Los presos de Alhaur¨ªn usan m¨®viles porque no funciona el inhibidor

El reglamento penitenciario prohibe el uso de tel¨¦fonos m¨®viles a los presos, pero en el penal de Alhaur¨ªn de la Torre (M¨¢laga) tienen poco menos que carta blanca desde hace aproximadamente un a?o. Seg¨²n han denunciado los trabajadores de la c¨¢rcel, los inhibidores de frecuencia no funcionan adecuadamente y presentan anomal¨ªas que atribuyen a los recortes presupuestarios. Seg¨²n un portavoz sindical, cuando se instal¨® el sistema de inhibici¨®n no se firm¨® un contrato de mantenimiento y ahora no hay disponibilidad econ¨®mica para repararlo.

El responsable de la secci¨®n sindical de CC OO de prisiones, Juan Carlos Blanco, alert¨® ayer de que se trata de un grave problema de seguridad. ¡°Existen m¨®viles prohibidos en posesi¨®n de los internos que son utilizados muchas veces por narcotraficantes o jefes de determinados clanes mafiosos para dirigir sus negocios desde la c¨¢rcel y eso evidentemente es peligroso y afecta no s¨®lo a la seguridad de la c¨¢rcel, sino a la seguridad nacional¡±, afirm¨®.

Seg¨²n fuentes de la prisi¨®n, hay d¨ªas en los que se han llegado a detectar e intervenir por los funcionarios hasta una treintena de tel¨¦fonos. Un portavoz de la direcci¨®n general de Instituciones Penitenciarias neg¨® ayer la existencia de ninguna anomal¨ªa y asegur¨® que el sistema de inhibidores funciona correctamente, aunque la denuncia ha sido ratificada por varias organizaciones de trabajadores que han pedido explicaciones a Instituciones Penitenciarias y la han emplazado a resolver de inmediato las deficiencias.

¡°Los problemas econ¨®micos no sirven como argumento para esto porque es un tema muy serio de seguridad, y si se instalan estos inhibidores es porque son necesarios¡±, insiste CC OO.

Las denuncias de los sindicatos se unen a la larga lista de quejas sobre las condiciones de seguridad de la masificad¨ªsima prisi¨®n de Alhaur¨ªn de la Torre, que pr¨¢cticamente desde su apertura hace 20 a?os acoge un n¨²mero excesivo de presos que llega a superar el doble de su capacidad te¨®rica.

Los ajustes presupuestarios han ralentizado la puesta en funcionamiento de la segunda prisi¨®n de la provincia de M¨¢laga, en Archidona, cuyas obras se encuentran pr¨¢cticamente completadas, aunque se ha demorado los plazos de entrega y de su consiguiente apertura.