Alaya impone su criterio y asumir¨¢ la investigaci¨®n de las grandes causas

La juez Mercedes Alaya ha impuesto su criterio. Salvo sorpresas de ¨²ltima hora, el Tribunal Superior de Justicia (TSJA) aprueba este martes que la magistrada acapare las cuatro causas por corrupci¨®n que investiga: el caso Betis,el delito societario y la venta de suelos en Mercasevilla, y los ERE. Alaya conserva las investigaciones despu¨¦s de seis meses de baja por enfermedad, pese a que el alto tribunal hab¨ªa asignado dos magistrados de refuerzo para agilizar los casos. Pero la titular ha rechazado la mano tendida, y entiende que se basta casi sola.

Alaya solo acepta la ayuda de uno de los dos jueces, porque entiende que un tercer magistrado ser¨ªa innecesario, dado que dos de las cuatro causas est¨¢n pr¨®ximas a finalizar su instrucci¨®n. Y el juez que permanecer¨ªa junto a ella en el juzgado estar¨ªa ajeno a las grandes causas.

El pasado viernes el presidente del TSJA, Lorenzo del R¨ªo, se reuni¨® con los tres magistrados para pedirles que alcanzaran un consenso. Las caras largas tras el encuentro auguraban un fracaso, y as¨ª fue. Del R¨ªo explic¨® que los jueces hablar¨ªan entre s¨ª el fin de semana, pero lleg¨® el lunes y Alaya no vari¨® su postura. Por la ma?ana remiti¨® un breve escrito al presidente del alto tribunal en el que propon¨ªa conservar las grandes causas y contar con el apoyo de un juez de refuerzo ¡°para la llevanza del resto del juzgado¡±, seg¨²n fuentes del TSJA. Es decir, para que dicho magistrado se ocupe de los asuntos que entran a diario en el juzgado y as¨ª permitir que Alaya se centrara en las complejas investigaciones.

De este modo, tras mostrar la juez su rechazo a un reparto equitativo, los dos jueces de adscripci¨®n territorial, Rogelio Reyes y Ana Rosa Curra, que abogaban por esta divisi¨®n de las causas entre los tres instructores, han desistido de plantear batalla a Alaya, pese al principio de igualdad de jurisdicci¨®n. ¡°La cuesti¨®n jur¨ªdica es que Alaya es la juez natural y predeterminada. El TSJA puede pedirle aclaraciones a su planteamiento, pero no tiene potestad para organizar el juzgado¡±, ilustran fuentes jur¨ªdicas. ¡°Ambos magistrados son conscientes de que no son menos que ella, pero tambi¨¦n de que ella es la titular¡±, a?aden dichas fuentes.

Si se cumple el guion previsto, la Sala de Gobierno del alto tribunal aprobar¨¢ este martes la tesis de Alaya, y es previsible que uno de los dos jueces de refuerzo abandone el juzgado para cualquiera de los m¨²ltiples ¨®rganos necesitados de agilizar los atascos que sufre la justicia andaluza.

El escenario que se abre ahora pasa probablemente por la salida de Curra, dado el escaso entendimiento que existe entre ella y Alaya. ¡°Va a ser m¨¢s f¨¢cil un m¨ªnimo entendimiento con Reyes¡±, apuntan otras fuentes del caso. Eso s¨ª, el riesgo de que Alaya tenga una reca¨ªda, dada la gravedad de su enfermedad neuralgia del trig¨¦mino, es latente. Y si la juez se viera obligada a pedir otra baja por enfermedad, el TSJA otorgar¨ªa la instrucci¨®n a un magistrado diferente y que desde entonces permanecer¨ªa adscrito a la investigaci¨®n.

Tras los refuerzos impulsados por el TSJA para que el juzgado contara con hasta tres magistrados y transmitir la sensaci¨®n de una gran apuesta por aclarar la corrupci¨®n descubierta, la apuesta se ha zanjado con un fracaso, dado el rechazo de Alaya a ceder parcelas de trabajo. Hace mes y medio, Del R¨ªo subray¨®: ¡°La justicia, o la hacemos ¨¢gil o no tiene sentido¡±. D¨ªas antes, el presidente de la Audiencia de Sevilla, Dami¨¢n ?lvarez, incid¨ªa: ¡°Hay trabajo para tres jueces¡±. Alaya discrepa de la opini¨®n de ambos, y antepone su terreno a la agilidad de las causas. ¡°No se aplican los criterios de prudencia y racionalidad¡±, censuran ahora fuentes judiciales sobre la reacci¨®n de la juez.

Las dilaciones en estos procesos es una preocupaci¨®n constante, con ejemplos tan graves como personas que llevan imputadas casi tres a?os (en el caso del delito societario de Mercasevilla) y a¨²n no han sido llamadas a declarar. El problema es que la respuesta para comprobar si estos retrasos pasan factura y alg¨²n imputado sale beneficiado, se retrasar¨¢ a?os, hasta que el juicio se celebre.

Si algo ha quedado claro con este ¨²ltimo episodio, es que Alaya antepone las causas a cualquier riesgo de sufrir una reca¨ªda por la sobrecarga de trabajo.