Los ataques del PP a la democracia
Es muy f¨¢cil sacar conclusiones de las decisiones del presidente Rajoy y del PP en cuestiones relacionadas con el funcionamiento de las instituciones democr¨¢ticas durante los seis meses que llevan gobernando. La lista es muy expresiva de su talante y de su posici¨®n de ataque a los principios democr¨¢ticos.
Se niegan a cualquier comparecencia en el Congreso de los Diputados para rendir cuentas; son incontables las ausencias de Rajoy en el Congreso para explicar decisiones de trascendencia; suprimen el debate sobre el estado de la naci¨®n; dieron apoyo cerrado al juez D¨ªvar; rechazan la comisi¨®n de investigaci¨®n de Bankia y del sistema financiero; proponen la disoluci¨®n del Tribunal Constitucional porque no les gusta su sentencia sobre Sortu; cambian el modelo profesional e independiente de TVE; rechazan el di¨¢logo con los mineros incumpliendo sus compromisos electorales; aceptan tres enmiendas sin contenido econ¨®mico sobre las m¨¢s de 3.000 presentadas por la oposici¨®n en el debate del Presupuesto; incumplen buen n¨²mero de compromisos electorales subiendo impuestos y recortando derechos sociales b¨¢sicos; act¨²an con la prepotencia de su mayor¨ªa absoluta en la tramitaci¨®n de decretos-leyes como la reforma laboral; celebran ruedas de prensa sin turno de preguntas,....
Me resulta intolerable. Porque en este otro problema que padecemos junto a la crisis econ¨®mica, la derecha est¨¢ agravando la crisis de valores democr¨¢ticos en Espa?a con su opacidad, desprecio a las normas de transparencia y oposici¨®n a la profundizaci¨®n de la democracia como reclama la ciudadan¨ªa.
Hacer frente al descr¨¦dito de la pol¨ªtica solo requiere una voluntad decidida
En lo que se refiere a la crisis econ¨®mica es cierto que, por su complejidad, salir adelante y empezar a crear empleo costar¨¢ tiempo, esfuerzos y la solidaridad real de la nueva Europa que intenta liderar F. Hollande. Algo que, con f¨®rmulas concretas, ya defendi¨® Rubalcaba durante el debate electoral en televisi¨®n con Rajoy. Recordemos: la mayor implicaci¨®n de la UE y del BCE con ayudas a los pa¨ªses en recesi¨®n m¨¢s aguda; compra de deuda por el BCE; puesta en marcha de los eurobonos; nuevas figuras fiscales; planes para el crecimiento y el empleo frente a la ¨²nica exigencia de recortes y austeridad por parte de Merkel-Rajoy; ampliaci¨®n del periodo para cumplir el objetivo del d¨¦ficit; etc¨¦tera. As¨ª fue; eso plante¨® el PSOE ante las elecciones del 20-N y se puede comprobar repasando aquel video.
Pero hacer frente al descr¨¦dito de la pol¨ªtica y de los partidos solo requiere una voluntad decidida e ideas claras. Y en esa posici¨®n est¨¢ el PSOE, aunque es cierto que en el reciente pasado hemos contribuido con decisiones err¨®neas y ante la proliferaci¨®n de casos de corrupci¨®n en periodo de Gobierno socialista a la p¨¦rdida de calidad de la democracia. Tambi¨¦n hay que reconocer que tuvimos fallos en el dialogo con ¡°la calle¡±.
Si queremos recuperar la confianza ciudadana en la pol¨ªtica y reforzar la vitalidad de la democracia tendremos que reconocer que esto no va nada bien. ?Hasta cuando se podr¨¢ soportar la creciente tensi¨®n en la sociedad espa?ola?
El PSOE ha de acentuar su oposici¨®n frente a las actitudes del PP que deterioran gravemente la convivencia y desprecian normas elementales de la democracia. Desde una estrategia global y sostenida, de la mano de los agentes sociales, son necesarios grandes gestos morales e iniciativas pol¨ªticas novedosas de trazo grueso para combatir al PP y al Gobierno. No podemos dar la m¨¢s m¨ªnima sensaci¨®n de que somos c¨®mplices de su locura.
Se acaba el tiempo porque la calle es como una olla a presi¨®n. Algo importante tenemos que hacer por la democracia en nuestro pa¨ªs.
Od¨®n Elorza es diputado socialista por Gipuzkoa.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.