¡®Low cost¡¯

Estamos en la era de los ¡°debates nominalistas¡±, aunque en Euskadi sabemos de eso un rato largo. Quiero decir que en el Pa¨ªs Vasco sabemos de eso un rato largo. Perd¨®n, en Euskal Herria sabemos un rato largo de eso. Si en los tel¨¦fonos m¨®viles arrasa la aplicaci¨®n ¡°Apalabrados¡±, en la vida somos adictos a una versi¨®n cotidiana del juego de mesa Tab¨².

Quiz¨¢s uno de los eufemismos m¨¢s perniciosos con el que nos hemos topado en los ¨²ltimos a?os sea la expresi¨®n low cost, que literalmente significa ¡°bajo coste¡±. Dicho en ingl¨¦s suena m¨¢s din¨¢mico, fresco y apetecible, pero en unos casos quiere decir ¡°ofert¨®n¡± para el consumidor y en otros casos ¡°te pagamos poco por hacerlo¡± para el trabajador. La primera vez que o¨ª el t¨¦rmino se refer¨ªa a vuelos baratos. Pagabas menos por volar y ese precio reducido se reflejaba en que ten¨ªas que hacer m¨¢s colas, no ten¨ªas asiento asignado, no te daban nada de comer o beber en el avi¨®n, soportabas publicidad por la megafon¨ªa... Pero vamos, que viajabas. Sin embargo, desde hace poco el t¨¦rmino se est¨¢ aplicando a programas de televisi¨®n y pel¨ªculas. Y creo que en este caso low cost significa algo diferente.

En el caso de los aviones, el cliente paga m¨¢s barato. Supongo que los trabajadores tambi¨¦n cobrar¨¢n menos, pero el beneficio del que paga es evidente. En el caso de los programas de televisi¨®n, el cliente no paga directamente pero tiene que tragarse la misma catarata publicitaria que con un programa no low cost. ?D¨®nde est¨¢ el low cost ah¨ª entonces? En el que curra. Me recuerda a la expresi¨®n ¡°periodismo ciudadano¡±, que en nuestro juego de Tab¨² significa ¡°participativo¡±, ¡°libre¡±, ¡°democr¨¢tico¡±, ¡°directo¡±... Pero en la vida real significa ¡°gratuito¡±, ¡°rellenador de contenido¡±, ¡°corta-pega¡±... Es decir, producir un programa de bajo coste es de pobres, pero producir un programa low cost es mol¨®n. ?Por qu¨¦ lo llaman low cost si en realidad estamos ante un trabajo mal pagado? Y encima te lo restriegan. Fardan de que te pagan poco. Es el colmo.

Pel¨ªculas de bajo presupuesto han existido siempre. Es posible que la aplicaci¨®n del t¨¦rmino ingl¨¦s le de un aura de g¨¦nero, de manera estandarizada de producir pel¨ªculas. Precisamente Carlos Vermut, un realizador que acaba de hacer su primer largo casi sin dinero (la maravillosa Diamond Flash) me comentaba que la forma de hacer cine barato no ha cambiado, lo que s¨ª se ha transformado es la manera de ver esas pel¨ªculas. Internet es la gran diferencia, no el low cost. ?sta es quiz¨¢s una "marca" que viene bien al periodista, que ayuda a instaurarlo como ¡°moda¡±. Pero os aseguro que el low cost no es una decisi¨®n, es un ¡°no tengo m¨¢s remedio que hacerlo as¨ª¡±. Sonar¨¢ menos rom¨¢ntico, pero se corresponde m¨¢s con la realidad.