V¨¢zquez justifica las tensiones en el PSdeG frente a la ¡°dedocracia¡± del PP
La elaboraci¨®n de las candidaturas deja profundas heridas entre los socialistas
24 horas despu¨¦s de someterse al rigor del m¨¢s duro debate interno en muchos a?os, el secretario general del PSdeG, se aisl¨® del ruido en Estrasburgo. En la sede del Parlamento Europeo, Pachi V¨¢zquez pas¨® la p¨¢gina del desenlace de la confecci¨®n de las listas, tan corto como intenso. El adelanto de las auton¨®micas concentr¨® en apenas dos semanas el proceso, pero la pelea de barones, territorios y dirigentes por hacerse un hueco en las candidaturas desencaden¨® una terapia de grupo en el comit¨¦ nacional del lunes que hizo dudar a muchos socialistas de la posibilidad de una reconciliaci¨®n. V¨¢zquez redujo el conflicto a simple debate. "Llevo mucho tiempo asistiendo a procesos de este tipo y siempre pasa lo mismo", afirm¨® V¨¢zquez, que redujo las diferencias a un simple "debate".
?"No he visto en mi vida un comit¨¦ nacional semejante", reconoce en cambio un veterano militante socialista para resumir la crudeza de los ataques, concentrados en dos objetivos. De un lado, el secretario general y candidato, que se llev¨® la mayor parte de las cr¨ªticas. Del otro, el secretario provincial de A Coru?a, Francisco Caama?o, que fue diana de las intervenciones m¨¢s duras, a menudo convertidas en descalificaciones personales. Los dos art¨ªfices del pacto que sofoc¨® el conato de rebeli¨®n de la ejecutiva de los socialistas coru?eses pagaron la tensi¨®n que precedi¨® el acuerdo, sellado horas antes del comit¨¦ nacional, y que tuvo como principal v¨ªctima la agrupaci¨®n local coru?esa que dirige Mar Barc¨®n.
El olfato del exvicesecretario general del PSOE Jos¨¦ Blanco le hizo temer que el comit¨¦ pod¨ªa derivar en batalla campal. Fue la raz¨®n por la que se apresur¨® a solicitar la palabra y advertir que las 55 intervenciones que se demandaron no pod¨ªan servir de munici¨®n al rival pol¨ªtico, "que no es otro que el Partido Popular". Pinch¨® en hueso. Nadie renunci¨® a su turno, y comenz¨® el pimpampum contra V¨¢zquez y Caama?o. La militancia protest¨® por lo que consider¨® un pacto entre barones, y los representantes de comarcas hicieron llegar a la direcci¨®n del partido las lagunas territoriales que dibujan los puestos de salida de las cuatro listas.
Pachi V¨¢zquez, que se reuni¨® en Estrasburgo con la comisaria europea de Pesca, Mar¨ªa Damanaki, y con el vicepresidente de la Comisi¨®n Europea, Joaqu¨ªn Almunia, se qued¨® con el lado positivo. "Al final, las listas se aprobaron con el 88% de apoyos", resalt¨®. En efecto, las candidaturas fueron aprobadas con el apoyo del la gran mayor¨ªa de los miembros del comit¨¦ nacional (218 votos a favor frente a 33 abstenciones), lo que apenas oculta la anomal¨ªa de que en el PSdeG unas listas deban someterse a votaci¨®n. V¨¢zquez ampli¨® el escenario de los conflictos a las dem¨¢s formaciones pol¨ªticas. "Todos los partidos tienen procesos de tensi¨®n" al elaborar las candidaturas, se defendi¨®. Y a la afirmaci¨®n de Feij¨®o de que el PP puede confeccionar sus listas en una tarde, replic¨®: "Es la diferencia entre la democracia y la dedocracia, que la primera lleva m¨¢s tiempo".
Pero lo cierto es que la sensaci¨®n que deja entre los militantes el duro debate del lunes es que se traspasaron muchas de las l¨ªneas rojas que el PSdeG suele respetar, lo que da paso a la inc¨®gnita de la implicaci¨®n con que se desempe?ar¨¢n en la campa?a electoral las comarcas que se considera ignoradas en la confecci¨®n de las candidaturas. Es el caso de Arousa y el sur de la provincia de Pontevedra, de la capital de Ourense -cuyo alcalde est¨¢ enfrentado a Pachi V¨¢zquez-o del Barbanza en A Coru?a. Ninguno de los tres representantes de la agrupaci¨®n local coru?esa en puestos de salida goza de la simpat¨ªa de la ejecutiva local, lo que tambi¨¦n puede desentender a la agrupaci¨®n que lidera Mar Barc¨®n de la campa?a electoral. Empe?ado en restarle relevancia a la tensi¨®n del comit¨¦ nacional, el candidato a la presidencia de la Xunta descart¨® que la divisi¨®n le pueda pasar factura a su partido en la campa?a electoral.
Precisamente en la ciudad de A Coru?a se origin¨® el incendio principal, cuando V¨¢zquez quiso introducir cambios en la lista que elabor¨® Caama?o para ofrecerle un puesto a Jos¨¦ Luis M¨¦ndez Romeu, coordinador del programa electoral. Ya que M¨¦ndez representa a la agrupaci¨®n local de A Coru?a, otro coru?¨¦s deb¨ªa hacerle un hueco. La soluci¨®n pactada pasaba por bajar del n¨²mero dos al siete a la coru?esa Mar¨ªa Deb¨¦n , af¨ªn a Mar Barc¨®n. Pero la secretaria local lo consider¨® un desaire, por lo que se opuso y le solicit¨® a Deb¨¦n que renunciara a ir en la candidatura. Pachi V¨¢zquez reaccion¨® dando paso a Mari¨¢n Ferreiro, enfrentada a Barc¨®n. Fue la chispa que hizo estallar el polvor¨ªn de nervios acumulados desde la aclamaci¨®n sin debate previo de V¨¢zquez como candidato a la presidencia de la Xunta, el pasado 1 de septiembre. La intevenci¨®n de Juventudes Socialistas y de las comarcas olvidadas en el reparto hizo el resto.
Pesca, astilleros y preferentes
La agenca de la primera jornada de Pachi V¨¢zquez en Estrasburgo se inici¨® con una entrevista con la comisaria de Pesca, Mar¨ªa Damanaki, continu¨® con una reuni¨®n con el vicepresidente de la Comisi¨®n Europea, Joaqu¨ªn Almunia, y se complet¨® con una breve intervenci¨®n del candidato a la presidencia de la Xunta en la reuni¨®n que ayer celebraba el Grupo Socialista en el Parlamento Europeo. Su presidente, el austriaco Hannes Swodoba, centr¨® el reto de V¨¢zquez en demostrar que existe "una alternativa a la derecha que rechaza las pol¨ªticas de austeridad". V¨¢zquez recogi¨® el guante y situ¨® las elecciones del 21 de octubre en un contexto "completamente abierto".
"Queremos demostrar que hay que aplicar modelos distintos", explic¨® el candidato a los eurodiputados socialistas, que interrumpieron durante diez minutos su debate para cederle la palabra. V¨¢zquez critic¨® la "carrera alocada que conduce a m¨¢s paro y menos sanidad, educaci¨®n y servicios sociales". "Hay que ponerle coto", previno. Explic¨® que el PP ya se llev¨® sendos "avisos" en Asturias y Andaluc¨ªa, pero puso a Galicia en el centro de la pol¨ªtica espa?ola y convirti¨® las auton¨®micas en un plebiscito: "La regi¨®n que va a decidir el par¨®n o la legitimaci¨®n de la derecha espa?ola para seguir en la pol¨ªtica de recortes y destrucci¨®n de derechos va a ser Galicia".
V¨¢zquez sali¨® satisfecho de las reuniones con Damanakis y Almunia. De la primera logr¨® un compromiso para renegociar el convenio pesquero con Mauritania, de forma que se pueda incluir a la flota cefalopodera, aunque inst¨® a la Xunta a dar el primer paso para trasladar una propuesta al Gobierno espa?ol. Tambi¨¦n se asegur¨®, dijo V¨¢zquez, el apoyo de la comisaria a la consideraci¨®n del marisqueo a pie como una forma m¨¢s de pesca, para que pueda acceder a ayudas europeas. El tax lease y las preferentes monopolizaron la entrevista con Almunia. Sobre la primera, asegur¨® que el tambi¨¦n comisario de Competencia pidi¨® la aportaci¨®n del Gobierno espa?ol para resolver cuanto antes un sistema que permita al naval gallego salir de su actual crisis. En cuanto a las preferentes, V¨¢zquez situ¨® la soluci¨®n en el ¨¢mbito de las competencias de Rajoy, mediante una figura que permita reconocer como ahorradores a los poseedores de ese tipo de participaciones.
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