La oficina antifraude de la UE indaga el desv¨ªo de fondos Feder en Reus

La lista de presuntas irregularidades cometidas en el Ayuntamiento de Reus (Baix Camp) durante los pasados mandatos se agranda. Inspectores de la Oficina Antifraude de la Uni¨®n Europea (Olaf) han desembarcado en la ciudad para investigar posibles ilegalidades en proyectos gestados en Innova, el conglomerado de empresas del Consistorio. Los inspectores de la Olaf viajaron desde Bruselas hasta el municipio hace unos d¨ªas para recabar informaci¨®n y documentos, seg¨²n admiten fuentes del Ayuntamiento. En concreto, se centraron en el Centro de Bioempresas de Reus, una instalaci¨®n concebida como una incubadora de proyectos en torno a la salud y la nutrici¨®n. Para la construcci¨®n del complejo, la UE otorg¨® subvenciones a trav¨¦s del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder).

La Olaf persigue en Reus el rastro de esas contribuciones comunitarias, tras denunciar la Candidatura d¡¯Unitat Popular (CUP) de Reus, a principios de 2012, un posible fraude en la gesti¨®n del dinero de la Uni¨®n Europea durante el anterior mandato municipal. En ese momento, Llu¨ªs Miquel P¨¦rez (PSC) era el alcalde de la ciudad mientras que Josep Prat, expresidente del Instituto Catal¨¢n de la Salud (ICS), dirig¨ªa Innova adem¨¢s de los Servicios Generales del Ayuntamiento. En la actualidad, el Consistorio ¡ªque arrastra una deuda de 389 millones de euros¡ª est¨¢ cercado por las investigaciones judiciales. Entre ellas la referida a Prat y Carles Mant¨¦, exdirector del Servicio Catal¨¢n de la Salud (CatSalut).

Prat y Mant¨¦ est¨¢n imputados por seis delitos, como blanqueo, estafa y negociaciones prohibidas a funcionarios, por el pago de 720.000 euros desde Innova a una empresa de Mant¨¦. Hasta hace unos meses, este era presidente de Shirota Functional Foods, una sociedad de capital mixto dedicada a la investigaci¨®n nutricional a la que la fiscal¨ªa de Reus mantiene bajo sospecha por ser la destinataria de un aval de tres millones de euros concedido por el Ayuntamiento de Reus. Por si fuera poco, por este asunto P¨¦rez acudi¨® a declarar hace tres semanas ante la Guardia Civil.

La Olaf ha irrumpido en este vendaval de investigaciones para rastrear el destino de un mill¨®n de euros en subvenciones europeas concedidas a Reus

La Olaf ha irrumpido en este vendaval de investigaciones para rastrear el destino de un mill¨®n de euros en subvenciones europeas concedidas a Reus. Los inspectores intentan esclarecer si el dinero, dado al Centro de Bioempresas y tambi¨¦n a la rehabilitaci¨®n de la B¨°vila Sugranyes para espacio muse¨ªstico, se utiliz¨® debidamente. ¡°Olaf est¨¢ al tanto de ese asunto y ha abierto una investigaci¨®n. Para proteger los derechos individuales y no interferir en la investigaci¨®n, no puede hacer m¨¢s comentarios¡±, afirma desde Bruselas la oficina europea de lucha contra el fraude.

La visita de los inspectores a Reus, que tuvo lugar hace 10 d¨ªas, se sucede cuando este organismo ya lleva meses recibiendo informaci¨®n del juzgado de Reus sobre el estado de los fondos Feder, informan fuentes del caso.

Para restaurar la B¨°vila Sugranyes, se destinaron 457.748 euros, seg¨²n fuentes municipales. En esta obra, el Ayuntamiento de Reus no ha detectado incidencias, seg¨²n refleja un informe de intervenci¨®n emitido por el Consistorio en febrero de 2012. Sin embargo, no ocurre lo mismo en el caso del centro de bioempresas, para el que la UE ten¨ªa previsto aportar m¨¢s de 600.000 euros. Este fue un ambicioso proyecto en el que tambi¨¦n est¨¢ implicada la Universidad Rovira i Virgili. Su creaci¨®n se remonta a 2008, cuando Reus so?aba con convertirse en ejemplo de ciudad tecnol¨®gica del futuro.

En septiembre de 2009, el entonces consejero de Gobernaci¨®n y Administraciones P¨²blicas de la Generalitat, Jordi Aus¨¤s, anunci¨® la concesi¨®n de una subvenci¨®n de 905.662 euros al Ayuntamiento de Reus para la construcci¨®n del centro de bioempresas, presupuestado en un total de dos millones de euros. El proyecto recibi¨® finalmente 603.775 euros de los fondos Feder de la Uni¨®n Europea y 301.887 de una l¨ªnea de ayuda complementaria aportada por la Diputaci¨®n de Tarragona, inform¨® el Consistorio. De hecho, seg¨²n se pact¨®, los fondos Feder acabar¨ªan financiando el 50% del nuevo equipamiento.

En septiembre de 2008, el gobierno local hab¨ªa decidido, a propuesta de P¨¦rez, encargar las obras y la puesta en marcha del centro a la sociedad Redessa, una empresa de capital p¨²blico participada por diferentes Ayuntamientos de la comarca del Baix Camp, relata el documento del interventor. Sin embargo, el citado informe apunta ahora a un desequilibrio financiero en la construcci¨®n del centro. El desajuste en Redessa por este asunto est¨¢ cifrado en 1,2 millones de euros. En lugar de utilizarse para la construcci¨®n de estas instalaciones, este dinero habr¨ªa servido para pagar el edificio del Tecnoparc, donde se encuentra la Fira de Reus, seg¨²n fuentes municipales.

¡°Estos recursos se dedicaron en ese momento a otras finalidades¡±, desvel¨® ya el actual alcalde, Carles Pellicer (CiU), durante una conferencia en el C¨ªrcol de Reus el a?o pasado, elevando a 1,3 millones la cantidad de dinero desviado. El exalcalde P¨¦rez dijo ayer que ¡°quiz¨¢s los n¨²meros no cuadren con los del proyecto original; hubo una variaci¨®n de destino, pero dentro del mismo eje de proyecto¡±.

Hace unos meses, tras la denuncia de la CUP, el Consistorio rebaj¨® hasta casi la mitad el coste del Centro de Bioempresas para no perder las subvenciones y poder inaugurarlo.