La patronal e¨®lica augura el fracaso del concurso por la gesti¨®n de la Xunta
Facenda pretende cobrar hasta 100 millones a los parques en tramitaci¨®n
La patronal e¨®lica ya no disimula el fracaso al que, en su opini¨®n, la gesti¨®n de la Xunta est¨¢ abocando al concurso e¨®lico. El plan que iba a sacar a Galicia de la recesi¨®n, que seg¨²n c¨¢lculos ¡°muy conservadores¡±, del conselleiro de Industria, Javier Guerra, supondr¨ªa la creaci¨®n de 13.266 empleos gracias a una inversi¨®n privada de 5.953 millones, pende de un hilo. ¡°Con el escenario actual, el 80% de los 2.325 megavatios no se van a poder poner en marcha. Solo podr¨¢n construirse los parques m¨¢s rentables, los que tengan el m¨¢ximo de horas de viento¡±, sentencia desde la Asociaci¨®n E¨®lica Gallega I?igo Muniozguren. En los ¨²ltimos a?os Galicia ha perdido su peso hegem¨®nico en la producci¨®n de energ¨ªa limpia, ha sufrido la deslocalizaci¨®n de una importante empresa de componentes ¡ªGamesa¡ª y un goteo de recursos judiciales contra la regulaci¨®n de los gobiernos del bipartito y el PP. Tambi¨¦n se ha implantado el canon e¨®lico que pagan los productores, con el que la Xunta espera recaudar 75 millones en esta legislatura. ¡°Los problemas que podr¨ªa resolver la Xunta se agravan¡±, afirma Muniozguren.
Si con eso no fue suficiente, la gota que colm¨® el vaso del desencuentro entre la patronal y la Conseller¨ªa de Econom¨ªa acaba de caer. Se trata de la decisi¨®n de la Xunta de comenzar a cobrar el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales a estas instalaciones. Seg¨²n c¨¢lculos del sector, son unos 100 millones de euros de una tasa que hasta ahora no se aplicaba porque los parques no son concesiones, sino autorizaciones administrativas, y por tanto a efectos fiscales ¡°no se asemejan¡±, seg¨²n EGA. De lo contrario, insisten, tambi¨¦n podr¨ªan comenzar a liquidarse en otras instalaciones de generaci¨®n el¨¦ctrica. Pero Econom¨ªa defiende que no ha habido ¡°ning¨²n cambio de criterio¡±, en su decisi¨®n, y que el ITP ¡°grava tanto las concesiones como cualquier otra figura que bajo otra denominaci¨®n, comparta con las concesiones un mismo sustrato econ¨®mico, como es el caso de los parques e¨®licos¡±. Esa decisi¨®n va a provocar un verdadero cuello de botella hacia finales de este a?o. Porque por un lado, los promotores se niegan a invertir si no se aclara el nuevo marco de las primas, y por otro, la Conseller¨ªa les apremia para comenzar a conceder las primeras autorizaciones (momento en el que tienen que hacer efectivo el pago de impuestos).
Mientras eso sucede, la Conseller¨ªa de Facenda comprobar¨¢ ¡°las autoliquidaciones que no se llevaron a cabo por parte de las e¨®licas¡±. La Xunta insiste en que trabaja ¡°para intentar encontrar un equilibrio entre el cumplimiento de la ley y las necesidades del sector¡±. La medida est¨¢ afectando tambi¨¦n a los pol¨ªgonos en desarrollo que se autorizaron antes del concurso e¨®lico. ¡°Una instalaci¨®n de 50 megavatios, aplic¨¢ndole el tipo m¨¢ximo del 4% podr¨ªa llegar a pagar hasta dos millones de euros. Y si no sabe cu¨¢l es su plan de negocio no los va a pagar¡±, recuerdan en EGA.
Escaso poder en Madrid
En enero, el Gobierno de Mariano Rajoy decidi¨® congelar las primas que se pagan a las empresas e¨®licas por producir. La Xunta de Galicia, lejos de admitir que el escollo pondr¨ªa en peligro su concurso, insisti¨®: ¡°El Real Decreto [que las suprime] abre la posibilidad de una retribuci¨®n para los megavatios que muestren un mayor rendimiento, situaci¨®n en la que est¨¢n la mayor parte de los parques gallegos, por lo que defiende la rentabilidad de la e¨®lica en la nueva situaci¨®n que premia la eficiencia¡±. Las empresas del sector se llevaron las manos a la cabeza con este razonamiento, pero ninguna se atrevi¨® a contradecir a la Conseller¨ªa p¨²blicamente. Pero pasan los meses y, aunque siguen esperando un marco que aclare su futuro, fuentes de la industria creen que el Gobierno gallego ha demostrado ¡°no tener ning¨²n peso en Madrid¡±, para arreglar la situaci¨®n, y eso compromete los grandes proyectos asociados al concurso, como los m¨¢s de 1.000 millones prometidos por Gas Natural. La Xunta tampoco ha dado pasos para despejar otro escollo: las deficientes infraestructuras de evacuaci¨®n.
¡°Lo que est¨¢ sucediendo no es m¨¢s que una huida hacia adelante, cada parte implicada cuenta lo que le parece¡±, critica el directivo de una empresa mediana del sector. Hace apenas un mes, el director de Industria, ?ngel Bernardo Tahoces, aseguraba en sede parlamentaria que ¡°todos los proyectos siguen adelante¡± y que ¡°los promotores han confirmado su voluntad de continuar, todos han presentado la justificaci¨®n de los empleos creados y las inversiones realizadas en el primer a?o¡±. Incluso Estela E¨®lica, la firma que est¨¢ siendo cuestionada por incumplir su proyecto ¡ªla construcci¨®n de una planta de basuras¡ª, dice que sigue adelante.
Esta circunstancia la conoce bien el presidente de la Xunta, que recientemente asegur¨® que ¡°si alguna empresa no puede ejecutar sus planes, que pongan los megavatios a disposici¨®n y habr¨¢ otras que los ejecuten¡±. El tono de sus palabras sent¨® como una bomba en la patronal, que destila impotencia. ¡°Llevamos dos a?os reuni¨¦ndonos con la conseller¨ªa y seguimos teniendo los mismos problemas¡±.
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