Carballo acoge a Els Joglars en su Festival de Outono

El teatro en Carballo contradice el destino macilento que los recortes han impuesto a la cultura. El Festival Internacional de Outono de Teatro (FIOT) despliega su alfombra y sobre ella camina lo que Alberto Sueiro, presidente de la asociaci¨®n organizadora Tel¨®n e Aparte, llama ¡°una propuesta art¨ªstica irrefutable¡±. El Ayuntamiento de Carballo, es el otro gestor de historias, y su regidor, Evencio Ferreiro (BNG), defiende: ¡°Cultura es econom¨ªa¡±. Con su particular estrategia proponen reflexi¨®n y ense?an el env¨¦s de la centuria, cuyos d¨ªgitos ¡ª21¡ª coinciden con su aniversario. ¡°Las circunstancias nos llevan a ser m¨¢s imaginativos¡±, aprecia Sueiro, que adem¨¢s de ser presidente de la asociaci¨®n es el l¨ªder de la oposici¨®n, del PP.

Els Joglars, en la ¨²ltima funci¨®n de su exdirector Albert Boadella, narran el intento de Don Jos¨¦, un viejo acomodador de teatro, de armar Rigoletto para rescatar sus butacas de las ruinas. Pero eso no es hasta la clausura, el 31 de octubre. Antes, el d¨ªa 7, estar¨¢ el grupo vasco Tantakka Teatroa; despu¨¦s La Machina Teatro, premio Max al espect¨¢culo revelaci¨®n; o el venezolano Grupo Actoral 80. Willy Toledo a lomos de la compa?¨ªa Animalario se sumerge en un s¨®tano l¨²gubre para ser asesino a sueldo. Y Carmen Machi testifica en Juicio a una zorra, cuestionando la historia de Helena de Troya.

Mientras, entre los ajuares de la dramaturgia gallega invitada est¨¢n las corbatas. O m¨¦todo Gronh?lm pone a prueba a cuatro aspirantes a un cargo ejecutivo. El mentor de este procedimiento mordaz es Tal¨ªa, y su coproductor, el FIOT. Sueiro alardea del pacto y de la supervivencia de una compa?¨ªa profesional en Cee y de un certamen as¨ª en Carballo. Otros cuentos con denominaci¨®n de origen son de Teatro do Morcego y Sarabela Teatro.

Fuera del escenario sigue el fantoche callejero, la conversaci¨®n de tasca, la tertulia de caf¨¦. Hace 14 a?os lo bautizaron como R¨²a dos Contos y ahora contin¨²an con sus n¨²meros y mon¨®logos C¨¦sar Cambeiro o Tonhito de Poi. El ciclo OTNI (Objeto Teatral No Identificado) fue su propia manera de encajar g¨¦neros sin parentesco, como el que lleva este a?o C¨¢ndido Paz¨®.

Los comienzos del certamen fueron como los de tantos, llamando de puerta en puerta y alquilando una peque?a sala, el cine Rega, para acomodar a sus titiriteros. Desde entonces ha medrado y, para ordenar la demanda, decidieron eliminar las colas en las taquillas y exhibirse en la Red.