La escuela del escenario
El actor y director ruso Algis Arlauskas defiende la capacidad del teatro universitario para ense?ar a dialogar y trabajar en equipo
¡°El teatro es escuela de muchas cosas¡±, defiende el actor, profesor de interpretaci¨®n, guionista y director de cine Algis Arlauskas (Mosc¨², 1957). ¡°Es un medio de comunicaci¨®n y un medio creativo que ense?a a trabajar en equipo, a abordar proyectos, a unir voluntades y preocupaciones. Es una escuela de di¨¢logo con la sociedad, de canalizar su actitud moral, de ciudadanos¡±, agrega.
Razones no le faltan para alentar el teatro universitario, tanto en las aulas como fuera de ellas. Arlauskas, con 20 a?os de trabajo en la docencia teatral en distintos puntos de Europa, es profesor asociado en la Universidad de Navarra y ha dirigido el primer festival de teatro universitario del Pa¨ªs Vasco. ¡°La gente joven tiene inquietudes y los universitarios m¨¢s, porque pueden apoyarse en el conocimiento y el nivel cultural recibido en las aulas, que a veces otros niveles de teatro aficionado no tienen¡±, incide.
El pasado julio logr¨® reunir a cinco grupos en el Campos El¨ªseos, en Bilbao, para demostrar con sus montajes de obras de Shakespeare, Ch¨¦jov y Sartre que la escena universitaria existe.
Arlauskas ha dirigido el primer festival de teatro universitario del Pa¨ªs Vasco
La iniciativa se abri¨® a grupos del Pa¨ªs Vasco y Navarra, surgidos en las universidades y en las escuelas teatrales. ¡°Aqu¨ª la sociedad no conoce el fen¨®meno del teatro universitario; en otros pa¨ªses es una instituci¨®n¡±, destaca. ¡°En Francia, en Inglaterra, en Rusia est¨¢n orgullosos de tener en el campus un buen edificio destinado a ello¡±.
Arlauskas, hijo de madre vasca y padre lituano, pone el foco de atenci¨®n en los grupos universitarios como cantera de talentos para la escena. ¡°Peter Brook surgi¨® del teatro universitario y muchos actores espa?oles se forjaron en esos grupos, como Imanol Arias¡±, explica.
¡°En Euskadi Hay talleres en la UPV con buenos resultados, pero nada m¨¢s¡±, indica
?Por qu¨¦ en Espa?a ha quedado tan relegado? ¡°En los a?os sesenta y setenta fue un boom porque estaba nutrido y apoyado por movimientos sociales¡±, recuerda Arlaukas. ¡°La sociedad consideraba el teatro estudiantil, y, lamentablemente, lo sigue considerando, como un fen¨®meno que altera la vida acad¨¦mica¡±, apunta.
El actor y director ve tambi¨¦n ¡°lamentable¡± la situaci¨®n en el Pa¨ªs Vasco. Arlauskas inscribe la situaci¨®n en la falta de cultura sobre el g¨¦nero. ¡°Surgen teatros y festivales, la gente va m¨¢s al teatro, pero el caldo de cultivo para que gane prestigio a¨²n cojea¡±, a?ade. ¡°Hay talleres en la Universidad del Pa¨ªs Vasco con buenos resultados, pero nada m¨¢s. El teatro exige unos espacios y una atenci¨®n, un apoyo que las universidades no dan. Lo tratan como algo subversivo, en cierto modo, algo que altera el ritmo de la vida acad¨¦mica¡±.
Que nadie se alarme por el peligro de que los alumnos sacrifiquen el estudio por las tablas. ¡°El 90% de la gente que participa en el teatro sacan buenas notas. Forma a la persona y asienta el h¨¢bito del trabajo¡±, concluye.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.