Un derecho en medio de la presi¨®n

Es f¨¢cilmente comprensible que la puerta abierta al tercer grado penitenciario del preso etarra Iosu Uribetxeberia Bolinaga precipite la tentaci¨®n de un an¨¢lisis reduccionista para saber si se ha impuesto la firme defensa desde Interior de una legislaci¨®n penitenciaria exprimida o el desgaste que supone el eco internacional de la exigencia abertzale. Es mucho m¨¢s que esa doble punta del iceberg que asoma.

Con la escenificaci¨®n compartida de este pulso se evidencian las antag¨®nicas posturas que Gobierno central y el entorno soberanista sostienen sobre una de las piedras angulares del nuevo escenario sin violencia.

El PP proyecta as¨ª con explicita nitidez que no va a abrir la mano con los presos de ETA salvo por causa de fuerza mayor, como la que ahora mismo le ocupa. Vaya, que los objetivos de Aiete se antojan todav¨ªa una quimera diez meses despu¨¦s de anunciarse la paz. ?Acierta? Entre su granero electoral, sin duda y entre quienes lamentan que no se haya escuchado desde la izquierda abertzale un m¨ªnimo recuerdo comprensivo al dolor de Ortega Lara, tambi¨¦n. Pero lanza un jarro de agua fr¨ªa a quienes esperaban una reacci¨®n mas inmediata que le hubiera permitido aplicar la excepcionalidad de la ley sin riesgo de debilidad ni entreguismo y, de paso, diluir el impacto reivindicativo y victimista de una orquestada presi¨®n callejera y medi¨¢tica, que siempre acaba rentabilizando sus gestos.