Los alcaldes fuerzan a Feij¨®o a pedir cambios en la nueva ley local
El PP de A Coru?a se suma a la propuesta de un sueldo m¨ªnimo para los regidores
La indignaci¨®n entre muchos de sus propios alcaldes ha forzado al PP gallego a dar pasos para reclamar cambios en la reforma de la Ley de Administraci¨®n Local presentada por el Gobierno de Rajoy. El presidente de la Xunta, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, hizo ayer equilibrios para mostrarse comprensivo con las reivindicaciones de los regidores y al mismo tiempo no desairar al Ejecutivo central. Feij¨®o confirm¨®, en todo caso, que su Gobierno presentar¨¢ alegaciones al proyecto. Mientras, el partido trata de aplacar a los alcaldes con reuniones como la que mantuvo ayer el presidente del PP de A Coru?a ¡ªy tambi¨¦n regidor de la capital provincial¡ª Carlos Negeira, con representantes municipales de toda la provincia. Encuentros similares se repetir¨¢n hoy en Lugo y ma?ana en Pontevedra.
?De puertas hacia fuera, el PP gallego transmite el mensaje de que el proyecto del Gobierno todav¨ªa puede sufrir importantes modificaciones y que su texto es ¡°mejorable¡±. En privado, destacados dirigentes del partido coinciden con parte de las cr¨ªticas manifestadas en p¨²blico, y en algunos casos en t¨¦rminos muy duros, por alcaldes populares. Entre ellas, el rechazo a la supresi¨®n de las retribuciones para los regidores de municipios de menos de 1.000 habitantes. ¡°Ser¨ªa m¨¢s razonable establecer un salario m¨ªnimo¡±, se?ala un relevante cargo provincial del partido, en l¨ªnea con la propuesta que aprob¨® el pasado mi¨¦rcoles la Federaci¨®n Galega de Municipios e Provincias (Fegamp), que acord¨® pedir que la ley garantice una retribuci¨®n m¨ªnima de 40.000 euros para los m¨¢ximos responsables de los ayuntamientos. De hecho, tras la reuni¨®n de ayer entre Negreira y los alcaldes coru?eses, el PP provincial hizo p¨²blica una declaraci¨®n en la que anuncia su respaldo a las peticiones de la Fegamp. La nota recuerda que todav¨ªa hay margen para reformar el texto y reclama que el debate se desarrolle en t¨¦rminos ¡°constructivos¡± para buscar ¡°puntos en com¨²n en defensa del municipalismo gallego¡±.
Feij¨®o, por su parte, trat¨® ayer de navegar entre dos aguas. Evit¨® sumarse a las peticiones de los alcaldes, pero al mismo tiempo anunci¨® que su Gobierno est¨¢ trabajando para enmendar el texto del Ejecutivo central. El presidente de la Xunta declin¨® pronunciarse sobre la conveniencia de suprimir el sueldo a los alcaldes de municipios de menos de 1.000 habitantes y tampoco quiso dar su opini¨®n sobre la propuesta de un sueldo m¨ªnimo. Seg¨²n Feij¨®o, es necesario compatibilizar la reducci¨®n de gastos en la Administraci¨®n local con la garant¨ªa de que ¡°ning¨²n alcalde deje de serlo por una cuesti¨®n econ¨®mica¡±. El presidente se felicit¨® por que la Fegamp apoye la idea de regular los sueldos para acabar con la situaci¨®n actual, en la que los plenos municipales disponen de ¡°potestad ilimitada¡± en la fijaci¨®n los salarios. En ese sentido anticip¨® que las alegaciones de la Xunta ir¨¢n en la l¨ªnea de proponer criterios ¡°objetivos y homologables¡± sobre las retribuciones de los representantes municipales.
Aunque el debate se ha centrado en la cuesti¨®n de los salarios, dirigentes del PP tambi¨¦n asumen otras cr¨ªticas al proyecto elaborado por el Ministerio de Hacienda y Administraciones P¨²blicas, que dirige Crist¨®bal Montoro. La propuesta de que los ayuntamientos costeen la cesi¨®n a las comunidades aut¨®nomas de los servicios sociales, educativos y sanitarios que han estado gestionando hasta ahora es inviable para las instituciones locales, admiten fuentes del PP. Tambi¨¦n suscita rechazo la idea de establecer un criterio est¨¢ndar sobre el coste de cada servicio prestado por los municipios, a fin de establecer cu¨¢les son eficientes y cu¨¢les no. En el caso de Galicia, la aplicaci¨®n de este criterio sin m¨¢s matices castigar¨ªa a los ayuntamientos con la poblaci¨®n muy dispersa, un factor que encarece el coste de los servicios. Las direcciones provinciales del PP trasladar¨¢n algunas de estas ideas a la Xunta para que las incorpore a sus alegaciones.
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