Comp¨¢s de espera en el PP
Zoido pacta con los presidentes provinciales aparcar el debate sobre el candidato a la Junta La direcci¨®n popular despejar¨¢ este verano el cartel electoral La presencia de Arenas en el Parlamento incomoda
Los resultados de los sondeos publicados en los dos ¨²ltimos meses apuntan a un notable desplome del Partido Popular de Andaluc¨ªa, pero sus dirigentes no muestran una gran estado de nerviosismo ¡ªsi se descuenta el caso B¨¢rcenas¡ª, ni prisas porque no hay urgencia electoral. Tampoco consideran que esta situaci¨®n se deba a la endeblez de su nuevo presidente, Juan Ignacio Zoido, ni a un equipo todav¨ªa a medio hacer.
Lo achacan a las decisiones que emanan todos los viernes del Consejo de Ministros. A m¨¢s de tres a?os de las pr¨®ximas auton¨®micas, la ca¨ªda en las encuestas la consideran l¨®gica, natural, como de caj¨®n, despu¨¦s de los duros recortes aprobados por el Gobierno de Mariano Rajoy desde hace 14 meses.
¡°No nos queda ning¨²n colectivo que no hayamos cabreado, as¨ª que las encuestas no nos cogen por sorpresa¡±, aseguran fuentes de la direcci¨®n del PP, que admiten que estar¨ªan preocupados si esta situaci¨®n se produjera a seis meses de unas elecciones. A esta aparente tranquilidad contribuye algo el hecho de que el PSOE andaluz est¨¢ estancado y su futuro en el Gobierno va ligado a Izquierda Unida. Y tambi¨¦n a que este comp¨¢s de espera no ir¨¢ mas all¨¢ de 2013.
El PP gan¨® las elecciones andaluzas de hace un a?o con el 40,6% de los votos y 50 esca?os. Fue una victoria muy trabajada ¡ªla primera en 30 a?os del centro derecha andaluz¡ª, pero p¨ªrrica y doli¨® m¨¢s que la propia derrota. El pacto entre el PSOE (47 diputados) e Izquierda Unida (12) cej¨® la entrada de su tetracandidato, Javier Arenas, al palacio de San Telmo. A partir de ese momento, en el PP andaluz se precipit¨® la sucesi¨®n de quien ha sido y lo es todo a¨²n en esta organizaci¨®n. Despu¨¦s de algunos meses de duda, el PP adelant¨® al mes julio pasado el congreso regional en el que se eligi¨® a Juan Ignacio Zoido nuevo presidente, quien un a?o antes hab¨ªa logrado pulverizar los resultados en el Ayuntamiento de Sevilla, al obtener 20 de los 33 concejales en liza. Zoido no era el candidato de Arenas ¡ªeste prefer¨ªa al que fue su segundo, Antonio Sanz¡ª, ni el alcalde de Sevilla ambicionaba, ni ambiciona, este puesto.
Aunque Arenas anunci¨® conmocionado la noche electoral del 25 de marzo su marcha ¡ª¡°hasta aqu¨ª hemos llegado¡±, dijo¡ª, el sevillano no acaba de irse de Andaluc¨ªa. Pasado el sofoc¨®n de las urnas, su agenda pol¨ªtica como vicesecretario general de Pol¨ªtica Auton¨®mica y Local en Andaluc¨ªa es cada vez mayor. Es una agenda pactada con la direcci¨®n regional, aseguran algunas fuentes. No obstante, su presencia en el Parlamento andaluz, donde conserva su acta de diputado, incomoda a muchos. ¡°Nadie entiende que Arenas siga con el esca?o, sobre todo porque no le hace falta para estar en el Senado¡±, afirma una fuente que dice expresar el ¡°sentir generalizado¡± del grupo parlamentario.
A otros les causa desasosiego ver a Arenas sentado en una esquina en la segunda fila de la bancada popular limit¨¢ndose a apretar el bot¨®n en las votaciones y a aplaudir las intervenciones de los suyos. Desde que abandon¨® la primera l¨ªnea, Arenas no asiste a las preguntas de Zoido al presidente de la Junta, Jos¨¦ Antonio Gri?¨¢n, para evitar alusiones molestas.
Todos los que est¨¢n sentados en el Parlamento regional le deben algo o todo a Arenas. ?l sigue conservando much¨ªsima capacidad de influencia y siendo el l¨ªder natural de un partido que a¨²n no termina de acostumbrarse a Juan Ignacio Zoido.
Desde que se produjo el relevo, en el PP sigue imperando el desconcierto y la incertidumbre, no hay un discurso propio que emerja con fuerza y el liderazgo provisional de Zoido tampoco ayuda. Todos saben en el PP que el alcalde de Sevilla no va a ser el candidato a la Junta porque no quiere. Ni puede ni quiere arriesgar bajo ning¨²n concepto su mayor¨ªa absoluta en Sevilla. Lo que s¨ª quiere es controlar y pilotar su propia sucesi¨®n, sin tutelajes, con sus propios tiempos y ritmos.
Zoido y el secretario general del PP, Jos¨¦ Luis Sanz, pactaron hace m¨¢s de un mes con los presidentes provinciales del partido en una comida aparcar el debate sobre el candidato a la presidencia de la Junta, despu¨¦s de que algunos de ellos, como el malague?o El¨ªas Bendodo, apremiara a designar ya al futuro cartel electoral. Esto provoc¨® una indisimulada carrera de unos y otros postul¨¢ndose. Esa tregua interna, por ahora, se mantiene, aunque las preferencias se dispersan en media docena de personas. La idea de Zoido es zanjar este asunto este a?o, en torno al verano. ¡°Todo lo que sea ir m¨¢s all¨¢ de 2013, es complicado¡±, aseguran en el PP.
Un candidato de otra generaci¨®n
Tener cumplidos los 50 a?os va camino de ser tambi¨¦n un inconveniente en la pol¨ªtica espa?ola, como lo es en otros muchos oficios y profesiones. El perfil que los dirigentes populares consultados manejan para su pr¨®ximo cartel electoral tiene en su punto n¨²mero uno el del cambio generacional, es decir, tener menos de 50 a?os. La edad en pol¨ªtica empieza a ser un condicionante que imponen los propios partidos.
En el PSOE, por ejemplo, uno de los motivos que llevaron a la mitad de la federaci¨®n andaluza a apoyar a Carme Chac¨®n en lugar de a Alfredo P¨¦rez Rubalcaba para la secretar¨ªa general fue que el padre (el propio Rubalcaba) no pod¨ªa suceder al hijo (Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero). En el PP lo que se busca es un candidato con futuro que aguante al menos una convocatoria electoral, si es que no logra acceder a la presidencia de la Junta a la primera. Desde hace meses los nombres de F¨¢tima B¨¢?ez, Carmen Crespo, Jos¨¦ Luis Sanz, Jos¨¦ Antonio Nieto y Carlos Rojas est¨¢n en boca de muchos y el de Esperanza O?a, en la suya propia.
Cuando el PP decida su cartel, uno de los argumentos que emplear¨¢n contra el socialista Jos¨¦ Antonio Gri?¨¢n, ser¨¢ precisamente el de su edad (66 a?os). De hecho, desde ya afirman que se le ve ¡°cansado¡±.
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