¡®Baches¡¯ en la T-1 de El Prat

Aena tendr¨¢ que realizar obras en una de las zonas del aeropuerto de El Prat donde estacionan los aviones para conectarse a las pasarelas y cargar pasaje. Parte de la posici¨®n 248, donde acaba la espada de la Terminal 1, se ha hundido, por lo que ha tenido que ser anulada hasta su reparaci¨®n, que se producir¨¢ a finales de este a?o. La divisi¨®n de ingenier¨ªa del aeropuerto admite que se ha producido ¡°una peque?a deformaci¨®n superficial¡± de cuatro cent¨ªmetros de profundidad y que afectar¨ªa a una superficie de unos cuatro metros cuadrados. Otras fuentes del aeropuerto consultadas por este diario aseguran que el bache supera los diez cent¨ªmetros y que incluso imped¨ªa la operaci¨®n de determinados modelos de veh¨ªculos que remolcan a las aeronaves.

El problema no es reciente, pero solo ahora lo ha admitido el aeropuerto, requerido por este diario. Tampoco es nuevo. Hace un a?o, en la misma zona se tuvieron que realizar trabajos de reasfaltado para solventar un problema id¨¦ntico. Los responsables de ingenier¨ªa y mantenimiento est¨¢n redactando el proyecto para intentar resolver el problema del hundimiento, motivado por la inestabilidad del terreno ¡ªla Terminal 1 se levant¨® sobre una espacio deltaico¡ª, seg¨²n las explicaciones de Aena. Las obras empezar¨¢n como muy pronto el pr¨®ximo mes de octubre, por lo que el punto donde se ha producido el percance continuar¨¢ cerrado el resto del a?o.

El peso de las aeronaves habr¨ªa acabado pasando factura sobre la zona afectada. Uno de los elementos que ha contribuido a esa malformaci¨®n es el material utilizado, pavimento asf¨¢ltico en vez de las losetas de hormig¨®n que cubren el resto de las plataformas de estacionamiento del aeropuerto, m¨¢s resistentes para asumir las 80 toneladas que puede pesar un avi¨®n comercial. ¡°Se realiz¨® con este tipo de pavimento para regularizar las pendientes de la plataforma¡±, explica Aena, que asegura que el pavimento asf¨¢ltico percolado utilizado ¡°cumple con las necesidades¡± para soportar el peso de los aviones.

La direcci¨®n del aeropuerto asegura que la malformaci¨®n que se ha producido en el exterior no tiene continuidad en la estructura de la terminal aeroportuaria, estrenada hace apenas tres a?os y medio.

Afortunadamente para el aeropuerto, el socav¨®n se encuentra al final de la espada de la T-1, una zona que acostumbra a cerrarse en la temporada de invierno para reducir costes de mantenimiento. Este a?o se han cerrado cinco puertas de embarque con el mismo fin, y una de ellas es la que est¨¢ cerrada por obligaci¨®n. La ca¨ªda de pasajeros que el aeropuerto de El Prat ha empezado a sufrir en los dos ¨²ltimos meses del a?o podr¨ªa provocar que en verano, cuando esa zona se acostumbra a reabrir, no sea necesario poner en funcionamiento esas posiciones.