La justicia militar absuelve al jefe de maquinas de la fragata Extremadura

La justicia militar ha decidido absolver al jefe de m¨¢quinas de la fragata Extremadura, Pablo Varela, acusado por el accidente ocurrido el 19 de diciembre de 2005 que caus¨® la muerte a dos militares. El fallo del tribunal militar, conocido este lunes, no descarta una posible sanci¨®n administrativa. Seg¨²n la abogada de la acusaci¨®n el fallo deja la puerta abierta a una responsabilidad patrimonial del Estado porque, en su opini¨®n, la fragata no contaba con todas las revisiones de mantenimiento.

Asimismo, el fallo del tribunal abre un expediente disciplinario al jefe de m¨¢quinas, Pablo Varela, y al suboficial de m¨¢quinas, Alonso Garc¨ªa Paredes. Seg¨²n la acusaci¨®n, "es posible una responsabilidad disciplinaria por no haber transmitido las novedades al comandante".

La Fiscal¨ªa Militar y las dos acusaciones particulares solicitaban entre 1 y 3 a?os de prisi¨®n por "ineficacia en el servicio". Adem¨¢s, la acusaci¨®n ped¨ªa responsabilidades civiles que, en ambos casos, superaban los 300.000 euros. Por su parte, la defensa solicitaba la libre absoluci¨®n del procesado, alegando que el accidente se produjo por un "fallo material" en el tubo de bajada de la caldera. Tras conocer el fallo del tribunal militar, Isabel G¨®mez, la madre del marinero Erik Noval, ha lamentado la decisi¨®n. "Si esa noche el jefe de maquinas actuase como ten¨ªa actuar hoy mi hijo estar¨ªa conmigo", ha dicho. "No es culpable pero s¨ª hay expediente", ha cuestionado G¨®mez, quien ha anunciado que esperar¨¢ a conocer la sentencia, que est¨¢ prevista para el mes de septiembre, para emprender o no acciones legales contra la misma.

El suceso ocurri¨® la madrugada del 19 de diciembre de 2005 en el Arsenal militar de Ferrol. El buque zarpaba ese mismo d¨ªa para realizar una maniobras en alta mar y el oficial mand¨® arrancar la maquinaria. A las dos de la madrugada, una explosi¨®n en la sala de calderas de popa (1B) abras¨® a Erik Noval G¨®mez y Francisco P¨¦rez Castrill¨®n, dos marineros de 20 y 28 a?os que estaban de guardia. La Armada y el acusado sostuvieron desde el primer momento que el accidente se produjo por el desgaste de las tuber¨ªas de una fragata construida en los setenta en los astilleros ferrolanos y con tres d¨¦cadas de mar.? La perseverancia de Isabel G¨®mez, madre de Erik, impidi¨® que un tribunal togado militar coru?¨¦s archivase el caso en septiembre de 2009. El fiscal tambi¨¦n se opuso al sobreseimiento y el Tribunal Supremo les dio la raz¨®n y orden¨® abrir juicio oral. El periplo judicial del accidente de la fragata Extremadura ha estado siempre rodeado de controversia por las denuncias de un cabo primera del buque, Jorge Miguel Gago, que se?al¨® a los mandos de la Armada como responsables de un accidente que, en su opini¨®n, se pudo evitar y que siempre se afanaron en tapar mientras ascend¨ªan al acusado a teniente de nav¨ªo.