Mucho m¨¢s que un fracaso
La t¨¢ctica de los partidos en la comisi¨®n de investigaci¨®n de los ERE desprestigia al Parlamento
El ¨²nico punto de acuerdo entre los partidos tras la comisi¨®n de investigaci¨®n parlamentaria de los ERE fraudulentos ha sido que esta ha resultado un fracaso con pocos paliativos. La rigidez de los grupos pol¨ªticos, especialmente el PSOE y el PP, a la hora de tratar de imponer sus posiciones de partida dinamitaron una comisi¨®n que, tras cinco meses de comparecencias y estudio de documentos, ha sido incapaz de presentar un dictamen que fuera aprobado por el Pleno del Parlamento. La b¨²squeda de responsabilidades pol¨ªticas en el mayor esc¨¢ndalo de corrupci¨®n de la historia de Andaluc¨ªa descarril¨® en la ¨²ltima curva por el tacticismo de los partidos. Sin embargo, el fiasco de una comisi¨®n sin conclusiones deja una herida m¨¢s profunda: la instituci¨®n, fundamental en democracia, queda seriamente desprestigiada. Los partidos se aprestan ahora a remendar el roto.
La falta de conclusiones genera un desprestigio de la instituci¨®n Roberto Blanco, catedr¨¢tico de Derecho Constitucional
Una de las definiciones m¨¢s optimistas de la comisi¨®n de investigaci¨®n la dio en 1986 la constitucionalista mexicana Cecilia Mora Donatto: ¡°El cauce m¨¢s visible del control del gobierno [que] vivifica la actuaci¨®n parlamentaria y fortalece la vida democr¨¢tica¡±. Dando la vuelta al argumento, cuando estas comisiones temporales y excepcionales fracasan ¡ªlo m¨¢s frecuente cuando est¨¢n sujetas a la mayor¨ªa parlamentaria¡ª el impacto negativo se multiplica. ¡°El da?o que ha hecho la comisi¨®n de los ERE es devastador y supone un desprestigio terrible para la instituci¨®n. En realidad todos los mecanismos de control parlamentario del Gobierno funcionan muy mal: los partidos tienen obsesi¨®n por colonizarlo todo y eso es incompatible con una democracia m¨¢s abierta y menos encorsetada¡±, sostiene Roberto Blanco, catedr¨¢tico de Derecho Constitucional en la Universidad de Santiago de Compostela.
La comisi¨®n de los ERE era la primera que se celebraba en el Parlamento de Andaluc¨ªa desde 1994, cuando, en la cuarta legislatura auton¨®mica, se analizaron las responsabilidades pol¨ªticas en la contrataci¨®n irregular de personal en la empresa p¨²blica forestal Getisa. En aquella ocasi¨®n, los votos de PP e IU, con la famosa pinza, permitieron aprobar unas conclusiones, con el voto en contra del PSOE, que fueron trasladadas a la Fiscal¨ªa. Desde entonces, las sucesivas mayor¨ªas absolutas del PSOE negaron la celebraci¨®n de otras comisiones.
¡°Teniendo en cuenta la experiencia, es poco lo que cabe esperar en el futuro de las comisiones de investigaci¨®n¡±, apunta Javier P¨¦rez Royo. ¡°No hemos conseguido hacer un uso razonable de esta instituci¨®n (¡) Hay una reacci¨®n primaria de quien tiene el poder de eximirse de la responsabilidad o de hacer la valoraci¨®n de esas responsabilidades de la manera menos perjudicial; est¨¢ en la naturaleza humana¡±, afirma el catedr¨¢tico de Constitucional de la Universidad de Sevilla.
Se trata de voluntad y cultura pol¨ªticas, y andamos cortitos de eso Jos¨¦ Antonio Castro, portavoz IU
M¨¢s all¨¢ de cuestiones t¨¢cticas, los entrevistados para este reportaje coinciden en que tras el fracaso de la comisi¨®n de los ERE se esconde una falta de cultura pol¨ªtica de asunci¨®n de responsabilidades. ¡°La sociedad tolera conductas como las del caso G¨¹rtel, o lo ocurrido en Mallorca o Valencia y no exige la sanci¨®n. En Alemania, por ejemplo, el reproche social acaba forzando la responsabilidad pol¨ªtica¡±, sostiene P¨¦rez Royo. El portavoz de IU en el Parlamento andaluz, Jos¨¦ Antonio Castro remacha: ¡°Al final es una cuesti¨®n de voluntad y cultura pol¨ªtica, de la que andamos cortitos; por mucho que reglamentes, siempre se impone la mayor¨ªa¡±.
En ocasiones, la fuerza de los grandes hace que las conclusiones de las comisiones vayan en sentido opuesto a las investigaciones judiciales. Ocurri¨®, por ejemplo, en Galicia durante la ola de incendios de 2008. El Parlamento gallego eximi¨® de responsabilidad al Gobierno del socialista Emilio P¨¦rez Touri?o al tiempo que la Fiscal¨ªa apreciaba que los fuegos ocurrieron por falta de previsi¨®n. En el caso de los ERE, P¨¦rez Royo observa otro inconveniente: ¡°La comisi¨®n nace mucho despu¨¦s de ocurridos los hechos, con una causa judicializada y con medidas cautelares. Una comisi¨®n pol¨ªtica ha de servir para actuar en caliente, frente a lo tard¨ªo de un sumario judicial. La verdad pol¨ªtica no tiene que coincidir con la judicial, que en este caso ya veremos en qu¨¦ queda¡±.
Tras certificarse, el pasado mi¨¦rcoles, el fracaso de la comisi¨®n, los partidos hicieron prop¨®sito de enmienda. La consejera de Presidencia, Susana D¨ªaz, defendi¨® una reforma del reglamento del Parlamento para regular esta figura. Este guante fue recogido por el presidente de la C¨¢mara, el socialista Manuel Gracia, que ha pedido ¡°reflexi¨®n¡± a los grupos pol¨ªticos sobre lo sucedido en la comisi¨®n de los ERE. ¡°Que no se hayan aprobado las conclusiones es negativo y la ciudadan¨ªa no lo entender¨¢. Emplazo a los grupos a tomar medidas a trav¨¦s de una reforma del reglamento que les corresponde a ellos impulsar, y a esta Presidencia amparar¡±, afirma Gracia.
Hay que buscar un equilibrio entre el veto sistem¨¢tico y la constituci¨®n de comisiones ante la mera sospecha Francisco ?lvarez de la Chica, portavoz del PSOE
El consenso en esta materia no resultar¨¢ f¨¢cil. Izquierda Unida se mostr¨® dispuesta ¡°a tope¡± a reformar el reglamento sobre comisiones de investigaci¨®n al amparo del proyecto de Ley de Transparencia, que la Junta anunci¨® que ser¨¢ ¡°de m¨¢ximos¡±. Sin embargo, el PP rechaza involucrarse, de momento, en una reforma que considera que obedece al oportunismo del PSOE.
Las modificaciones ir¨ªan encaminadas, fundamentalmente, a fijar unos requisitos m¨¢s flexibles para convocar las comisiones. Hasta ahora se necesita la mayor¨ªa absoluta de la c¨¢mara. Uno de los planteamientos es que para reunir la comisi¨®n baste la petici¨®n de dos grupos parlamentarios. El portavoz del grupo socialista, Francisco ?lvarez de la Chica, plantea que se busque ¡°un equilibrio entre el veto sistem¨¢tico y la creaci¨®n de una comisi¨®n ante la mera sospecha¡±. La reforma ha de contemplar tambi¨¦n, seg¨²n ?lvarez de la Chica, los derechos y obligaciones de los comparecientes, el alcance y obtenci¨®n de los documentos y c¨®mo lograr un mecanismo de obtenci¨®n de conclusiones que sea fiel al desarrollo de la comisi¨®n. ¡°Sencillo no es¡±, afirma el portavoz del PSOE.
El modelo mayoritario no es el ¨²nico. En Estados Unidos una parte de las comisiones no son partidarias sino t¨¦cnicas. Y de ellas se derivan las conclusiones pol¨ªticas. ¡°Tras los atentados del 11-S, la comisi¨®n de investigaci¨®n, formada por expertos, sac¨® un libro con sus conclusiones que fue un superventas, recuerda el catedr¨¢tico Roberto Blanco. La comisi¨®n de los ERE no llegar¨¢ ni al Bolet¨ªn Oficial.
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