Escrache a Irene Rigau contra el cierre de la escuela Can Montllor de Terrassa
La consejera declina denunciar a los padres que el domingo protestaron ante su domicilio en Ribes de Freser
Los escraches han dejado de ser patrimonio de las plataformas antidesahucios para abrirse camino a otro tipo de protestas sociales. En este caso, en contra de los recortes en educaci¨®n y el cierre de escuelas. Esta nueva modalidad la estrenaron el pasado domingo una quincena de familias de la escuela Can Montllor de Terrassa, que decidieron subirse a un autocar y plantarse en Ribes de Freser para protestar ante la casa que la consejera de Ense?anza, Irene Rigau, tiene en este municipio.
Can Montllor, un colegio de tres a?os de vida y unos 80 alumnos, no volver¨¢ a abrir las puertas en septiembre, despu¨¦s Ense?anza decidiera clausurarla escud¨¢ndose en el descenso demogr¨¢fico. Can Montllor se ubica actualmente en unas peque?as instalaciones provisionales, a la espera que se construyera el edificio definitivo, cosa que finalmente no pasar¨¢.
La del domingo fue una jornada marcada por la improvisaci¨®n y la casualidad, explican desde el AMPA, aunque la decisi¨®n de realizar un escrache la tomaron hace ya varias semanas en el seno de una asamblea de padres. A las 9.30 horas, una quincena de padres y sus peque?os, ataviados con gruesos anoraks, sal¨ªan en un autocar alquilado desde Terrassa y recorrieron 120 kil¨®metros hasta Ribes de Freser. ¡°Hab¨ªamos visto un v¨ªdeo en Internet donde Rigau explicaba que ten¨ªa una casa en Banyoles y otra en Ribes de Freser, as¨ª que decidimos hacer una excursi¨®n hasta este municipio¡±, explica Patricia L¨®pez, miembro del AMPA.
Dos horas despu¨¦s llegaban a este pueblo del Ripoll¨¨s, confiando en la suerte. ¡°La verdad es que no sab¨ªamos d¨®nde ten¨ªa la casa Rigau¡±, confiesa Montse Font, una de las madres que particip¨® en la protesta. Al bajarse al autocar, la primera parada fue un parque infantil para que los ni?os, de entre 3 y cinco a?os, ¡°se airearan un poco despu¨¦s del largo viaje¡±, explica Font. Espont¨¢neamente, los padres ¡ªataviados con la caracter¨ªstica camiseta amarilla, s¨ªmbolo de la protesta contra los recortes en educaci¨®n¡ª colgaron carteles reivindicativos en unas tablas de madera bajo la vigilancia de dos parejas de mossos. ¡°Un vecino que paseaba nos pregunt¨® qui¨¦nes ¨¦ramos y qu¨¦ hac¨ªamos. Y nos dijo que casualmente Rigau viv¨ªa en la casa enfrente del parque. Nos la se?al¨® y all¨ª estaba la consejera, asomada por la ventana¡±, relata la madre.
Las familias dejaron una carta pidiendo la continuidad de su escuela
Las familias permanecieron en el parque, donde hicieron un p¨ªcnic y escribieron una carta a mano, que dejaron en el buz¨®n de Rigau. En la misiva, los padres piden a la consejera que reconsidere su decisi¨®n de cerrar su escuela y proponen que el centro contin¨²e creciendo en m¨®dulos. A las cinco de la tarde, las familias regresaron al autocar y emprendieron el camino a casa.
Irene Rigau lament¨® este lunes la protesta, aunque admiti¨® que ya estaba enterada porque se hab¨ªa anunciado por las redes sociales. ¡°Es un tema que nunca ten¨ªa que haber salido de Terrassa¡±, apunt¨® la consejera, quien volvi¨® a justificar el cierre de la escuela de Can Montllor en que el pr¨®ximo curso habr¨¢ 192 ni?os matriculados en P-3 en la ciudad. ¡°No es un recorte, sino un descenso demogr¨¢fico", a?adi¨® en declaraciones a Catalunya R¨¤dio.
La responsable de Ense?anza, que asegur¨® que no denunciar¨¢ a los padres, lament¨® que el Ayuntamiento de Terrassa, gobernado por el PSC, haya ¡°avalado de forma seria¡± la protesta de las familias. ¡°La gente ha pensado que puede ir haciendo un itinerario reivindicativo para cambiar la situaci¨®n, pero la situaci¨®n no se puede cambiar¡±, zanj¨® la consejera.
La titular de Ense?anza dice que no cambiar¨¢ su decisi¨®n
El AMPA de Can Montllor no considera su acci¨®n del domingo como un verdadero escrache. ¡°No nos pusimos ante su puerta a gritar ni increparla, sino que hicimos una salida l¨²dica¡±, defiende Patricia L¨®pez. Por estos motivos, el AMPA ven inviable plantear una denuncia. ¡°\[Rigau\] No nos denuncia[RIGAU], no porque no quiere, sino porque no puede. No puede denunciar a unas familias por estar en un parque infantil¡±, subraya L¨®pez, quien insiste en que continuar¨¢n con los actos de protesta para evitar el cierre de su escuela. ¡°Es un personaje p¨²blico y deber¨¢ asumir las decisiones que toma¡±, remacha la madre.
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