Todos hasta el gorro de todos

El presidente del Parlamento de Andaluc¨ªa, Manuel Gracia, va a trasladar al Defensor del Pueblo Andaluz, Jos¨¦ Chamizo, el malestar de todos los grupos de la C¨¢mara por el rapapolvo que este les ech¨® durante su comparecencia el pasado martes en comisi¨®n parlamentaria.

Chamizo acudi¨® ese d¨ªa a presentar su informe anual ante la Comisi¨®n de Gobierno Interior y Peticiones y tras el turno de intervenciones de los distintos portavoces estall¨® y solt¨® lo que ¨¦l mismo calific¨® de ¡°exabrupto¡±.

¡°La gente est¨¢ muy cabreada con ustedes, no s¨¦ si lo saben. Est¨¢ muy enfadada porque los ven todo el d¨ªa en la pele¨ªta. La gente est¨¢ hasta el gorro de todos ustedes. No s¨¦ si puedo decirlo con todo el cari?o del mundo. Por favor, por favor. Un ejercicio de buena voluntad y avanzar para resolver los problemas del personal. Y nada m¨¢s. Perd¨®nenme el exabrupto pero es que ten¨ªa ganas de decirlo. Muchas gracias¡±. Esta sesi¨®n se puede ver ¨ªntegra en la videoteca del Parlamento.

Manuel Gracia preside esa comisi¨®n y al acabar Chamizo no dijo nada. Despidi¨® al Defensor antes de seguir con otros puntos del orden del d¨ªa. Pero la bronca del singular sacerdote gaditano no han sentado nada bien a los partidos pol¨ªticos. En la reuni¨®n de la Mesa celebrada al d¨ªa siguiente, en la que est¨¢n presentes representantes del PSOE, PP e Izquierda Unida, se vertieron duras cr¨ªticas contra ¨¦l. Solo el representante de IU, el vicepresidente primero, Ignacio Garc¨ªa, no abund¨® en el reproche alegando que Chamizo es como es.

Con los adjuntos hay un problema. Lo nombran ustedes y ustedes no tiene por qu¨¦ nombrarlos Jos¨¦ Chamizo, Defensor del Pueblo andaluz

Pero en la Mesa de la C¨¢mara se habl¨® de enviar una nota p¨²blica al Defensor del Pueblo record¨¢ndole que ¨¦l es tambi¨¦n un cargo pol¨ªtico. Al final esta v¨ªa se ha descartado, porque el intercambio de reproches cobrar¨ªa mayor dimensi¨®n y adem¨¢s, como afirma un miembro de la Mesa, ¡°la gente se pondr¨ªa del lado de Chamizo¡±.

Aunque no quedar¨¢ constancia escrita s¨ª habr¨¢ reprimenda de viva voz, tanto personal como p¨²blica. De hecho, el presidente del Parlamento dijo ayer en una entrevista en Canal Sur TV que trasladar¨¢ ¡°personalmente¡± a Chamizo la opini¨®n de la Mesa. ¡°En el fondo podemos estar de acuerdo con lo que ha dicho, pero no era ni el momento ni el lugar¡±, dijo el presidente a este peri¨®dico, quien record¨® que el Defensor es un ¡°comisionado¡± del Parlamento y ¡°no est¨¢ por encima de los grupos parlamentarios¡±.

Pero no es solo la gente la que est¨¢ hasta ¡°el gorro¡± de los pol¨ªticos. El que tambi¨¦n lo est¨¢ es Chamizo. En esa comparecencia, el Defensor volvi¨® a insistir en una de sus antiguas peticiones: la reforma de la ley de creaci¨®n de la instituci¨®n. Ya lo intent¨® al principio de la anterior legislatura, cuando el PSOE contaba con mayor¨ªa absoluta, y el entonces portavoz socialista y hoy presidente de la C¨¢mara rechaz¨® la propuesta. Lo volvi¨® a solicitar el martes pasado porque, en su opini¨®n, la norma en vigor no refleja el mandato del art¨ªculo 41 del Estatuto de Autonom¨ªa que se?ala que al Defensor le corresponde ¡°velar por la defensa¡± de los nuevos derechos sociales estatutarios.

Chamizo tambi¨¦n est¨¢ hasta el gorro de los adjuntos y del tejemaneje de los partidos en la designaci¨®n de estos cargos. Los adjuntos al Defensor fueron un invento de los partidos para dar m¨¢s juego a los suyos. Cuando en la comisi¨®n, la portavoz del PSOE, Cinta Castillo, critic¨® a Carlos del Barco, propuesto por el PP, por escribir art¨ªculos que, seg¨²n dijo, ¡°deterioran la categor¨ªa¡± de la instituci¨®n, Chamizo tambi¨¦n se revir¨®: ¡°Con los adjuntos hay un problema. Lo nombran ustedes y ustedes no tiene por qu¨¦ nombrarlos sino el Defensor, aunque cualquiera les quita esa prerrogativa a los partidos¡±. Tambi¨¦n reconoci¨® que dedica m¨¢s tiempo ¡°controlando a los adjuntos que trabajando¡±. Chamizo aprovech¨® para pedir a Del Barco que ¡°publique lo que quiera¡±, pero que no firme con su cargo institucional en los peri¨®dicos.

Cuando Chamizo estalla al final lo hace en respuesta a la diputada del PP, Rosal¨ªa Espinosa, que le recrimina suavemente por no recurrir al Tribunal Constitucional la situaci¨®n de los funcionarios. Le recuerda que ese asunto lo lleva la Defensora del Pueblo de Espa?a y a partir de ah¨ª encadena su bronca final. Chamizo, que lleva 17 a?os en ese puesto, ha cumplido ya su mandato, pero aunque est¨¦ hasta el gorro quiere seguir.