La mujer que trae la libertad
Un investigador defiende en un libro que un cuadro de Goya que ha permanecido casi olvidado es una alegor¨ªa de la Constituci¨®n de 1812
El Museo Nacional de Estocolmo guarda un cuadro de Francisco de Goya (Fuendetodos, Zaragoza, 1746-Burdeos, 1828) que ha permanecido casi olvidado desde su ejecuci¨®n y ha peregrinado por pa¨ªses y colecciones. El lienzo, de 294x244 cent¨ªmetros, se titula La Verdad, el Tiempo y la Historia. Alberto Gonz¨¢lez Troyano (Algeciras, C¨¢diz, 1940) defiende en su reci¨¦n publicado libro La reinvenci¨®n de un cuadro de Goya (Abada Editores) que el lienzo es una alegor¨ªa de la Constituci¨®n de 1812.
A la hora de escribir su libro, Gonz¨¢lez Troyano sigui¨® el hilo iniciado por varios expertos. La estadounidense Eleanor A. Sayre, que fue directora del Museo de Bellas Artes de Boston, donde est¨¢ el boceto del cuadro, hab¨ªa indicado que exist¨ªa la posibilidad de interpretar la obra como una alegor¨ªa de la Constituci¨®n de 1812 en un art¨ªculo publicado en 1975. ¡°La recuperaci¨®n del cuadro coincide, pues, con la democratizaci¨®n de Espa?a tras la muerte de Franco. El cuadro estaba ah¨ª, apagado, hasta que se le presta otra mirada¡±, explica Gonz¨¢lez Troyano, que ha sido profesor de Literatura Espa?ola en las Universidades de C¨¢diz y Sevilla. A la interpretaci¨®n de Sayre se a?adieron nuevas voces apoyando esta tesis, como las de Gudrun Maurer y Juan Jos¨¦ Luna, conservador del Museo del Prado.
El libro ha recibido el Premio Iberoamericano de Ciencias Sociales Cortes de C¨¢diz. ¡°Como no hay una documentaci¨®n precisa, no aporto una documentaci¨®n nueva. Lo que intento es hacer un recorrido por la pintura y por la mentalidad de Goya para ver c¨®mo fue posible que ¨¦l pintara ese cuadro en 1812, en 1814 o en 1820. Intento hacer ver que el cuadro era coherente con su trayectoria pict¨®rica e ideol¨®gica. He querido luchar contra el tab¨² de que Goya es un pintor intuitivo, espont¨¢neo, poco reflexivo... Defiendo que Goya era un pintor fil¨®sofo, como le llamaba Bartolom¨¦ Jos¨¦ Gallardo, que era uno de sus amigos¡±, afirma Gonz¨¢lez Troyano.
¡°Intento que no se vea el Goya de los fusilamientos, de las escenas de mayo, como el ¨²nico Goya posible. En Goya lo importante es su liberalismo; no el hecho de que fuera afrancesado o patriota, que es donde se ha puesto el acento hasta ahora¡±, a?ade. ¡°Goya dej¨® una serie de dibujos sueltos donde est¨¢n sugeridas sus ideas liberales. Adem¨¢s de ser un pintor cr¨ªtico, Goya ten¨ªa una ideolog¨ªa liberal que manifiesta en esos dibujos. El cuadro habr¨ªa sido la culminaci¨®n de esos dibujos liberales. La mayor¨ªa de esos dibujos est¨¢n en el Museo del Prado. Est¨¢n muy vinculados con lo que va a aparecer en el cuadro. Son dibujos en los que est¨¢ la respuesta pol¨ªtica concreta para acabar con la situaci¨®n del Antiguo R¨¦gimen. Estos dibujos son como los ensayos, la preparaci¨®n donde Goya va fraguando casi clandestinamente la idea del gran cuadro, que presiente que un d¨ªa va a poder pintar cuando se den las circunstancias pol¨ªticas adecuadas para ello. Y esto ocurre en 1812¡±, dice.
Gonz¨¢lez Troyano aclara el significado de las tres figuras simb¨®licas que figuran en el cuadro. ¡°Por una parte, est¨¢ el Tiempo, representado por un anciano. El Tiempo est¨¢ empujando suavemente a la mujer que est¨¢ de pie, que es la figura de la Constituci¨®n, a la que saca de ese mundo s¨®rdido y negro del Antiguo R¨¦gimen. La mujer que est¨¢ de pie no es Espa?a porque es un personaje sin adornos. Es un personaje con un aire modesto, como si estuviera cobrando por primera vez un sitio en la vida pol¨ªtica de los espa?oles. Donde se concentra todo su poder es en ese librito que sostiene en su mano derecha y que responde al mismo formato que una de las ediciones de la Constituci¨®n de 1812. En su mano izquierda lleva una especie de cetro modesto: la autoridad que los espa?oles le han concedido¡±, contin¨²a Gonz¨¢lez Troyano.
¡°Las alas del Tiempo la iluminan y la protegen de las asechanzas de los monstruos que est¨¢n en el fondo del cuadro. La tercera persona del cuadro, la mujer sentada, es la Historia, que est¨¢ testificando el acontecimiento, est¨¢ dando cuenta de que ya ha llegado la libertad a Espa?a¡±, asevera el exprofesor de las Universidades de C¨¢diz y Sevilla.
¡°En el trasfondo negro hay un ¨¢rbol derribado que los espa?oles han logrado echar abajo. Es una imagen tradicional de acabar con una situaci¨®n para emprender una nueva. Ese ¨¢rbol ca¨ªdo es el Antiguo R¨¦gimen y sus ac¨®litos, que son los monstruos, est¨¢n desplazados de un primer plano¡±, describe Gonz¨¢lez Troyano. Cuesta ver a los monstruos en el cuadro. Sin embargo, su amenaza destaca intensa en el boceto. ¡°Los monstruos se ven claramente en el boceto que hay en Boston del cuadro. El cuadro de Estocolmo fue muy pensado. En pocos casos Goya hizo un boceto tan preciso donde est¨¢n todos los elementos que va a vestir¡±, precisa el investigador.
¡°No tenemos pruebas de que sea un cuadro hecho espec¨ªficamente para la Constituci¨®n de 1812, pero tampoco hay ning¨²n documento decisivo que pruebe lo contrario¡±, concluye mientras abre un apasionante espacio para el debate.
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