Vecinos de Jerez queman basuras y se enfrentan a la polic¨ªa por segunda noche

Jerez arde, literalmente, por la huelga de basuras. Tras 19 d¨ªas de par¨®n del servicio municipal, que ha dejado m¨¢s de 3.000 toneladas de residuos en las calles, la ciudad est¨¢ en pie de guerra. Esta noche, por segundo d¨ªa consecutivo, grupos de vecinos han incendiado decenas de contenedores, esparcido las bolsas por las calles y lanzado objetos a los bomberos y polic¨ªas que acuden a sofocar las llamas. La situaci¨®n ha desembocado en varios altercados entre la polic¨ªa y ciudadanos que han lanzado piedras contra los agentes antidisturbios que acuden a las zonas donde hay incidentes.

La madrugada del lunes al martes se sald¨® con m¨¢s 70 contenedores incendiados y varios cortes de avenidas en una decena de barriadas del municipio gaditano. Los problemas han empezado a reproducirse hoy a partir de las cinco de la tarde. Entre esa hora y las nueve, los bomberos han sido requeridos para una veintena de intervenciones y, seg¨²n los ¨²ltimos datos disponibles, al menos 45 calles sufren incendios. El conflicto, en este segundo d¨ªa, se ha extendido de nuevo por varias zonas de la ciudad.

Los incidentes se producen mientras las ratas se adue?an de las v¨ªas y la Consejer¨ªa andaluza de Salud a¨²n no observa riesgos sanitarios. Tambi¨¦n mientras las negociaciones entre los trabajadores y Urbaser, la concesionaria del servicio local, han vuelto a romperse. La empresa planea el despido de 125 operarios (el 30% de la plantilla) por la reducci¨®n del presupuesto municipal. Los empleados, que se han desmarcado de los actos vand¨¢licos, piden la dimisi¨®n de la alcaldesa, Mar¨ªa Jos¨¦ Garc¨ªa Pelayo (PP).

Los trabajadores de la concesionaria Urbaser mantienen el paro en la recogida de residuos desde el pasado 2 de noviembre por el Expediente de Regulaci¨®n de Empleo (ERE) planteado por la empresa. El origen del conflicto vuelve a estar en la asfixia econ¨®mica del Ayuntamiento de Jerez, que reducir¨¢ desde enero de 2013 el presupuesto de este servicio p¨²blico en un 20% (4,5 millones de euros anuales).

Ni la alarma social ni los altercados ni la acumulaci¨®n de desechos han posibilitado el acuerdo entre las partes. Los empleados est¨¢n dispuestos a asumir un 12% del ajuste municipal, pero se niegan a soportar por entero el tijeretazo que impone la Administraci¨®n local. Urbaser admite aportar 500.000 euros, pero no los 1,2 millones que restan para completar el recorte.

Completa el tri¨¢ngulo el Consistorio, que aunque adeuda a la concesionaria solo en lo que va de a?o 24 millones de euros y un canon de tres millones de euros que no abona desde 1995, advierte que se mantendr¨¢ "firme" en la reducci¨®n presupuestaria. La falta de acuerdo a?ade m¨¢s tensi¨®n. Con la negociaci¨®n rota, la plantilla se traslad¨® a la puerta del Ayuntamiento para dejar una monta?a de basura de un metro de altura al grito de "?alcaldesa dimisi¨®n!".

En el interior del edificio municipal, la alcaldesa hac¨ªa "una llamada al di¨¢logo" no sin antes dejar claro que el gobierno municipal "no aceptar¨¢ una salida al conflicto que suponga un sobrecoste para las arcas p¨²blicas". En el exterior, Carlos Fern¨¢ndez, secretario del comit¨¦ de empresa, advert¨ªa tras conocerse la continuidad del paro: "No somos responsables de los que pueda ocurrir".

Los ¨¢nimos se han caldeado desde el pasado domingo. El Ayuntamiento contrat¨® a Tragsa, una empresa externa participada por el Estado, para retirar los desechos ante "el incumplimiento sistem¨¢tico de los servicios m¨ªnimos y el riesgo de epidemia" que, seg¨²n los t¨¦cnicos municipales, existe en la ciudad. "Cuando las retroexcavadoras levantan las basuras, salen ratas del tama?o de gatos", asever¨® la alcaldesa.

El conflicto ya ha llegado a los juzgados. La plantilla de Urbaser, Comisiones Obreras y UGT han denunciado a la alcaldesa "por romper una huelga legal" con la contrataci¨®n de servicios externos; y el Ayuntamiento, por su parte, ha puesto en conocimiento del juez "las pedradas" que un piquete de 40 personas lanz¨® contra los veh¨ªculos de Tragsa y los informes que, seg¨²n defienden, avalan la decisi¨®n municipal. Desde la oposici¨®n, el PSOE ha instado a Pelayo a que cree "una mesa de negociaci¨®n permanente" hasta que se alcance un principio de acuerdo en un conflicto que ha sobrepasado nuevos l¨ªmites en la ciudad.