Barcelona hace prodigios en Par¨ªs
Notable afluencia de visitantes en el pabell¨®n de actividades literarias y culturales catalanas en el Sal¨®n del Libro
Pocas veces un 0,5% del espacio de un recinto ferial debe dar tanta guerra, am¨¦n, salvando distancias, del pueblo de Ast¨¦rix. Pero as¨ª fue el caso ayer de los 200 metros cuadrados en los que se concentran las actividades literarias y culturales de la presencia catalana en la 33? edici¨®n del Sal¨®n del Libro de Par¨ªs, que ayer abri¨® sus puertas. El espacio hizo honor a su lema, Barcelona, ciudad de prodigios,porque la capital catalana, invitada de honor, acapar¨® la atenci¨®n del p¨²blico el primer d¨ªa.
Lo cierto es que todo es un poco extra?o en esos 40.000 metros cuadrados de una convocatoria que, tras la de Fr¨¢ncfort y Londres, es la tercera en importancia en Europa del sector. Para empezar, unos carteles alertan en la entrada de la existencia de revendedores de entradas. Por 10 euros (y solo por un d¨ªa), el visitante accede a un sal¨®n que es una extra?a mezcolanza de una feria profesional tipo la espa?ola L¨ªber con la catalana diada de Sant Jordi: los puestos rivalizan sin cuartel con la presencia de los autores, que no paran de firmar, y con un sinf¨ªn de charlas y conferencias. Para aderezarlo a¨²n m¨¢s, las casas editoras compiten en visibilidad con los espectaculares puestos de las publicaciones institucionales de ¨¢reas regionales como La Provenza o Aquitania. Y, salpic¨¢ndolo, curiosidades como las ediciones del Ej¨¦rcito de Tierra franc¨¦s, ayer con la presencia de cuatro de sus autores-estrella (y nunca mejor dicho): dos coroneles, un teniente coronel y un capit¨¢n.
Ruiz Zaf¨®n, Mendoza y Gallardo, entre los primeros autores en firmar sus obras
En ese particular meelting-pot editorial, el pabell¨®n de Barcelona promovido por el Institut Ramon Llull, tiene un bien jugado discreto encanto: bajo un suelo que reproduce las baldosas gaudinianas del paseo de Gr¨¤cia que est¨¢ causando sensaci¨®n y una fotograf¨ªa del ya inconfundible skyline de la ciudad, unas grader¨ªas acogen los actos, en una especie de trastienda de una gran librer¨ªa con textos de autores catalanes publicados tanto en castellano, como en catal¨¢n y franc¨¦s, acompa?ado de t¨ªtulos de autores locales vinculados de alg¨²n modo a Barcelona y Catalu?a.
En total, se superan las 500 referencias, que est¨¢n haciendo las delicias de los asistentes, a tenor de los responsables de la ventas, en manos de la FNAC francesa, que comentaban en voz baja que el movimiento de caja era por momentos superior al que se estaba registrando en el espacio de Ruman¨ªa, pa¨ªs invitado este a?o a la feria y que no ha empezado con muy buen pie tras la renuncia a ¨²ltima hora de algunos de sus escritores estrella.
¡°El reclamo hoy de la marca Barcelona es muy fuerte¡±, expon¨ªa ayer como explicaci¨®n la editora de Grup 62 Ester Pujol, que tampoco olvidaba la particular fidelidad de Francia a la literatura catalana, que convierte el pa¨ªs en el segundo mercado receptor de estas letras, con una media de 15 t¨ªtulos traducidos al a?o. Eso quedaba manifesto en casi cualquier rinc¨®n del Sal¨®n: una aglomeraci¨®n de casi 150 personas rodeaba a Carlos Ruiz Zaf¨®n durante su intervenci¨®n en Radio France a media tarde; mientras, en el espectacular pabell¨®n de Actes Sud, el Victus de Albert S¨¢nchez Pi?ol luc¨ªa en un gran friso fotogr¨¢fico no muy lejos del Momento mori de Sebasti¨¤ Alzamora. En ese mismo sello, entre las novedades del matrimonio Auster (Paul y Siri Hustvedt) y en posici¨®n preferente estaba la traducci¨®n de Anatom¨ªa de un instante, entre otros t¨ªtulos de Javier Cercas, o una nutrida representaci¨®n de la obra de Baltasar Porcel. Espectacular es tambi¨¦n el trato que ha recibido Le cahier gris de Josep Pla por Gallimard, que lo ha lanzado estos d¨ªas y que un ejemplar del cual fue a parar la noche del jueves durante la inauguraci¨®n oficial a las manos del mism¨ªsimo presidente franc¨¦s, el socialista Fran?ois Hollande, que tambi¨¦n visit¨® a la delegaci¨®n catalana.
Hollande acab¨® el recorrido inaugural con un ejemplar de ¡®Le cahier gris¡¯ de Pla
Con esas coordenadas, y el notable trato que la prensa francesa est¨¢ deparando a la ciudad barcelonesa, no es de extra?ar que unas 70 personas se concentraran a una hora tan intempestiva como las tres de la tarde para escuchar a Sergi P¨¤mies y Jordi Punt¨ª, si bien es cierto que iban acompa?ados por el futbolista franc¨¦s y jugador azulgrana entre 2006 y 2008, Lilian Thuram, tambi¨¦n escritor. Si bien el encuentro versaba sobre los puentes entre cultura, sociedad y f¨²tbol, casi todo se centr¨® en lo ¨²ltimo. El futbolista-escritor hizo gala de nuevo de su bien amueblada cabeza para asegurar que el Bar?a es ¡°efectivamente m¨¢s que un club: not¨¦ c¨®mo la instituci¨®n est¨¢ por encima de los jugadores, y eso que son muy grandes¡±; que la entidad es tambi¨¦n ¡°un modelo de globalizaci¨®n inteligente al contar con una mas¨ªa que inculca sus valores a ni?os de todo el mundo, como Messi o Iniesta¡±. P¨¤mies y Punt¨ª no pod¨ªan m¨¢s que asentir y pespuntear con la historia de las cargas simb¨®licas del club y coincidir entre ellos con la ¡°bella oportunidad perdida¡± de que la participaci¨®n de los jugadores del Bar?a en? las victorias de la selecci¨®n espa?ola no se hayan manipulado en aras a una supuesta ¡°nueva Espa?a¡± y hayan llegado en el peor momento de las relaciones Catalu?a-Espa?a. ¡°Tampoco se le puede exigir al f¨²tbol que haga lo que no hace la cultura o la pol¨ªtica¡±, sentenciaron casi al alim¨®n.
El ¨¦xito de p¨²blico se mantuvo m¨¢s o menos constante en otras charlas, por ejemplo las que protagonizaron los escritores Javier Calvo, Jordi Bonells i Merc¨¨ Ibarz y, sobre todo, en algunas de las firmas posteriores. Especialmente notables fueron las que congregaron el prodigioso Eduardo Mendoza y Sergi P¨¤mies, no menos espectaculares que las de los dibujantes Miguel Gallardo, Rub¨¦n Pellejero y Jordi Bernet, especialmente este ¨²ltimo, con gente tray¨¦ndose una silla para esperar que estampara su firma en sus integrales de Torpedo o en episodios de Claro de luna. Un poco por sorpresa ha pillado a los organizadores la solicitud del p¨²blico en adquirir ejemplares en las lenguas originales, ya en catal¨¢n como en castellano. Por cierto, de esa pol¨¦mica, ni un comentario: ¡°Si la ciudad invitada es Barcelona, que est¨¦n autores de las dos lenguas es de sentido com¨²n: cualquier exclusi¨®n hubiese provocado un mal irreversible¡±, resum¨ªa P¨¤mies entre firma y firma.
Ante las colas y el inter¨¦s despertado ayer por las letras catalanas, igual el futuro est¨¢ en las ventas al extranjero, porque las nacionales dan grima: seg¨²n cifras que barajaban ayer algunos editores catalanes, las ventas de libros han ca¨ªdo en Espa?a entre febrero de 2012 y el mes pasado un 15%. El sector editorial y Barcelona tendr¨¢n que hacer muchos m¨¢s prodigios.
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