Piruetas para revivir Navacerrada
La estaci¨®n de esqu¨ª celebra un torneo de saltos para atraer m¨¢s usuarios

¡°Yo siempre les pregunto: ?del uno al diez, cu¨¢nto te duele? Ese se ha dado una buena, pero no le ha pasado nada¡±. Jos¨¦ Luis Mazuelos, de 70 a?os, es uno de los organizadores de la prueba de saltos de esqu¨ª que se celebr¨® ayer al mediod¨ªa en la estaci¨®n del Puerto de Navacerrada.
Mazuelos habla mientras observa a uno de los participantes que, tras caer de espaldas en un salto, se queda tendido inm¨®vil. Arriba, junto a los jueces, uno de los participantes cruza los brazos por encima de la cabeza, formando una equis: este gesto significa que la pista se cierra y ning¨²n esquiador puede correr en ella. ¡°Es para evitar que el que llega detr¨¢s se lleve por delante al que se ha ca¨ªdo. Podr¨ªa matarle¡±, cuenta. Falsa alarma, el saltador est¨¢ bien. Se incorpora con gesto cansado y baja hasta el remonte como si nada.
El III Big Air Contest es un torneo de esqu¨ª que naci¨® en 2011 ¡°como un intento de revitalizar la estaci¨®n de esqu¨ª de Navacerrada, de capa ca¨ªda desde hace un tiempo¡±, como explica David Cast¨¢n, profesor de esta disciplina 38 a?os y uno de los jueces de la prueba. Los campeones este a?o han sido Jorge M¨¦ndez, de 34 a?os, en la modalidad de snowboard, y Miki Vergara, de 20, en esqu¨ª freestyle. Los premios han consistido en una tabla de snow valorada en 600 euros y en otra de longboard ¡ªparecida a un monopat¨ªn pero m¨¢s larga¡ª.
En la prueba hay que recorrer un circuito y deslizarse por unos obst¨¢culos en forma de barandilla dispuestos en el suelo para, hacia la mitad del recorrido, saltar con una acrobacia una peque?a elevaci¨®n usando un trampol¨ªn. Cuanto m¨¢s complicada sea la pirueta, m¨¢s punt¨²a.La pista, de 350 metros, est¨¢ junto a otra que llaman el escaparate, una pista para principiantes de la que est¨¢ separada por una red naranja. La llaman as¨ª porque la gente se puede parar en ella para ver c¨®mo esqu¨ªan los dem¨¢s. Un grupo de ni?os practica en el escaparate junto a sus monitores. ¡°Normalmente el 80% del p¨²blico son cr¨ªos de seis a?os¡±, cuenta Mazuelos.
Es el primer torneo de su tipo en la Comunidad, seg¨²n la organizaci¨®n
Desde hace una semana los empleados de la estaci¨®n han estado trabajando para preparar la pista. No ha nevado lo suficiente y han tenido que usar los ca?ones de nieve. Adem¨¢s, esta es demasiado dura y hay que crear los mont¨ªculos que sirven de trampol¨ªn a los saltadores. La estaci¨®n dispone de cuatro m¨¢quinas quitanieves especiales cuyas palas tienen dos brazos que amontonan la nieve para crear los saltos. Una fresadora enganchada en la parte trasera tritura el hielo. Esta tarea se realiza cuando la estaci¨®n est¨¢ cerrada. Ayer los trabajos de acondicionamiento se realizaron a las seis de la ma?ana.
Abajo, junto al arco de meta, a unos pasos del telesilla que sube hasta el comienzo de la pista, hay un veh¨ªculo de la marca Hummer, de color negro, en cuyo trasero han dispuesto una plataforma con un equipo de m¨²sica. A su alrededor hay varias mesas y dos chicas reparten bebidas energ¨¦ticas.
El mal tiempo de los ¨²ltimos d¨ªas oblig¨® a posponer la prueba una semana y eso se ha notado. ¡°El domingo pasado se hab¨ªan inscrito unas 60 personas, pero se han echado atr¨¢s 40¡±, dice Mazuelos. Al final se han apuntado 19 personas.
Eugenio y Carlos, padre y t¨ªo de dos de los participantes les dan las ¨²ltimas recomendaciones antes de la prueba. ¡°La zona est¨¢ muy bien aprovechada. Para ser una pista peque?a est¨¢ muy bien¡±, cuentan. Unos metros m¨¢s all¨¢, Javi mira c¨®mo calientan los esquiadores. ¡°Cuando he ido a apuntarme no hab¨ªa dorsales y hasta me han dicho que no pod¨ªan inscribirme porque el bol¨ªgrafo se hab¨ªa helado¡±, cuenta. En el ¨²ltimo momento le gritan que hay un dorsal para ¨¦l.
Entre los que se han apuntado a la prueba solo hay una chica. Se llama Marta y, aunque solo tiene 15 a?os, ya ha participado en dos torneos. ¡°No suele haber chicas. Como mucho un par, aunque en la pista de nieve de Xanad¨² suele haber m¨¢s¡±, cuenta tras haber finalizado su ¨²ltimo salto.
El mal tiempo oblig¨® a posponer la prueba una semana
El concurso, dicen los organizadores, es el primero de su tipo en la Comunidad de Madrid. ¡°No queremos que sea un peligro, por eso no hacemos que sea demasiado complicado. Lo que deseamos es que sea una prueba popular, en la que pueda participar cualquiera¡±, explica Jos¨¦ Luis Gonz¨¢lez, director t¨¦cnico de la estaci¨®n. Algunos de los saltadores acaban estrellando sus huesos contra la nieve. Dos o tres de ellos se levantan enfadados y arrojan sus bastones. Uno incluso se l¨ªa a pu?etazos con el suelo.
Para el chileno Jean, de 20 a?os, una parte de ellos vividos en Alaska , la competici¨®n le parece una buena iniciativa. ¡°Esto es m¨¢s peque?o que [las estaciones de esqu¨ª] Alaska pero es m¨¢s acogedor. Est¨¢ hecho para los usuarios, no para los turistas¡±. Junto a ¨¦l, Konstantin, alem¨¢n de 23 a?os, asiente: ¡°Me gusta la competici¨®n. No esperaba tanto nivel¡±.
La prueba se interrumpe. Uno de los saltadores no est¨¢. Gritan su dorsal pero no aparece. ¡°?No podemos parar, que se nos mete la nube encima!¡±, grita alguien en un altavoz. Se ha levantado un fuerte viento y las nubes negras ponen nerviosos a los organizadores. Es la una y media y hay que terminar ya.
Dos horas y 75 saltos despu¨¦s, termina la prueba. Miki est¨¢ contento: ¡°Me parece muy importante que se hagan pruebas as¨ª para dar apoyo a la estaci¨®n y al freestyle nacional¡±.
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