en Estados Unidos son entidades soberanas sujetas a los l¨ªmites del Gobierno Federal y que, como tal, tienen derecho a emitir moneda. La acu?an como una forma original de hacer un homenaje a su comunidad. ¡°Son todas conmemorativas, las producen muy caras para que nadie las use¡±, apunta Fern¨¢ndez. ?l conoci¨® su caso un verano que trabaj¨® en un parque natural de Colorado y pens¨® en ?frica como el sitio en el que se puede encontrar de forma ¡°m¨¢s natural¡± las condiciones para repetir su ejemplo.

La empresa vende por Internet

Palaos, un pa¨ªs insular en el mar de Filipinas que alcanza este a?o la mayor¨ªa de edad, acu?a plata con forma de coraz¨®n y un ¨¢ngel y un demonio en su cara. Es una ¡°reputada¡± emisora de monedas. Hace diez a?os, Fern¨¢ndez coleccionaba monedas como esta, raras. Ve¨ªa que en la p¨¢gina de Espa?a de eBay eran caras, pero que en Estados Unidos las pod¨ªa comprar a mitad de precio. Empez¨® as¨ª a vender las inusuales, ¡°que la gente ten¨ªa que mirar en el atlas de donde proced¨ªan¡± para cre¨¦rselo. Otras, directamente, no aparecen en ning¨²n mapa. La familia de asteroides Koronis tiene su propia moneda y su oficina gubernamental en Australia, mientras que la Rep¨²blica de Conch, en Florida, se declar¨® independiente de Estados Unidos y le declar¨® la guerra porque un control de carretera da?aba la entrada de turismo en este cayo. Se rindi¨® inmediatamente pero la rep¨²blica hizo una moneda para conmemorarlo. Nova Roma tiene miles de habitantes por el mundo, una parcela en Texas para revivir la cultura y religi¨®n de la antigua Rep¨²blica romana y su propio dinero. New Utopia ser¨¢ una isla artificial en el mar Caribe. A¨²n no existe pero ya tiene moneda. Al Principado de Seborga se olvidaron de registrarlo en una venta al rey de Cerde?a en el siglo XVIII. Sus 14 kil¨®metros cuadrados tienen bandera, sellos, pasaportes y matr¨ªculas propias. Tambi¨¦n moneda.