?Se puede aguantar sin elecciones?
En un clima de creciente inquietud socioecon¨®mica, Gobierno vasco y oposici¨®n sostienen argumentos divergentes sobre la conveniencia de acortar la legislatura
¡°En el momento en que el lehendakari vea que se tocan las l¨ªneas rojas, convocar¨¢ elecciones¡±, aseguran desde el entorno m¨¢s pr¨®ximo a Patxi L¨®pez, en la presidencia del Gobierno vasco. Ah¨ª est¨¢ la clave del principal enigma pol¨ªtico, al margen de la pol¨ªtica penitenciaria, que asoma en Euskadi bajo un clima social de creciente inquietud por los ¨²ltimos datos macroecon¨®micos y, principalmente, por el reflujo de la agobiante situaci¨®n del ¡°Reino de Espa?a¡±, terminolog¨ªa de inspiraci¨®n nacionalista que empieza a extenderse f¨¢cilmente entre el resto de la clase pol¨ªtica vasca.
Pero, ?qu¨¦ son las l¨ªneas rojas? ?cu¨¢ndo y por qu¨¦ se sabe que llegan a ser tocadas? Para el PNV, m¨¢s all¨¢ del concepto, ¡°la clave¡± est¨¢ en ¡°las cifras econ¨®micas que para primeros de septiembre vea el lehendakari y con las que se har¨¢ una composici¨®n de lugar de hasta d¨®nde puede llegar¡±. No se descarta que en el consejo de Gobierno de car¨¢cter extraordinario del pr¨®ximo 28 de agosto pudiera hacerse una primera lectura ¡°oficiosa y orientativa¡± del escenario econ¨®mico para valorar la capacidad de maniobra de un futuro anteproyecto de presupuestos. ¡°Habr¨¢ unas cifras de la recaudaci¨®n algo m¨¢s aproximadas, pero tendr¨ªamos que esperar a la entrada de septiembre para conocer repercusiones m¨¢s claras del IVA y de otras tributaciones¡±, admiten desde el propio Ejecutivo.
Para el futuro pol¨ªtico inmediato de Euskadi, agosto se ha convertido en un mes clave. La evoluci¨®n econ¨®mica guiar¨¢ la decisi¨®n final de L¨®pez. ¡°Jam¨¢s va a actuar por un inter¨¦s pol¨ªtico. Cuando vea que es imposible seguir adelante desde un punto de vista de beneficio para el pa¨ªs, convocar¨¢ elecciones¡±. L¨®gicamente, desde la oposici¨®n la lectura es mucho menos complaciente. ¡°Est¨¢ rentabilizando una posici¨®n de enfrentamiento que cree que le va a dar resultados, pero si la gente ve que sigue subiendo el paro, se dar¨¢n cuentas de que no tiene soluciones¡±, apunta un dirigente del PP vasco. En cambio, desde el Gobierno, un asesor aporta esta escena para ¡°proyectar¡± cu¨¢l es el criterio que maneja el lehendakari en su actual cruzada contra los recortes de Mariano Rajoy. ¡°Cuando el otro d¨ªa estaba escuchando que hab¨ªa que quitar la paga de Navidad a los funcionarios, su reacci¨®n fue decir que se aplicar¨ªa en las cuestiones de obligado cumplimiento y que no iba a rebelarse ni a ser insumiso, pero que en aquellas cuestiones como la base, la antig¨¹edad, donde tienes autonom¨ªa, la defensa iba a ser total¡±, recuerda.
Encuestas favorables
En el Gobierno vasco no quieren hablar de encuestas, aunque conocen sus resultados. ¡°Est¨¢n malditas en Euskadi¡±, afirma un portavoz a modo de justificaci¨®n para no adentrarse en detalles ¡°porque la gente sigue siendo remisa y ello lleva a un trabajo de cocina que puede desfigurar la realidad¡±. En el PSE-EE, en cambio, s¨ª las miran con m¨¢s inter¨¦s. Posiblemente porque en las ¨²ltimas semanas los indicios de los peque?os sondeos son m¨¢s alentadores.
Con anterioridad a la ruptura del pacto por parte del PP, las encuestas detectaban una presumible hecatombe, en niveles similares a los padecidos en 2011 durante la ¨²ltima ¨¦poca de Redondo Terreros. "Apenas se ve¨ªa la posibilidad de superar los 13 esca?os", admite un parlamentario socialista. Ahora, en plena resistencia de Patxi L¨®pez ante los recortes del Gobierno central, el panorama es n¨ªtidamente m¨¢s alentador. Seg¨²n estos estudios, el PSE-EE estar¨ªa en condiciones de asegurarse 17-18 esca?os en las pr¨®ximas auton¨®micas, un registro en niveles pr¨®ximos a los de 1988 cuando el Parlamento tambi¨¦n acogi¨® a la izquierda abertzale.
En su actual discurso, el lehendakari sostiene que se est¨¢ limitando ¡°a gobernar¡±. En su c¨ªrculo descartan que exista ¡°una presi¨®n¡± del mundo empresarial vasca para que adelante las elecciones. ¡°Las elecciones no est¨¢n en la preocupaci¨®n de la gente. La gente tiene problemas con el paro, con los gastos farmac¨¦uticos, con su paga de Navidad o con la p¨¦rdida del empleo, pero no cree que las elecciones sean ninguna panacea¡±. Desde las filas socialistas, refuerzan esta teor¨ªa recordando c¨®mo ¡°en Espa?a ya se han hecho elecciones generales y estamos viendo los resultados, que nos llevan al abismo cuando no se cansaban de decir desde el PP que ten¨ªan las soluciones¡±.
En el PNV, sin embargo, reconocen que ¡°son muchas¡± las llamadas de ¡°angustia¡± que vienen recibiendo desde las peque?as y medianas empresas por la falta de soluciones. Desde el Gobierno reconocen esta preocupaci¨®n, pero precisan que ¡°hay que distinguir entre la propia situaci¨®n del mercado y nuestra pol¨ªtica de compromiso con las empresas a las que venimos ayudando con l¨ªneas de financiaci¨®n que a muchas han permitido evitar el cierre¡±.
En el seno del EBB distinguen tres ¨¢reas de afectaci¨®n empresarial. ¡°Quienes exportan ahora est¨¢n bien porque la situaci¨®n les favorece con la ca¨ªda del euro; quienes dependen del marcado espa?ol est¨¢n desesperados porque la situaci¨®n es ca¨®tica y quienes necesitan de financiaci¨®n est¨¢n asfixiados¡±.
?Y las elecciones anticipadas ser¨ªan una soluci¨®n? Para el PNV, principal abanderado de acudir cuando antes a las urnas, ¡°no se trata de una cuesti¨®n de inter¨¦s pol¨ªtico, sino de armar cuanto antes una acci¨®n de gobierno fuerte para responder a las exigencias de esta situaci¨®n¡±.
Cuando L¨®pez vea que se tocan las ¡®l¨ªneas rojas¡¯ acaba la actual legislatura
En el PP, partidarios tambi¨¦n de acortar la legislatura, no manejan el t¨¦rmino de un gobierno fuerte. Su demanda consiste en que ¡°llegue de una vez el final para quienes se est¨¢n aprovechando de una situaci¨®n en beneficio de sus propios votos¡±. Los populares est¨¢n ¡°muy molestos¡± con las ¡°acometidas¡± de Patxi L¨®pez al Gobierno central porque entienden que son momentos de ¡°responsabilidad¡± y no de ¡°atrincherarse¡±.
Ante la proclama de un gobierno fuerte en Euskadi, los socialistas ya han armado su argumentario: ¡°?Qu¨¦ fuerza pol¨ªtica es capaz de decir ahora que en las pr¨®ximas elecciones va a tener m¨¢s de los 25 esca?os que ahora mismo tiene el PSE-EE? Que no hablen de un gobierno fuerte porque no quedar¨¢ otra salida que buscar acuerdos entre diferentes¡±.
Precisamente la nula respuesta de los partidos e instituciones a la ¨²ltima llamada desesperada de Patxi L¨®pez para acometer un plan conjunto en la adopci¨®n de medidas dinamizadoras contra la crisis ha golpeado el ¨¢nimo pol¨ªtico del lehendakari. ¡°Se ha sentido muy decepcionado¡±, admiten en Ajuria-Enea. ¡°Ha visto que cada uno busca su propia rentabilidad y ¨¦l cre¨ªa que son momentos en los que hay que arrimar el hombro¡±.
Desde el PNV le responden con rapidez. ¡°?Qu¨¦ pretende hacer un pacto para cu¨¢nto tiempo, para un mes, para dos, para tres? Ahora no puede venir con estas al final de la legislatura cuando desde el Gobierno han hecho una pol¨ªtica de acoso contra el PNV desde el primer d¨ªa¡±, admite un destacado burukide.
Pese a encajar este rev¨¦s estrat¨¦gico, el lehendakari ¡°se siente dispuesto¡± a seguir manteniendo su acci¨®n de gobierno ¡°porque es su responsabilidad¡±. Quienes le siguen de cerca aseguran que ¡°tiene el ¨¢nimo suficiente y est¨¢ con ganas¡±, pero admiten, con id¨¦ntica convicci¨®n, que ¡°no va a arrastrarse¡±.
En el PSE-EE, desde luego, no se creen la justificaci¨®n del PNV para reclamar las elecciones anticipadas. ¡°No est¨¢n haciendo una pol¨ªtica de proposici¨®n creativa, sino que parecen aprovechar la crisis para hacer m¨¢s nacionalismo, no hay una idea que nos permita saber qu¨¦ quieren hacer para que haya m¨¢s tejido productivo en este pa¨ªs¡±, comenta una de las voces socialistas con mayor ascendencia en el entorno laboral.
Los nacionalistas, en cambio, insisten en que su posici¨®n ¡°no es de naturaleza pol¨ªtica sino de exigencia econ¨®mica porque no se puede estar m¨¢s tiempo gobernando con esa soledad¡±, en alusi¨®n a la falta de apoyos parlamentarios de Patxi L¨®pez. Esta misma fuente tampoco precisa cu¨¢l ser¨¢ el planteamiento pol¨ªtico que su partido seguir¨¢ para fortalecer una futura opci¨®n de gobierno, pero s¨ª adelanta ¡°que I?igo Urkullu no gobernar¨¢ con las tripas y buscar¨¢ la soluci¨®n m¨¢s eficaz para el pa¨ªs¡±.
Hasta entonces, la divergencia surge en torno a si es posible seguir gobernando en la actual situaci¨®n. Para los socialistas ¡°es evidente¡± que ¡°se siguen atendido todos los retos y se van dando respuesta a los ajustes que desde el Gobierno de Rajoy se suman uno detr¨¢s de otro¡±. Asi las cosas, entienden desde Lehendakaritza que ¡°no hay raz¨®n alguna para que tenga que pararse todo lo que se est¨¢ haciendo y dedicarnos a abrir un per¨ªodo electoral para perder un par de meses preciosos en un momento donde hay que dar soluciones en el d¨ªa a d¨ªa¡±.
En el PNV temen que ¡°esta obstinaci¨®n¡± vaya a dejar ¡°las arcas vac¨ªas¡±. De hecho, ¡°asumimos c¨®mo van a estar las cuentas, lo que va a suponer el nivel de endeudamiento al que se est¨¢ llegando y la poca capacidad de maniobra que puede quedar¡±. Es aqu¨ª donde el Gobierno extiende la responsabilidad ¡°a la falta de un m¨ªnimo compromiso de todos los dem¨¢s para buscar nuevas f¨®rmulas de ingreso, una adecuaci¨®n de la pol¨ªtica fiscal, que no haya tres pol¨ªticas distintas en cada Diputaci¨®n¡± y desde el PSE-EE reducen a ¡°un mito¡± que ¡°al PNV se le pueda asociar con la buena gesti¨®n porque ah¨ª est¨¢n los casos de Epsilon, de la f¨¢brica de purines, de la Hacienda de Ir¨²n con Bravo o de las vacaciones fiscales que han acabado siendo letales como se est¨¢ comprobando¡±.
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