¡°Los ¡®punks¡¯ hemos perdurado; algo de talento tendr¨ªamos¡±

Puede que William Michael Albert Broad no figure entre los artistas m¨¢s emblem¨¢ticos de los a?os ochenta, pero s¨ª en las listas de ¡°placeres culpables¡±. Miles de nost¨¢lgicos de aquellos tiempos tan propensos al colorido y el histrionismo conservan ejemplares en vinilo de Rebel Yell (1984) o Whiplash smile (1986). Habr¨¢ cuarentones que no recuerden con nitidez a Billy Idol, pero seguro que en su momento bailotearon alguno de sus ¨¦xitos. No disimulen: Dancing with myself, Eyes without a face, Don¡¯t need a gun o, sobre todo, White wedding, ubicuo en videojuegos y tema central de la pel¨ªcula El chico ideal.

En realidad, el hombre del peinado cardado rubio ¡ªantecedente de ese punk para todos los p¨²blicos que hoy encarnan Green Day o Blink 182¡ª solo ha grabado un disco en los ¨²ltimos 19 a?os (Devil¡¯s playground, 2005), pero dice conservar intacta la vitalidad de sus mejores d¨ªas. Por eso est¨¢ ultimando sus memorias y asegura que en 2013 volver¨¢ a entrar en los estudios de grabaci¨®n. De momento, se ha embarcado en una gira que le acerca por vez primera a latitudes ib¨¦ricas: esta noche act¨²a en La Riviera despu¨¦s de haber pasado el martes por Bilbao.

Pregunta. ?Conserva a los 56 a?os aquel mismo talante rebelde del que hac¨ªa gala tres d¨¦cadas atr¨¢s?

Respuesta. Me considero todav¨ªa dentro de los par¨¢metros de una actitud punk-rock, sin duda. La vida te va proporcionando nuevas experiencias a lo largo de los a?os y me he interesado en otras formas musicales, pero la base sigue ah¨ª: he cambiado y no lo he hecho, si queremos entenderlo as¨ª. Mis conciertos actuales son un recorrido por mi primer grupo, Generation X, los ¨¦xitos en solitario y tres nuevas canciones: pasado, presente y futuro.

P. En los tiempos de Generation X usted lleg¨® a compartir banda con unos jovenc¨ªsimos Siouxsie o Steve Severin. ?Eran ya tipos con talento?

R. Talentosos o no, ¨¦ramos unos chavales a los que nos desagradaba el orden imperante. El rock progresivo nos parec¨ªa un aburrimiento y hac¨ªa falta una voz para nuestra generaci¨®n, as¨ª que dimos un paso adelante. Alguien ten¨ªa que mover el culo y ofrecer una alternativa a chavales como nosotros. Y hemos perdurado todos estos a?os, as¨ª que algo de talento s¨ª tendr¨ªamos¡­

P. ?Se sintieron pioneros?

R. Est¨¢bamos en la explosi¨®n. Generation X fue la cuarta banda londinense del movimiento punk, tras los Pistols, The Clash y The Damned. Incluso fuimos los primeros a la hora de mezclar el rock con el reggae para la cara B de Wild youth, all¨¢ por 1978.

P. Tambi¨¦n fue muy h¨¢bil al aprovechar la fuerza de la MTV, entonces un canal televisivo en pa?ales.

R. Me mud¨¦ a Nueva York a finales de los setenta y lo vi claro: la MTV iba a ser un boom. Siempre he tenido olfato. Vital Idol fue el primer disco de remezclas de baile, antes de que lo hicieran Madonna y tantos otros. Y Cyberpunk [1993] fue el primer ¨¢lbum con una pista interactiva. All¨ª hablaba sobre revoluciones cibern¨¦ticas que estamos viviendo ahora, dos d¨¦cadas m¨¢s tarde.

P. Uno de sus mayores ¨¦xitos, Dancing with myself, abord¨® un tema tan atrevido como el autoerotismo. ?Le gustaba provocar?

R. S¨¦ que muchos me toman por un hombre controvertido, pero no lo creo. Pretendo ser coherente con mis propios ideales, sin m¨¢s. La controversia ha existido y existe, pero me interesan m¨¢s la condici¨®n humana y las cosas del coraz¨®n.

P. En ocasiones pareci¨® vivir en el filo. ?Lamenta algo en particular?

R. Por supuesto: mi est¨²pido accidente en moto a principios de los noventa, por ejemplo. Pero incluso ese episodio me ha servido para ser mucho mejor conductor. As¨ª que, bien pensado, de todo se aprende.

P. Con esa actitud tan positiva, no es de extra?ar que eligiera ¡°¨ªdolo¡± como apellido art¨ªstico¡­

R. No, no tiene que ver, ja, ja. En realidad, estaba buscando alg¨²n nombre divertido y prob¨¦ en un primer momento con Billy Idle. Pero, claro, enseguida ca¨ª en la cuenta de que ya exist¨ªa Eric Idle, el tipo de los Monty Python, as¨ª que Idle evolucion¨® a Idol. Suena disparatado, pero fue as¨ª.

P. ?Y las nuevas canciones?

R. Ser¨¢n variadas, pero coherentes conmigo mismo. No tengo ni idea de c¨®mo escribir un ¨¦xito potencial, pero s¨ª de componer canciones que suenen a Billy Idol¡­

Billy Idol. Hoy, a las 21.00, en La Riviera (paseo bajo de la Virgen del Puerto, s/n; metro Puerta del ?ngel); 35 euros.