En defensa del modelo catal¨¢n

Espa?a y Catalu?a parecen encontrarse en una nueva transici¨®n, en una Europa que busca el norte a riesgo de lapidar su sentido fundacional: la paz y el sentido social. La crisis actual ha generado paro y precariedad, pero tambi¨¦n miedo, resignaci¨®n, indignaci¨®n y desconfianza en la pol¨ªtica y en las instituciones.

La crisis es una perfecta excusa para enterrar el modelo sanitario p¨²blico, aunque considero que tendr¨ªa que ser la gran oportunidad para acelerar las reformas estructurales que permitan su sostenibilidad ¡ªenvejecimiento e innovaci¨®n son los grandes retos¡ª y conviertan el sector de la salud en una parte sustantiva del nuevo modelo productivo.

Hay momentos de la historia que cambiaron el curso de la vida y quiz¨¢s recordarlos pueda devolver el sentido a la pol¨ªtica. En 1986, durante la presidencia de Felipe Gonz¨¢lez y con Ernest Lluch como ministro de Sanidad, optamos por un sistema nacional de salud universal, financiado por impuestos y descentralizado en las comunidades aut¨®nomas. Los resultados en calidad, equidad y coste son muy buenos, entre los 10 mejores del mundo. Adem¨¢s, esto ha contribuido a sanear la Seguridad Social, imprescindible para pagar prestaciones de paro y pensiones. El gasto global en 2010 fue del 9% del PIB, un punto menos que la media de la Uni¨®n Europea y nueve puntos menos que Estados Unidos.

Ahora por la puerta trasera, v¨ªa decreto ley, sin debate pol¨ªtico ni social, se lapida el modelo, retrocediendo al seguro vinculado al trabajo o prestaci¨®n de la Seguridad Social (el modelo franquista ideado por Gir¨®n de Velasco). Los modelos no universales tienen peores resultados en salud p¨²blica, en asistencia y en atenci¨®n a los cr¨®nicos, pierden equidad y finalmente son m¨¢s caros. M¨¢s pobres y m¨¢s enfermos. Asimismo el modelo de copago propuesto grava m¨¢s a los que m¨¢s necesitan.

El modelo sanitario catal¨¢n es eficiente; el gasto total en 2010 fue del 8% del PIB

Paralelamente a los cambios de modelo y de la imposici¨®n de disminuci¨®n del gasto en sanidad a las comunidades aut¨®nomas por parte del Gobierno del Partido Popular, en Catalu?a peligra el modelo sanitario catal¨¢n por los recortes de CiU y por la falta de liderazgos en su defensa y en las reformas y las dudas sobre la falta de transparencia.

El Estatuto de Autonom¨ªa de 1979, el Mapa Sanitario de 1980, la Ley Catalana de Ordenaci¨®n Sanitaria (LOSC, 1990), la Ley de Reforma del ICS (2007) y la Ley de Salud de P¨²blica (2009) consolidan un modelo espec¨ªfico de tradici¨®n hist¨®rica, siempre con un consenso pol¨ªtico y parlamentario pr¨¢cticamente un¨¢nime.

Los elementos m¨¢s significativos en Catalu?a son un modelo altamente participado en su gobierno por Ayuntamientos, asociaciones de profesionales...

Durante 30 a?os, el PSC era mayoritario en los Ayuntamientos, seguido por CiU. Ahora se ha invertido a favor de los nacionalistas catalanes.

El modelo sanitario catal¨¢n huy¨® del modelo excesivamente administrativista del Insalud, optando por un modelo de concepci¨®n empresarial p¨²blica que ha permitido invertir e incorporar la innovaci¨®n.

Durante estos ¨²ltimos 30 a?os, nunca se rompi¨® el consenso de la mayor¨ªa de las formaciones pol¨ªticas en el modelo sanitario catal¨¢n. Alcaldes de todos los partidos pol¨ªticos han participado activamente en este modelo.

Los recortes lineales de m¨¢s del 10% del presupuesto de Salud por parte del Gobierno de la Generalitat en los ejercicios 2011 y 2012 est¨¢n afectando a los profesionales y contribuyendo al retraso del diagn¨®stico y terap¨¦utico. La calidad y equidad est¨¢n en juego, afectando al sistema p¨²blico y alentando la promoci¨®n del sector privado, asegurador y provisor.

"Estoy de acuerdo en investigar cualquier mala gesti¨®n sin propiciar el desprestigio"

El modelo sanitario catal¨¢n es eficiente ¡ªel gasto total en 2010 fue del 8% del PIB¡ª, con un sector p¨²blico muy potente y complementado por un sector privado que ha permitido situar la docencia y la investigaci¨®n en rankings altamente competitivos en el mundo.

Pero ?ahora qui¨¦n defiende el modelo catal¨¢n? No hay quien lidere el modelo despu¨¦s de 30 a?os al no promoverse los pactos y las reformas necesarias en momentos de crisis: concentraci¨®n de empresas p¨²blicas, mayor flexibilidad y transparencia, participaci¨®n de los profesionales en la gesti¨®n, publicitar la central de resultados y generalizar el modelo capitativo, entre otros.

Estoy de acuerdo en publicitar y revisar los m¨²ltiples indicadores de control (auditor¨ªas, Intervenci¨®n, Sindicatura de Cuentas, S¨ªndic de Greuges, Oficina Antifraude, Tribunal de Cuentas, Agencia de Evaluaci¨®n Catalana y Espa?ola, entre otros) investigando cualquier elemento de mala gesti¨®n de los recursos p¨²blicos, pero sin propiciar el desprestigio de un modelo sanitario catal¨¢n respetado y copiado en todo el mundo, que genera confianza y seguridad a los ciudadanos, con est¨¢ndares internacionales. Si esto ocurre, la mayor¨ªa perder¨¢, social y econ¨®micamente, mientras que solamente unos pocos ganar¨¢n.

Marina Geli es exconsejera de Salud de la Generalitat