Arantzazu recuerda a su pintor

¡°El retablo es la gran obra de Arantzazu sin quitar nada a Oteiza y compa?¨ªa. Mucha de la magia que se vive en el templo se debe a Lucio Mu?oz¡±. Para I?aki Beristain, franciscano y representante del santuario de la patrona de Gipuzkoa, no hay duda, el mural que decora el altar del templo constituye uno de sus elementos m¨¢s significativos. A pesar de que Jorge Oteiza, Eduardo Chillida o N¨¦stor Basterretxea fueron algunos de los artistas que participaron en la decoraci¨®n del templo. El mural, elemento nuclear del santuario, celebra el pr¨®ximo mes de octubre su 50 aniversario, para el que sus responsables han organizado este s¨¢bado una serie de actos conmemorativos.

Antonio L¨®pez participar¨¢ en una mesa redonda sobre la obra de Mu?oz

El homenaje incluye una mesa redonda con la presencia del pintor Antonio L¨®pez y de uno de los hijos del artista de Arantzazu, Rodrigo Mu?oz, adem¨¢s de la edici¨®n de un monogr¨¢fico y una visita guiada al templo por el arquitecto Miguel ?ngel Alonso.

El pintor Lucio Mu?oz (Madrid, 1929 - 1998), c¨®mo record¨® ayer Beristain en el acto de presentaci¨®n del homenaje, realiz¨® en dos, tres meses los 600 metros cuadrados del mural. La obra est¨¢ considerada una de las piezas de arte religioso m¨¢s importantes del siglo XX y en su d¨ªa bati¨® r¨¦cords de dimensiones, a pesar de que Lucio ¡°era agn¨®stico. Siempre dec¨ªa que ¨¦l en qui¨¦n cre¨ªa era en la virgen de Arantzazu¡±. Esa fe en la patrona de Gipuzkoa cuaj¨® cuando en los a?os 60 gan¨® el concurso para hacerse cargo del ¨¢bside y descubri¨® por primera vez el templo y su paraje.

Los actos se completan con una visita guiada al santuario por un arquitecto

Un entorno que Lucio quiso encerrar con su obra en el ¨¢bside del templo, subray¨® Beristain, con un ¨¢rbol que progresivamente va creciendo, combinando los colores m¨¢s ocres en la base, para ir aclar¨¢ndose mientras las ramas escalan hacia el techo. El h¨¢bil juego del artista con la paleta de colores permite, entre otras cosas, que la talla de la virgen de Arantzazu, de 36 cent¨ªmetros de altura, resalte y sea reconocible desde cualquier punto del templo a pesar de estar incrustada en un mural de 600 metros cuadrados. ¡°Recuerdo, que cuando terminaron la obra, se olvidaron de pintar uno de los trozos, tapado por los andamios, entonces, Lucio at¨® dos escaleras y a uno de sus alumnos, cargado con una brocha, le dio instrucciones desde el suelo para terminarlo¡±, rememor¨® el franciscano.

Los actos de homenaje adem¨¢s se completan con unas breves actuaciones del organiza Esteban Elizondo, ya que el pintor era un apasionado de la m¨²sica y con un concurso de pintura con categor¨ªa para adultos, juvenil e infantil, que se celebrar¨¢ el mismo s¨¢bado. Beristain solicit¨® que a trav¨¦s del tel¨¦fono 943 782 542 todos aquellos interesados en acercarse este s¨¢bado a Arantzazu lo comuniquen con antelaci¨®n y reserven una plaza.