C¨¢stulo, un libro abierto de arte romano
Descubierto un nuevo mosaico del siglo I en perfecto estado de conservaci¨®n
El yacimiento de la ciudad ibero-romana de C¨¢stulo, en Linares (Ja¨¦n), no para de arrojar sorpresas y se ha convertido ya en un libro abierto sobre la cultura romana. En esta ocasi¨®n, los arque¨®logos que participan en las excavaciones del Proyecto F¨®rum MMX han sacado a la luz un mosaico del Alto Imperio Romano que llama la atenci¨®n por su excelente estado de conservaci¨®n, algo que tampoco es habitual en este foro romano, donde lo normal es que las edificaciones se solapen unas detr¨¢s de otras.
Se trata de un mosaico con unas dimensiones excavadas de 12 por 6 metros, aunque los expertos creen que finalmente se descubrir¨¢ una sala cuadrada de 12 por 12 metros. ¡°Destaca sobre todo por su enorme variedad crom¨¢tica y su excepcional estado, con solo una capa de ceniza por encima que ha ayudado a su preservaci¨®n¡±, subray¨® Marcelo Castro, director del proyecto arqueol¨®gico de C¨¢stulo.
El mosaico forma parte de un edificio del que a¨²n no se ha concretado su uso, aunque se piensa que fue p¨²blico, probablemente un altar o la sede de un colegio y una cofrad¨ªa dedicada al culto imperial, de ah¨ª su demolici¨®n intencionada tras la ca¨ªda en desgracia de un emperador. Castro sostiene que se trata de un edificio al que antes de ser destruido le fue retirada la cubierta, y que, o bien no entr¨® en uso o estuvo funcionando durante muy poco tiempo, sin que se deteriorara el pavimento.
Entre las escenas aparecen los mitos de Paris y de la diosa Selene
El mosaico cuenta con teselas de peque?o tama?o, caracter¨ªsticas del Alto Imperio y semejantes a las de Pompeya, de piedra y pasta de vidrio en tonos rojos, amarillos, verdes o azules, y con alegor¨ªas en sus esquinas de las cuatro estaciones.
Los estudios preliminares de los arque¨®logos han determinado que estamos ante un mosaico de finales del siglo I y principios del siglo II. El descubrimiento viene a completar el hallazgo del pasado junio, cuando salieron a la luz los restos de un templo de culto imperial que conservaba las alegor¨ªas de las estaciones.
La excavaci¨®n ha estado dirigida por Concepci¨®n Chocl¨¢n, que resaltaba la novedad de este mosaico, ya que en Andaluc¨ªa la mayor¨ªa de los localizados pertenecen a una ¨¦poca m¨¢s tard¨ªa. Chocl¨¢n explic¨® a Efe que las im¨¢genes muestran gran calidad y realismo, muy perfiladas, semejantes a las aparecidas en el norte de ?frica o Sicilia, lo que demuestra la relaci¨®n que hubo entre C¨¢stulo y el Mediterr¨¢neo.
As¨ª, seg¨²n la directora de la excavaci¨®n, se pueden ver animales de garra (que en los romanos legitimaban el poder) como una tigresa, una leona y un le¨®n, y animales de pezu?a (que unen a la tierra), como un jabal¨ª, un venado y un caballo o una yegua. La parte central cuenta en escenas, de forma clara, dos mitos cl¨¢sicos: uno es el del juicio de Paris, por el que comenz¨® la guerra de Troya, tras el enfrentamiento de Juno, Venus y Minerva por la manzana de la discordia. Tambi¨¦n aparece el mito de Selene (diosa griega que en la mitolog¨ªa romana era Luna) y Endimi¨®n, pastor del que se enamor¨® y que cay¨® en un profundo sue?o del que solo despertaba para ella.
La excavaci¨®n forma parte de la segunda campa?a del Proyecto Forum MMX C¨¢stulo, que impulsa el Centro Andaluz de Arqueolog¨ªa Ib¨¦rica con sede en la Universidad de Ja¨¦n. Un proyecto que destaca por la aplicaci¨®n de las nuevas tecnolog¨ªas a la arqueolog¨ªa. En concreto, se est¨¢ empleando el sistema TooWaste (tecnolog¨ªas para la traslaci¨®n arqueol¨®gica de las historias en la tierra), desarrollado en colaboraci¨®n con la empresa gallega Ayco.
El yacimiento de C¨¢stulo fue catalogado el a?o pasado por la Junta de Andaluc¨ªa como Conjunto Arqueol¨®gico e instituci¨®n del Patrimonio Hist¨®rico Andauz con gesti¨®n diferenciada, lo que supone equipararlo con lugares como Madinat Al-Zahra o Baelo Claudia. La ciudad ibero-romana de C¨¢stulo fue escenario de la Segunda Guerra P¨²nica que enfrent¨® a cartagineses con romanos y una de las pocas ciudades que acu?aron su propia moneda desde finales del siglo III antes de Cristo.
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