El hermano de Bret¨®n niega que ocultase pruebas en el caso Ruth y Jos¨¦

Rafael Bret¨®n afirma que no ha manipulado el m¨®vil de su hermano Jos¨¦, imputado por el doble asesinato de sus hijos. Este mi¨¦rcoles, Reposo Carrero, la abogada Ruth Ortiz, madre de los peque?os, avanz¨® el resultado de un informe preliminar solicitado por el juez sobre el terminal de Jos¨¦ Bret¨®n. Los datos indicar¨ªan que, mientras el m¨®vil estuvo bajo custodia de Rafael, se pudieron borrar mensajes y llamadas interesantes para la investigaci¨®n del asesinato de Ruth y Jos¨¦.

¡°Tras la acusaci¨®n p¨²blica de la letrada Mar¨ªa del Reposo Carrero sobre el supuesto borrado de llamadas del m¨®vil de mi hermano y tras leer el informe en el que se basa esa injuria¡±, Rafael Bret¨®n expone en cuatro puntos su versi¨®n de los hechos y su defensa. Para empezar, niega que haya ¡°borrado ninguna llamada del terminal¡± de su hermano. Y sobre la desaparici¨®n de n¨²meros, recuerda que, ¡°como se puede comprobar, los tel¨¦fonos m¨®viles tienen una memoria limitada de registro de llamadas (entrantes, salientes y perdidas) y que al estar el m¨®vil encendido y seguir recibiendo o realizando llamadas, van desapareciendo las llamadas m¨¢s antiguas¡±.

Por tanto, y regresando al informe sobre las llamadas desaparecidas, afirma que el resultado del informe ¡°habr¨ªa sido el mismo aunque el m¨®vil encendido hubiera estado custodiado en comisar¨ªa¡±. As¨ª, termina diciendo ¡°que no tiene sentido borrar llamadas de todas las cuales la operadora de telefon¨ªa m¨®vil guarda registro, a¨²n m¨¢s cuando la polic¨ªa ya en dos ocasiones hab¨ªa extra¨ªdo toda la informaci¨®n de inter¨¦s del m¨®vil cuando nos fue devuelto¡±.

Por ¨²ltimo, Rafael vuelve a quejarse del acoso que sufre sus padres, su hermana y el resto de su familia. ¡°Puedo entender la animadversi¨®n hacia mi hermano, pero no acabo de comprender porqu¨¦ dirigir la ira y sospechas contra mi persona o mi familia cuando no somos responsables de los hechos acontecidos¡±, escribe.

¡°Hemos colaborado en todo desde el principio y en ning¨²n momento hemos mentido o falseado hechos, como se quiere dar a entender. Son mis sobrinos, Ruth y Jos¨¦, los que hoy no est¨¢n con nosotros, y mi familia la que est¨¢ viviendo una tragedia y sufriendo como nadie puede imaginar por ese motivo¡±. A este ¡°infierno que vivimos a diario por la desaparici¨®n de los ni?os¡±, Rafael incluye el propio que tienen que soportar por los ¡°insultos, acoso y agresiones, que son la consecuencia del vertido de acusaciones falsas e infundadas, ante las que nos encontramos en total desamparo¡±.