¡°Hay una especie de leyenda negra con los fuegos¡±
¡°Hay que ver la pirotecnia m¨¢s como una inversi¨®n que como un gasto¡±, afirma la gerente de la empresa Astondoa
Los recortes tambi¨¦n llegan a las fiestas, y los espect¨¢culos pirot¨¦cnicos est¨¢n siendo el primer objetivo de las tijeras. Aunque el concurso de fuegos artificiales de la Aste Nagusia funcionar¨¢ como otros a?os, en otras ciudades como Vitoria o Barakaldo ya se han empezado a reducir estos espect¨¢culos. Izaskun Astondoa (Bilbao, 1962), gerente de la pirot¨¦cnica vizca¨ªna hom¨®nima, reflexiona sobre la situaci¨®n del sector.
Pregunta. Parece que, con los ajustes, los fuegos artificiales son los primeros en caer de los programas festivos.
Respuesta. Hay una especie de leyenda negra con el fuego artificial que dice que es caro. Y, aunque sea barrer para casa, realmente no es tan caro como se percibe. Se suele decir que son veinte minutos y no s¨¦ cu¨¢ntos mil euros, pero no se dice que esos veinte minutos son para much¨ªsima gente, y adem¨¢s, gente de todo tipo.
P. A diferencia de los conciertos, por ejemplo.
R. Cada concierto tiene un determinado p¨²blico objetivo, y, sin embargo, los fuegos abarcan de ni?os a gente mayor. De hecho, siempre se ha dicho que, por ejemplo, en la Aste Nagusia los fuegos hacen de espect¨¢culo bisagra entre los que se retiran y los que empiezan. Por eso, habr¨ªa que pensarlo mejor antes de prescindir de estos espect¨¢culos.
P. Pero, mientras los fuegos sigan siendo lo primero de lo que se prescinde, ?c¨®mo va a reaccionar el sector?
R. Afrontaremos las cosas como son. Y es que es la realidad. Estamos en una situaci¨®n de crisis que afecta a todo el mundo y, sobre todo, a las Administraciones locales, que son las que suelen contratar estos eventos. Y es l¨®gico que la Administraci¨®n recorte, pero no hay que quedarse solo en el ¡°yo recorto¡±. Hay que ver que ese recorte implica dejar de mover a determinada gente, que puede repercutir en la hosteler¨ªa y otras actividades.
P. ?No se valora todo lo que aportan los fuegos?
R. Con esta crisis estamos cambiando el concepto de inversi¨®n por el de gasto. Y creo que al final hay que ver los fuegos m¨¢s en t¨¦rminos de inversi¨®n que de gasto.
P. ?El espectador vasco sabe apreciar unos fuegos?
R. S¨ª. Llevo muchos a?os en Bilbao y San Sebasti¨¢n y hace tiempo que veo que la gente sabe valorar. Por los aplausos, por los silencios, por los comentarios¡ Empieza a no ser cierto que los fuegos son solo ruido. Eso ya no nos vale. Si as¨ª fuera, el a?o pasado no hubiese ganado en Bilbao la empresa sueca, que hizo un espect¨¢culo menos ruidoso, pero muy bello.
P. ?Est¨¢ el sector preparado para salir de la crisis?
R. Hombre, no puedo negar que lo estamos pasando mal, aunque cada empresa es un mundo. Nosotros, por ejemplo, tambi¨¦n vendemos el producto a intermediarios o a la gente. Pero, sin utilizar las palabras m¨¢gicas de estos tiempos, como innovaci¨®n o internacionalizaci¨®n, estamos obligados, como cualquier empresa, a reinventarnos cada d¨ªa. Si hay una l¨ªnea de negocio agotada, habr¨¢ que buscar otras. Hay otras posibilidades m¨¢s all¨¢ de los fuegos.
P. ?Entonces, hay futuro?
R. Creo que s¨ª. Hay que mantener la iniciativa. Le atribuyen a Einstein la frase ¡°no puedes seguir haciendo lo mismo y pretender que las cosas cambien¡±. Recuerdo a mi aitite haciendo cohetes, y, aunque hoy seguimos haci¨¦ndolos, tenemos abiertas otras cinco l¨ªneas de negocio muy distintas. El cambio en la empresa ha sido importante y ah¨ª est¨¢ la clave.
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