Gobierno de ratificaci¨®n
Los impulsores de la deriva independentista de CiU rechazaron interpretar la p¨¦rdida de 12 esca?os en las elecciones del 25 de noviembre como una desautorizaci¨®n a su programa
Los impulsores de la deriva independentista de CiU rechazaron interpretar la p¨¦rdida de 12 esca?os en las elecciones del 25 de noviembre como una desautorizaci¨®n a su programa. La interpretaron en sentido justamente contrario: como una invitaci¨®n a persistir en el empe?o soberanista, aunque esta vez con la ayuda de Esquerra Republicana (ERC). A esto corresponde la formaci¨®n del segundo Gobierno de Artur Mas.
Pod¨ªa haber sido uno de rectificaci¨®n, pero es un Gobierno de ratificaci¨®n en un rumbo equivocado. No es ninguna sorpresa. Es coherente con el pacto de estabilidad parlamentaria sellado con ERC plasmado en la investidura. El propio Mas lo se?al¨® ayer en la toma de posesi¨®n de los consejeros, al incluir expresamente la convocatoria de una consulta sobre la soberan¨ªa de Catalu?a entre los objetivos del nuevo equipo.
Esta ratificaci¨®n se formaliza, adem¨¢s, con la entrada en el Gobierno de uno de los principales ide¨®logos de la reorientaci¨®n de Converg¨¨ncia hacia el soberanismo, Francesc Homs, y de otro de los dirigentes nacionalistas de su misma cuerda y generaci¨®n, Germ¨¤ Gord¨®, que en la anterior legislatura estaban situados como fontaneros del Ejecutivo, el primero como secretario de la Presidencia y el segundo como secretario del Gobierno. Sobre estos dos pol¨ªticos recaer¨¢ la responsabilidad de organizar, o no, el refer¨¦ndum sobre el que el Gobierno de Espa?a ya ha hecho saber que no lo va a permitir. Signo de ratificaci¨®n en el empe?o soberanista es tambi¨¦n que la cartera de Justicia haya pasado de las manos de una abogada del Estado, Pilar Fern¨¢ndez Bozal, que deb¨ªa ser la mejor conocedora de la imposibilidad legal de convocar un refer¨¦ndum de soberan¨ªa, a las de un pol¨ªtico cuyo m¨¦rito es formar parte del n¨²cleo nacionalista, el pinyol de Converg¨¨ncia, Gord¨®. El mismo sentido tiene la continuidad de Ferran Mascarell en Cultura.
La voluntad de ratificaci¨®n en las pol¨ªticas del anterior Gobierno de Artur Mas se expresa tambi¨¦n en el otro eje pol¨ªtico principal, el econ¨®mico-social. El neoliberal Andreu Mas-Colell sigue en econom¨ªa y el exjefe de la patronal sanitaria, Boi Ruiz, sigue al frente de la sanidad p¨²blica. La agitaci¨®n social, las protestas y las huelgas generales provocadas por los recortes presupuestarios, sociales y salariales en el sector p¨²blico y privado no han movido a Mas a rectificar, sino a ratificar a sus ejecutores.
La ¨²nica rectificaci¨®n se produce en Interior. Pero incluso en este caso Mas intenta disimular la defenestraci¨®n de un Felip Puig abrasado como titular de Interior en las llamas de su af¨¢n por la contundencia policial entreg¨¢ndole otra cartera.
Demasiada ratificaci¨®n, para ser el resultado de un retroceso electoral tan notable como el del 25 de noviembre.
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