Una divinidad en el pozo

Arranca el Grec y aparece Dioniso. Lo que parece ser, con todas las cautelas de una r¨¢pida apreciaci¨®n, una cabeza del siglo II del c¨¦lebre dios de la fiesta, el vino y el ¨¦xtasis ¨Centre otras cosas m¨¢s serias-, fue hallada el pasado martes a las seis de la tarde en Barcelona en el entorno de la villa romana de la Sagrera. La testa, de buen m¨¢rmol y de tama?o natural, seguramente pertenec¨ªa a una estatua que decoraba la villa. Luce un complejo peinado que incluye una diadema y unos ornamentos vegetales con lo que parecen flores y racimos de uva. De ah¨ª la primera identificaci¨®n con Dioniso (adoptado por los romanos como Baco).

Hoy a mediod¨ªa, con inusitada celeridad achacable seg¨²n algunos a la pasi¨®n rayana en lo obsesivo del primer teniente de alcalde y concejal de Cultura Jaume Ciurana con lo romano, se ha presentado la pieza, a¨²n cubierta de tierra su marm¨®rea faz como si de un regresado del Hades se tratara. Y es cierto que la cabeza viene de un sitio oscuro: ha sido encontrada en un pozo en las afueras de la antigua villa, bajo el Pont del Treball Digne, mezclada con material constructivo romano de deshecho y se cree que fue arrojada all¨ª hacia el siglo III como basura (!).

El dios o lo que sea parec¨ªa meditar sobre lo cambiante de la suerte convertido en estrella medi¨¢tica del d¨ªa frente a las c¨¢maras. No deja de ser gracioso que se mostrara a los medios en el Palau de la Virreina, sede organizativa del festival Grec, que ha tenido hist¨®ricamente como icono el s¨¢tiro, tradicional acompa?ante de Dioniso con las bacantes, ninfas y silenos. La primera impresi¨®n que produce es que es de estilo helen¨ªstico. De hecho el rostro se parece al de Alejandro ¨Cno en balde una de las divinidades con las que se identificaba el conquistador maced¨®nico de peligrosas borracheras era con Dioniso-: ol¨ªmpica juventud, labios sensuales ligeramente abiertos, ojos almendrados de mirada so?adora-. A?¨¢dase que la cabeza presenta el caracter¨ªstico gesto helen¨ªstico de delicada inclinaci¨®n hacia el lado izquierdo y que el cabello est¨¢ peinado con raya en medio. Ciurana hizo los honores a la pieza calific¨¢ndola de ¡°espectacular y bonita¡± y explic¨® que para ser presentada ha hecho una parada camino del centro de conservaci¨®n y restauraci¨®n del Museo de Historia de Barcelona en la Zona Franca donde ser¨¢ adecentada y estudiada. El concejal subray¨® que el hallazgo no es fruto de la casualidad sino del trabajo arqueol¨®gico sistem¨¢tico en las obras de l estaci¨®n del Ave en la Sagrera y alguno pens¨® en que para sistem¨¢tica la destrucci¨®n de la villa ¨Cque cada vez parece m¨¢s importante- en aras del progreso (delenda est Sagrera).

Carme Mir¨®, responsable del Plan de Arqueolog¨ªa Urbana del Servicio de Arqueolog¨ªa Municipal, destac¨® que es la primera vez que se halla una escultura romana de esta importancia en su contexto arqueol¨®gico, y record¨® que hasta ahora las otras cabezas romanas halladas lo hab¨ªan sido en el interior de las murallas de la ciudad donde fueron arrojadas como relleno. Adem¨¢s en general esas otras cabezas son de retratos y probablemente pertenec¨ªan a bustos o estatuas de monumentos funerarios. Mir¨® destac¨® la aparente antig¨¹edad de la obra, ¡°parece del siglo I o II¡±, la tradici¨®n antigua de su talla, la calidad del material (¡°m¨¢rmol del pent¨¦lico o de Carrara¡±) ¨C, lo que indica que procede de fuera-; y la identificaci¨®n probable del personaje con una divinidad o alegor¨ªa. Dijo que posiblemente se tratara de una estatua de cuerpo entero a tama?o natural y que estaba instalada en una furn¨ªcula o ante una pared, como prueba el que la parte posterior de la cabeza est¨¦ sin trabajar. Especul¨® con que se hallara colocada en un espacio cultual de la villa o fuera un elemento decorativo del peristilo o del tablinum, espacio anexo al atrio.

La cabeza no ha sido encontrada en ninguna habitaci¨®n de la villa sino en el mencionado pozo romano fuera de ella, entre restos de tejas y cer¨¢mica sigillata. El yacimiento est¨¢ sin contaminar, lo que permitir¨¢ datar con exactitud el momento de descarte de la escultura. La arque¨®loga recalc¨® que no hay nada como la cabeza entre lo hallado en Barcelona, aparte de alguna peque?a divinidad, el torso quiz¨¢ de una diosa de la calle de Parad¨ªs o el contundente Pr¨ªapo de Sans, que est¨¢ hecho en piedra de Montju?c (el reci¨¦n llegado dios quiz¨¢ tuviera buenos atributos tambi¨¦n, recu¨¦rdense los apelativos de Dioniso, ¡°faleno¡± y ¡°enorches¡±, traducido a veces como ¡°boludo¡±) . Mir¨® no descart¨® que puedan aparecer m¨¢s restos de la escultura. Apunt¨® que la villa de la Sagrera era ¡°muy importante¡±. Dijo que en el siglo IV era la propiedad de un gran dominus con instalaciones de relumbr¨®n como las termas, ¡°y ahora vemos que en una etapa muy antigua ya era residencia de un personaje de la ¨¦lite de Barcino, como prueba la estatua: esa pieza nos dice que no estamos ante una villa cualquiera¡±.