El tribunal que conden¨® a Oubi?a por blanqueo decidir¨¢ si vuelve a prisi¨®n

La vuelta a la c¨¢rcel del traficante de hach¨ªs que m¨¢s tiempo ha permanecido en las c¨¢rceles espa?olas depende de la decisi¨®n del tribunal que acaba de condenarle a casi cinco a?os de prisi¨®n por blanqueo de dinero. Dos meses despu¨¦s de haber zanjado sus deudas con la justicia, la ¨²ltima palabra sobre la libertad de Laureano Oubi?a la tiene ahora el mismo tribunal que en agosto pasado tambi¨¦n le absolvi¨® de una pena mayor por el mismo delito.

Oubi?a tendr¨¢ que comparecer ma?ana con su abogado en la Audiencia Nacional para asistir a una vista oral en la que el fiscal del caso defender¨¢ ante el tribunal sentenciador la conveniencia de que el condenado ingrese en prisi¨®n, al considerar que existe un alto riesgo de que se fugue dados sus antecedentes.Su abogado, el conocido penalista madrile?o Joaqu¨ªn Ruiz Jim¨¦nez, que ya le represent¨® en anteriores procesos, podr¨¢ rebatir la petici¨®n del fiscal pero tendr¨¢ que aportar pruebas convincentes de que su cliente no va a sustraerse de la acci¨®n de la justicia hasta que el Tribunal Supremo resuelva el recurso de casaci¨®n contra el fallo que presentar¨¢ el pr¨®ximo lunes.

Nada m¨¢s conocerse la sentencia, la Fiscal¨ªa Antidroga solicit¨® la celebraci¨®n de la vista para que se adopten medidas cautelares. En su escrito, la fiscal¨ªa valora que la elevada condena impuesta agrava la situaci¨®n procesal de Oubi?a y cree que es necesario evaluar sus circunstancias personales que requieren, en su opini¨®n, la adopci¨®n de medidas que aseguren que el condenado no va a huir.

La propuesta del fiscal, Javier Redondo, es acordar bien la prisi¨®n incondicional de Oubi?a por el tiempo m¨¢ximo de dos a?os que establece la ley en estos casos, que cumpla como preventivo la mitad de la condena o que se le imponga una fianza elevada en el supuesto de que los magistrados se inclinen por que siga en libertad. La petici¨®n valora la escasa posibilidad de que el recurso del condenado prospere en el Supremo porque en caso contrario Oubi?a podr¨ªa incluso reclamar una indemnizaci¨®n al Estado. La fiscal¨ªa considera que la sentencia ¡°est¨¢ bien fundamentada¡±.

Es probable que la decisi¨®n se conozca ma?ana mismo, al t¨¦rmino de la vista que comenzar¨¢ a las diez de la ma?ana, seg¨²n adelantaron fuentes judiciales. Si acuerda el ingreso en prisi¨®n de Oubi?a, este podr¨ªa regresar a la c¨¢rcel en cuesti¨®n de horas.

El desenlace del noveno proceso judicial contra Oubi?a marca un precedente en la historia del narcotr¨¢fico. En casos similares, la justicia se ha inclinado por adoptar medidas cautelares antes de la celebraci¨®n del juicio y cuando el acusado se encontraba en libertad bajo fianza, acordando su detenci¨®n en previsi¨®n de una sentencia condenatoria.

El pasado de Oubi?a y su fuga en 1999, cuando esta misma Secci¨®n Cuarta de la Audiencia Nacional le impuso la primera condena de cuatro a?os por tr¨¢fico de hach¨ªs, marc¨® para siempre su larga carrera penitenciaria.Una prolongada fuga que acab¨® con su captura en Grecia y un proceso de extradici¨®n que durante meses abri¨® portadas de peri¨®dicos y telediarios. Desde entonces Oubi?a ha permanecido en prisi¨®n hasta el pasado 17 de julio.

El castigo del narco fugado no se hizo esperar y las primeras medidas llegaron avaladas por la condena. Una de ellas la adopt¨® el entonces juez instructor de casi todas sus causas, Baltasar Garz¨®n, cuando firm¨® un auto acordando iniciar el proceso para decomisar el pazo Bai¨®n. Otro sonado episodio en su historial vino del juez central de Vigilancia Penitenciaria, Jos¨¦ Luis Castro, que pretend¨ªa que Oubi?a cumpliese el tercer grado realizando servicios sociales. El auto qued¨® sin efecto porque el reo no sali¨® de la c¨¢rcel en la fecha prevista al ser expedientado por tener un m¨®vil en la celda.