La oposici¨®n critica que se desviara el tr¨¢fico de la AP-7 y la N-II a Portbou

La decisi¨®n de desviar el tr¨¢fico de la N-II y la AP-7 por una carreterita secundaria, la N-260, que pasa por Portbou, fue duramente criticada ayer por la oposici¨®n en la comisi¨®n extraordinaria que se celebr¨® en el Parlament. ¡°?Qui¨¦n tom¨® la decisi¨®n de enviar cuatro carriles cargados a una carretera secundaria?¡±, pregunt¨® Oriol Amor¨®s, de ERC. ¡°?Fue prudente enviar a la gente hacia la N-260, una ratonera sin escapatoria?¡±, se sum¨® Xavier Sabat¨¦ (PSC). ¡°?Por qu¨¦ se desviaron los veh¨ªculos hacia esta carretera si, por sus caracter¨ªsticas, no pod¨ªa asumir el tr¨¢fico?¡±, incidi¨® tambi¨¦n el diputado Jaume Bosch (ICV-EUiA). Son preguntas, todas ellas, sin respuesta. Hasta pasadas las 19.30 horas, los coches continuaron circulando por esa carretera, hasta que la Generalitat dio la orden de levantar las barreras del t¨²nel del Cad¨ª y desviar por all¨ª la circulaci¨®n, ante el colapso y el incendio en Portbou.

Puig defendi¨® de nuevo su gesti¨®n, y tampoco admiti¨® que los bomberos llegasen una hora tarde, como denunci¨® el alcalde del municipio, Josep Llu¨ªs Salas. ¡°El primer coche lleg¨® a las 19.34¡±, especific¨® Puig, media hora despu¨¦s de que se hubiese iniciado el fuego, debido tambi¨¦n, seg¨²n las investigaciones, a una colilla que alguien lanz¨® por una ventana.

¡°?Si hubiese habido bomberos en Portbou, se podr¨ªan haber evitado las muertes?¡±, ahond¨® Bosch. Pero Puig atribuy¨® a la ¡°fatalidad¡± y a ¡°reacciones que no se pudieron contener¡± las dos v¨ªctimas mortales, un padre, de 46 a?os, y su hija, de 15, al precipitarse por un acantilado cuando hu¨ªan de las llamas. Y puso como ejemplo que el resto de personas que huyeron ladera abajo, en direcci¨®n al mar, al ver venir el fuego, resultaron en su mayor¨ªa ¨²nicamente magulladas.

Puig, adem¨¢s, respald¨® que los bomberos voluntarios del parque de Portbou hubiesen salido hacia La Jonquera, lo que hizo que no estuviesen en el municipio cuando se declar¨® el incendio. ¡°No iban a estar de brazos cruzados viendo como se quemaba el Empord¨¤¡±, esgrimi¨®. Aunque insisti¨® en que hab¨ªa un ret¨¦n en Llan?¨¤ y otro en Roses. Los medios a¨¦reos, seg¨²n fotograf¨ªas de varios testigos, tardaron una hora en llegar.