Veinte a?os sobre el div¨¢n

Agust¨ªn Sciammarella lleg¨® a EL PA?S en 1992 con una carpeta bajo el brazo. Acababa de aterrizar en Espa?a y sus dibujos no ten¨ªan mucho en com¨²n con lo que se supon¨ªa que deb¨ªa publicar un diario serio. Retorcidos, expresionistas, con vocaci¨®n de retrato psicol¨®gico, a primera vista pod¨ªan parecer demasiado exigentes para el lector medio. Pero no. Veinte a?os despu¨¦s de abrir la carpeta no se concibe la actualidad gr¨¢fica del pa¨ªs sin ese estilo, sin el div¨¢n sobre el que Sciammarella tumba a sus retratados.

Desde hoy y hasta el 14 de octubre una exposici¨®n en la Fundaci¨®n Diario Madrid (Larra, 14) re¨²ne 200 obras elaboradas por el artista para este diario. Sciammarella (Buenos Aires, 1965) es un hombre que habla bajito. ¡°La muestra no tiene mucha historia¡±, dice. ¡°Bueno, 20 a?os de historia¡±, corrige sin intenci¨®n de ser chistoso. Para presentar su obra, la muestra combina dos criterios: el m¨¦rito est¨¦tico y la importancia noticiosa del retratado. El resultado oscila entre la cr¨®nica y el arte, quiz¨¢ a lo que todo periodista aspira (con resultado normalmente m¨¢s que discreto). Como ep¨ªtome del asunto, ah¨ª est¨¢ el dibujo de Mario Conde en representaci¨®n de la serie que Sciammarella elabor¨® para la cobertura del juicio de Banesto. ¡°No pod¨ªan entrar c¨¢maras en el proceso, as¨ª que all¨ª fui yo cada sesi¨®n con un l¨¢piz¡±, cuenta.

Veinte a?os de dibujos muestran la evoluci¨®n del artista. Media un mundo desde el primero ¡ªun Miguel Indurain arqueado sobre la bicicleta del Tour de 1992¡ª al retrato grupal de los protagonistas del sainete de Bankia este a?o, ¨²ltima obra del cat¨¢logo. ¡°Cambiamos tanto yo como el peri¨®dico, por ejemplo con el paso del blanco y negro al color¡±, explica Sciammarella. Con los a?os las figuras se hacen m¨¢s sint¨¦ticas, la t¨¦cnica del collage adquiere peso, y el juego de texturas y color se convierte en ingrediente fundamental. Dos ojos de medusas verdes son Bette Davis; una mancha de arcilla, Cela; unas paletas, Ronaldo. Ferran Adri¨¢ se deconstruye en una pompa, una mol¨¦cula de prote¨ªna y vegetal.

Lo peque?o y lo grande caben en el mismo cartapacio. Historias locales como las luchas entre Gallard¨®n y ?lvarez del Manzano comparten sitio con la cr¨®nica internacional, resumida en un Donald Rumsfeld a pedacitos. ¡°A este lo hice usando el papel del ba?o de la redacci¨®n¡±, se?ala el collage.

Veinte a?os de Sciammarella en El PA?S. Fundaci¨®n Diario Madrid (Larra, 14).